Cd. de México, México.- Tras el sabotaje de un tren en Orizaba, Veracruz, la industria se paralizó en el sureste del País, advirtió un jefe de operaciones de Ferromex, consorcio responsable del tráfico de locomotoras desde los rieles.
Por el atentado, más de 300 mil toneladas de mercancías están la espera de ser transportadas al Valle de México, principalmente granos, polietileno, químicos y productos importados.
Las vías dañadas y las tolvas descarriladas impiden el paso de trenes desde Coatzacoalcos y el puerto de Veracruz a Puebla y después al centro del País.
Delincuentes que operan en Veracruz a la vista de policías del estado y federales cortaron las mangueras de freno al ferrocarril y dividieron a éste en tres, lo que ocasionó el deslizamiento sin control de 39 carros y cuatro locomotoras.
El jefe de operación de la ferroviaria en la zona acusó que las autoridades de Veracruz, la Policía Federal y el Ejército realizan operativos estériles.
«Los han visto que roban mercancías. No detienen a ninguno. Lo peor, no dan seguimiento a quien compra esa mercancía robada. Son operativos falsos, de pantalla, de teatro», indicó el mando ferroviario.
El jefe operativo dijo a REFORMA que en los últimos siete eventos los delincuentes, ligados a Los Zetas, tienen bajo su mando a una red de pobladores en Orizaba y Acultzingo para afectar las operaciones del tren, ahora mediante sabotajes.
«El tema ya es de seguridad nacional, nadie, diputados, senadores, policías, militares, nadie está volteando a ver esta realidad.
«El sábado, los criminales descarrilaron un tren con trigo, pero también transportamos químicos peligrosos, de haber sido así estuviéramos hablando de una matazón en Orizaba, de cientos de muertos», advirtió el mando operativo de trenes.
«Nos estamos enfrentando a temas de sabotaje, atentados contra la operación de los trenes que llevan productos peligrosos de la industria como cloro utilizado todos los días para limpiar el agua de la Ciudad de México, amoniaco. Eso derramado puede ocasionar una verdadera tragedia».
La fuente sostuvo que el tramo de Orizaba-Acultzingo representa de mayor riesgo, sólo por la operación de las máquinas, pues el trayecto representa el manejo de cuatro locomotoras y más de 60 carros, con 90 toneladas cada uno.
«De por sí debe ser un trabajo profesional para no afectar a la población, pero si tenemos en contra los actos de estos criminales, miles de familias están en riesgo, es lo que no alcanzan a ver, no están dimensionando el tema.
«La vida de estas personas está en manos de estos criminales, estamos a la deriva por las decisiones de estos criminales. ¿Cómo es posible que en menos de un mes tengamos siete sabotajes? Existe una ausencia real de las autoridades de Veracruz y del Gobierno federal», reprochó.
Explicó que en el sabotaje del sábado en Orizaba los delincuentes cortaron los mecanismos de los frenos, lo que provocó que el tren avanzara hacia atrás en una pendiente y chocara con otro tren, dejando a la tripulación en estado grave de salud
El jefe operativo señaló que tras el sabotaje de un tren en Orizaba, Veracruz, la industria se paralizó en el sureste del país.
Por el atentado más de 300 mil toneladas de mercancías están a la espera de ser transportadas al Valle de México, sobre todo granos, polietileno, químicos y productos importados.
Las vías dañadas y las tolvas descarriladas impiden el paso de trenes desde Coatzacoalcos y el puerto de Veracruz a Puebla y después a la centro del país.
El jefe de operación sostuvo que aún con el sabotaje reportado en Orizaba, el Gobierno del estado y autoridades federales no implementaron una acción especial para investigar el caso.
«Estamos hablando de vías generales de comunicación, esto es grave, las autoridades de todos los niveles están solapando a estos criminales, ninguna, hace lo que le corresponde, pasan los hechos, vienen, se paran, toman fotos y se van», acusó.
Con información de Reforma