No son pocos los que se preguntan por qué el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, en el caso de la ex primera dama Karime Macías de Duarte, cometió el aparente error de “poner la carreta adelante del caballo”.
Y es que argumentan si no habría sido mucho mejor plan detenerla primero y luego contar en dónde y cómo disfrutaba de su “abundancia” la esposa del ex gobernador Javier Duarte.
Pero lo que parecen no entender estos ingenuos es que a Yunes Linares no le interesa tanto aprehender a la señora Macías Tubilla –cuyo caso, en opinión de algunos abogados, es jurídicamente muy endeble–, sino sacarle raja política y electoral a este escándalo mediático para favorecer la complicada candidatura de su primogénito que aspira a sucederlo en el poder y el cual no logra despegarse en las encuestas del candidato de MORENA, Cuitláhuac García Jiménez, quien es remolcado por el arrastre popular de su candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, ya que según el último sondeo del diario Reforma publicado este miércoles, le saca 26 puntos de ventaja en las preferencias electorales al panista Ricardo Anaya, y 33 a José Antonio Meade, del PRI.
Porque si el propósito de veras fuera hacer justicia y recuperar los recursos públicos que presuntamente esta mujer desvió del DIF Veracruz, pues debieron haber solicitado la orden de aprehensión en su contra desde hace más de un año y haberla detenido junto con su marido cuando éste fue localizado y apresado en Guatemala a mediados de abril de 2017.
Y es que, por esas fechas, la esposa de Duarte, sus padres Jesús Antonio Macías y María Virginia Yazmín Tubilla, su hermana Mónica Ghihan Macías Tubilla y su cuñado José Armando Rodríguez Ayache ya eran investigados por la PGR, e incluso les fueron aseguradas cuentas bancarias.
Alberto Elías Beltrán, a la sazón subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales y actualmente encargado de la PGR, dijo en esa ocasión que la cónyuge del ex gobernador y sus familiares fueron dejados en libertad porque “(Karime) no tiene ninguna solicitud para una detención con fines de extradición.”
“Están libres, no tienen ninguna situación de enfrentar la justicia mexicana, entonces ellos pueden moverse libremente en México”, declaró Elías Beltrán en la conferencia de prensa que ofreció en la Embajada de México en Guatemala.
¿Por qué la Fiscalía General de Veracruz no solicitó en aquella ocasión a la PGR que se detuviera también a la esposa de Duarte, si desde un par de meses antes, en febrero de 2017, ya había recibido una denuncia de hechos en contra de la ex presidenta del Sistema Estatal del DIF por el presunto desvío de 41 millones de pesos durante el primer año de la administración duartista?
Ahora Yunes Linares hasta anda presumiendo el “trabajo de inteligencia” para localizar a Macías Tubilla en Londres. Sin embargo, desde hace un año, circularon en las redes sociales fotografías de Karime caminando tranquilamente por las calles londinenses.
La FEPADE a prueba
Este martes 29 estuvo en Xalapa el titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales (FEPADE), de la Procuraduría General de la República, Héctor Marcos Díaz-Santana Castaños, para firmar con el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares un acuerdo para la “Prevención del Delito Electoral y Blindaje Electoral”.
Ahí, en ese evento, el mandatario panista, quien pretende imponer a su primogénito en la gubernatura, afirmó que será respetuoso de la legalidad y que no permitirá que se desvíen recursos públicos en apoyo de ningún candidato.
Pero este miércoles, empleados de la Secretaría de Educación de Veracruz difundieron una misiva para denunciar que de la Oficialía Mayor de la SEV los están presionando para que se incorporen sin goce de sueldo a la campaña del abanderado del frente PAN-PRD-MC, Miguel Ángel Yunes Márquez.
Señalan concretamente a Rubén Becerra Pérez, subordinado del Oficial Mayor Abel Cuevas Melo.
Vamos a ver si la FEPADE de veras actúa contra los delincuentes electorales en Veracruz o si su titular sólo vino a hacerle “el caldo gordo” al gobernador nepotista.