Coetzala, Ver.- Obstrucciones intencionales en la red de agua del nacimiento «El Naranjal», han afectado la distribución del vital líquido en el municipio de Coetzala.
Desde hace una semana, 300 familias sufren por la falta de agua potable al grado de que, los habitantes, han tenido que comprar pipas para poder solventar sus necesidades diarias.
Ante el reclamo de los habitantes, las autoridades municipales iniciaron una inspección en la red de distribución, hallando como causa del desabasto la invasión a la toma de agua intencionalmente para obstruir su paso con rocas de diferentes tamaños.
Según las autoridades municipales, ha resultado difícil poder removerlas en medio de la tubería por lo que, aunque han comenzado los trabajos de limpieza, el problema podría extenderse varios días más.
Además, esto se suma que también el nivel del agua ha disminuido en gran porcentaje en los últimos cinco años.
Miguel Ángel Contreras Mauss/Avc