Hasta donde tenemos entendido, el equipo de trabajo para la campaña del candidato de la alianza PRI-PVEM, José Yunes Zorrilla, estará conformado por gente como él: honesta, joven, con ideas nuevas, comprometida con la sociedad, experta en diversos temas de la administración pública, veracruzanos ejemplares. Sin embargo, no faltan los oficiosos que se adelantan a mencionar nombres de personas a las que ellos quisieran impulsar para tenerlos como “posiciones propias” y, a la hora del reparto de cargos, pasarles la factura. ¿Qué haría en favor de la campaña de Pepe Yunes el señor (tiene dos doctorados comprados) Carlos García Méndez, un hombre de la tercera edad a quien se le dificulta moverse, sin prestigio como académico salvo que supo capitalizar el rechazo de los aspirantes a ingresar a la Universidad Veracruzana, fundando una universidad particular de la que se hizo rico, que tuvo la oportunidad de ser secretario de Economía en el gobierno de Fidel Herrera Beltrán y no fue capaz de traer a Veracruz ni una fábrica de  tabiques?… Nada. Lo mismo se puede preguntar del doctor en derecho electoral Francisco Berlín Valenzuela, un profesionista mediocre a quien su pariente Miguel Alemán Velasco, siendo gobernador, le creó El Colegio Veracruz para que tuviera suficientes recursos disponibles, sin haber logrado nada como titular de esa institución, pero que además ha sido el más feroz enemigo del presidente del CDE del PRI, Américo Zúñiga Martínez, a quien acusa de haber negociado el paso del gasoducto por las entrañas de Xalapa poniendo en riesgo la vida de sus habitantes. No, señores, no propongan tonterías. Veracruzanos valiosos hay muchos, no los anden buscando en las salas de velación.