Estudiantes y académicos de las facultades de Artes Plásticas (FAP), Arquitectura y Biología de la Universidad Veracruzana (UV) desarrollan en este ciclo escolar el proyecto “HÁBITaRTE. Intertextualizando con la cultura” en el municipio de Ixhuacán de los Reyes, Veracruz.

La finalidad, como el título lo indica, es rescatar y difundir los valores culturales del lugar, por ello el cuerpo académico (CA) Arte y Transdisciplina de la FAP, en colaboración con los CA Biología de la Salud y Cultura del Hábitat, de Biología y Arquitectura, respectivamente, así como estudiantes universitarios, trabajan en cinco proyectos, cuyos resultados se presentarán en el Jardín de las Esculturas el jueves 7 de junio a las 17:00 horas.

“Azul 88”, una instalación artística cuyo elemento principal son las mariposas azules y ochenta y ocho que en la zona están en peligro de extinción; “Camino al paraíso”, una intervención gráfica en un puente colgante cuyos elementos discursivos están fundamentados en la flora y la fauna del lugar; “Dialogando con la muerte”, otra intervención gráfica, en este caso en las paredes del panteón principal del lugar.

Dos más son: “Alfombra gráfica cultural”, una intervención gráfica en un puente de concreto, cuyo discurso está basado en las tradicionales alfombras de aserrín, y “La casa de los vestidos”, diseño editorial y documental e identidad gráfica de la colección de los 400 vestidos con los que cuenta la Virgen de los Remedios, imagen significativa en la localidad.

José Cuauhtémoc Méndez López, académico de la FAP, comentó que respondieron a la convocatoria que les realizó el Ayuntamiento, que está interesado en postular a Ixhuacán y lograr la calificación de Pueblo Mágico que otorga la Secretaría de Turismo del Gobierno Federal.

En el proyecto están involucrados alrededor de 90 estudiantes, principalmente de la FAP; “cada uno de los catedráticos incluye su experiencia educativa (EE) para poder vincular los proyectos que se van desarrollando paulatinamente, porque éstos no están apartados del contenido del programa que debemos cubrir”, explicó.

Tras una primera visita a la localidad, estudiantes y académicos determinaron los lugares y espacios físicos que desean intervenir; en una segunda presentaron las propuestas al alcalde, José Luis Vargas González, quien dio el visto bueno y asumió el compromiso de que su administración financiaría los cinco ya citados.

Martín Melchor Trujillo, representante de la Casa de Cultura de Ixhuacán de los Reyes, comentó a Universo que el proceso para ser calificados como Pueblo Mágico es largo, pero su encuentro con la UV en tal camino les ha resultado grato.

“Ahora con el trabajo de la Universidad Veracruzana se nos han facilitado muchas cosas, porque nos damos cuenta de que no es tan complicado; más bien, en ocasiones es necesario pedir ayuda. Los muchachos están trabajando mucho”, compartió y añadió que el alcalde aprobó prácticamente todas las propuestas presentadas por los estudiantes y académicos.

“Aunque hemos ido a muchos lugares a pedir ayuda, en algunos no nos la han brindado, no han tenido el espacio y el tiempo, pero siempre hay quien lo tiene”, añadió el funcionario municipal.

“Estos proyectos complementan nuestro proceso creativo”

Algunos testimonios de los estudiantes de la FAP coinciden en lo favorable que les resulta desarrollar trabajo de campo y hacerlo en colaboración con estudiantes y académicos de disciplinas aparentemente ajenas a su quehacer, como es el caso de la biología y la arquitectura.

Raúl Enrique Moral García, estudiante de la Licenciatura en Artes Visuales, forma parte del equipo que desarrolla el proyecto “La casa de los vestidos” y compartió que en la primera visita identificaron el potencial que tal acervo tiene.

“Nuestra idea consiste en recopilar todos los vestidos, a través de un registro fotográfico, y con base en ello realizar un catálogo; además, diseñar una identidad del sitio para generar una imagen completa, que se distinga que ese lugar es un pequeño museo.”

Pedro Jesús Soledad Reyes, también de Artes Visuales, explicó que la intención es destacar la identidad que el pueblo tiene con esa tradición, que data de hace más de 65 años, cuando hallaron a tal virgen. “A partir de una imagen estética queremos que esto prevalezca. Nosotros, independientemente del catálogo, también elaboraremos un video para que a las personas les quede claro a qué se debe esa festividad”.

En este proyecto se conjugaron fructíferos encuentros, explicó Pedro Jesús: “Tanto Raúl como yo propusimos este proyecto porque hay cosas que son afines a lo que nosotros trabajamos en el arte, o lo que pretendemos hacer como artistas. Mi amigo tiene una larga tradición de diseñar vestidos y yo tengo la necesidad de archivar, encuadernar e ilustrar. El proyecto compagina y complementa nuestro proceso creativo”.

Jesús David Soto Pozos, de Diseño de la Comunicación Visual, también colabora en este proyecto y compartió que experimenta mucha empatía con este quehacer. “Se explora esto de conectar disciplinas y es muy enriquecedor, nos amplía la visión y el horizonte de lo que podemos hacer con nuestro futuro”.

Daniela Colorado Mora, de Artes Visuales, habló de “Azul 88”, cuya intención primordial es la inclusión, por ello está contemplado que no sólo el equipo trabaje, sino todas las personas posibles del pueblo. Explicó que las mariposas que protagonizarán la instalación artística en uno de los muros que está a un costado del palacio municipal, serán elaboradas por niños y adolescentes del lugar.

El material con que se crearán las mariposas es una pasta cuya principal materia prima es papel reciclado que recolectaron en el mismo pueblo. Con ello cumplen dos premisas: costo accesible y recursos de la región.

“Queremos remarcar que estas especies de mariposas están en peligro de extinción en Ixhuacán. El mensaje es que debemos revertir eso, además de que sea una guía turística, queremos contribuir a rescatar la flora y fauna de la comunidad.”

Ismael Gabriel Rubio, de Diseño de la Comunicación Visual, dio detalles sobre el proyecto “Camino al paraíso”, un puente colgante cuyas dimensiones oscilan en 92 metros de largo por 2.5 de ancho. “Para llegar a esto fue importante pensar en la flora y fauna endémica de la región. Nuestra intención es tratar de incluir la riqueza del municipio, tanto en la biodiversidad como la cultura”.

Citó también que el puente comunica al pueblo con la capilla de la virgen de Guadalupe, cuya celebración es el 12 de diciembre. “Comprendemos que la función básica de ese puente es comunicar al municipio con su identidad religiosa; consideramos que era importante intervenirlo porque turísticamente también llamará la atención; tenemos que lograr una conexión entre la identidad y la conservación”.

Detalló que se trata de un proyecto que contempla la intervención total del puente, tanto los pilares como la base, los cables tensores, la malla que los sujeta y las propias tablas.

Ismael Gabriel recalcó que para él tiene trascendental importancia ser parte de un trabajo de intervención artística que va más allá de las aulas y poner sobre la mesa la necesidad de la vinculación interdisciplinar. “Este proyecto no se podría hacer sólo partiendo desde las artes, es tan importante la arquitectura como los saberes de la biología. La importancia y riqueza recae en eso, que es un trabajo multidisciplinar”.

 

El arte, la arquitectura y la biología

La académica de la Facultad de Biología, Vianey del Rocío Torres Pelayo, destacó lo enriquecedor que les ha resultado trabajar con personas abocadas al arte y con proyectos concretos que tendrán un impacto favorable a una sociedad. Comentó también que en sus recorridos han encontrados especies de aves que no estaban registradas en esa región, lo cual les plantea nuevos temas de investigación.

Por su parte, Citlali Aguilera Lira, coordinadora de Siembra UV e integrante de Centro de EcoAlfabetización y Diálogo de Saberes, colabora en el CA Arte y Transdisciplina con el registro del patrimonio biocultural a través de la gastronomía. “En los platillos que las personas entrevistadas nos citan sale a relucir el nombre de Ixhuacán, que viene de teo-izhua-can cuyo significado es ‘lugar de las divinas hojas del maíz’; entonces, el maíz dentro del agroecosistema milpa todavía se conserva y se debe seguir conservando”.

Luis Arturo Vázquez Honorato, académico de la Facultad de Arquitectura, citó: “En el caso de Arquitectura, al igual que las otras dos disciplinas, nos interesa conjuntar las ideas para desarrollar propuestas que beneficien a la gente de Ixhuacán. En el tenor de nosotros está hacer un planteamiento desde una visión de comportamientos, que es lo que más une a este grupo”.

Explicó que desde la arquitectura el estudio del comportamiento define lo que se puede realizar en el espacio. “Creo que ése es el elemento neurálgico de conexión de las tres disciplinas. La expectativa es dar apoyo a esa pretensión de ser Pueblo Mágico, pero nuestro proyecto va hacia el interior de Ixhuacán, tratando de interconectar estos puntos culturales y tradicionales, porque muchas veces se plantean conexiones sin vincularlas con elementos naturales y eso contrasta mucho con lo que hoy tenemos pensado como ciudad o localidad”.

Javier Petrilli Rincón, académico de la FAP, citó la importancia del diálogo entre las artes, la biología y la arquitectura, cuya pretensión es un acercamiento interdisciplinario a un lugar, así como la transversalidad de las EE.

“Desafortunadamente en las facultades no se da tanto y a través de estos proyectos deberíamos intentar encontrar esos espacios de diálogo que permitan llevar a los estudiantes a experiencias reales que toquen ese sentido de la profesionalización. Si bien Ixhuacán sale ganando, nosotros ganamos más porque estamos detonando en los estudiantes ideas renovadas que les permitirán proponer. Para mí ése es el sentido que tienen proyectos como éste, que es un espacio de diálogo con problemas reales que se resuelven y dan aprendizaje.”

Otros académicos de la UV que también colaboran en “HÁBITaRTE. Intertextualizando con la cultura” son: Bertha Lilia Salazar Martínez, Guadalupe Buzo Flores, Noé Hernández Aguilar, y Abraham Méndez Gómez.

Karina de la Paz Reyes Díaz/Prensa UV