Banderilla, Ver.- Aún no inicia la temporada de estiaje y varios de los manantiales que proveen de agua potable a los habitantes de este municipio ya están secos, por lo que se hace un llamado a cuidar el vital líquido.
A pesar de que la naturaleza es pródiga en cuanto a la disposición del agua en esta región, el hecho de que los manantiales comiencen a entrar en receso es un llamado a la población y a las mismas autoridades.
Este domingo desde temprana hora, activistas a favor del cuidado al medio ambiente realizaron un recorrido por las márgenes del río Sedeño para el retiro de basura, alertando sobre esta problemática que se agravará en los próximos días.
Alejandro López Atilano, integrante de la Organización No Gubernamental “Hygea-México”, recordó que el agua que toman los banderillenses viene de la cuenca alta del río sedeño, con 62 litros por segundo.
“Estamos notando que los manantiales en Banderilla y otras localidades cercanas, ya se están agotando, están con poca cantidad de agua y creemos que este año va a ser el más grave de estiaje”.
Recordó que hace diez años hubo un periodo sin agua, en donde de los 62 litros por segundo solamente llegaban cinco, “no hay estudios previos pero por lo que observamos los manantiales están agotándose, por ello creemos que va a ser uno de los años de mayor estiaje en Banderilla y Xalapa”.
Expuso que el estiaje se tiene contemplado para los meses de abril, mayo y junio, sin embargo dos manantiales ya están secos desde enero y febrero, que es la época del deshielo del Cofre de Perote, “está muy grave la situación, hay que tomar cartas sobre el asunto, informarnos, y que el empoderamiento mejore la calidad de vida”.
Enumeró que los manantiales secos hasta el momento se ubican dos en Banderilla y uno más en Rafael Lucio, los cuales dan vida a un afluente del río Sedeño llamado Nahualapan, “ya están en total sequía, ya no tiran agua”.
Además de los 26 manantiales ubicados en el centro de Banderilla, en dos ya no hay presencia del vital líquido, “es un gran llamado de atención de la naturaleza que están diciendo que la cuidemos”.
Indicó que el problema se origina porque los bosques ya no captan la misma agua debido a la deforestación, cambio climático, ausencia de humedad y otras cuestiones climáticas “que dependen de la madre naturaleza”.
Por último López Atilano demandó mayor presencia de las autoridades en la resolución de los problemas, “nomás nos escuchan por obligación, creo, pero falta la presencia de ellos físicamente, moralmente y en trabajo, herramientas y económicamente».
Para mayor información consultar la página electrónica del Área Natural Protegida La Martinica y la página de Hygea México.
Avc