La Paz, 10 feb (Xinhua) — La tradición, la fraternidad y la algarabía son elementos propios del carnaval en Bolivia, con características singulares en cada región del país que reflejan una diversidad cultural.

Dentro de esta diversidad están las tradicionales «comadres» en Tarija (sur), la «folclórica» de Oruro (centro), la «farándula» en Santa Cruz (este), el «Jisk’a Anata» en La Paz (oeste) y el «Corso de Corso» en Cochabamba (centro).

En entrevista con Xinhua, el sociólogo Mario Matos explicó que según estudios antropológicos, estas tradiciones culturales se repiten de generación en generación.

Los festejos de la época de carnaval en Bolivia comienzan con el llamado «jueves de compadres y comadres».

En Tarija, personas de cada pueblo se reúnen en casas de familias, sedes de comparsas tradicionales u otros locales, para intercambiar una canasta llena de frutas y masitas (repostería) a manera de presentes.

Es común ver a comadres y compadres al amanecer del viernes cubiertos de harina o talco, papel picado y serpentinas, luego de haber ingerido chicha (bebida de maíz fermentado), con ramos de albahaca en sus manos, símbolo del carnaval en el sur boliviano.

En tanto, el carnaval de Oruro 2018, que se realiza del 9 al 12 de febrero, es una celebración en la que destaca la gran peregrinación al Socavón (fiesta central).

La fiesta se efectuará mañana sábado con la movilización de al menos 80.000 personas, entre músicos y bailarines, sin contar con los espectadores que superan los 200.000 apostados a lo largo de la entrada de la ciudad.

«Cada año esta ciudad se convierte en el centro de las miradas de toda Bolivia y gran parte del mundo, porque se celebra la entrada del fastuoso carnaval de Oruro», comentó el entrevistado.

Matos explicó que por su algarabía es «majestuoso», celebración declarada en 2001 como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad por parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

Los grupos folclóricos participantes, que provienen de todas partes de Bolivia, preparan durante todo el año sus galas para desfilar con bailes durante horas.

Se trata de un recorrido de varios kilómetros, que concluye en la iglesia de la Virgen del Socavón, a quien ofrecen su baile con trajes espectaculares.

El entrevistado describió a Xinhua que la fiesta se desarrolla con la participación de más de 60 grupos folclóricos que recorren la ciudad por una ruta de 5 kilómetros, acompañados de bandas musicales y asistentes.

Entre las danzas principales que muestras sus galas están diablada, caporales, morenada, suri-sicuris, llamerada, cullawada, waca-waca, pujllay y tinku.

Otras fiestas emblemáticas de carnaval en Bolivia se realizan en el departamento oriental de Santa Cruz, donde las comparsas dan rienda suelta a su presentación la noche del sábado.

La Cámara de Diputados aprobó el jueves una ley que declara Patrimonio Cultural e Inmaterial del Estado Plurinacional de Bolivia al Corso de las Ciudadelas de Pampa de la Isla, Plan Tres Mil y Villa Primero de Mayo.

Las tres rescatan las tradiciones y costumbres carnavalescas del departamento cruceño como expresión viva de valores y tradiciones populares.

De acuerdo con los promotores de la iniciativa, para el Estado es prioritario el rescate, la preservación y la salvaguarda del patrimonio cultural existente en el país sudamericano, con el fin de fortalecer los procesos culturales e históricos de las futuras generaciones.

El carnaval de La Paz (oeste) es también otro de los escenarios esperados en Bolivia, con la participación de más de 55 agrupaciones autóctonas, provinciales y barriales, entre las que destaca «el pepino» y «la chuta».

El Jisk’a Anata («fiesta pequeña» en lengua aymara) hará su presentación el próximo lunes 12 de febrero como una de las manifestaciones autóctonas más importantes del carnaval en La Paz.

Fraternidades y grupos autóctonos de diferentes instituciones, clubes y provincias del departamento de La Paz realizarán su recorrido.

El especialista recordó que de acuerdo con investigaciones, el lunes de carnaval estaba reservado desde los años 40 del siglo pasado al concurso de orquestas típicas y danzas nacionales, una especie de entrada folclórica.

A su vez, la fiesta de carnaval de la ciudad central de Cochabamba se realizará el próximo 17 febrero, y contará con más de 89 agrupaciones, entre autóctonas y tradicionales, unidades militares, fraternidades folclóricas y una decena de carros alegóricos.

El denominado Corso de Corsos o Carnaval de la Concordia cierra la temporada de carnaval en Bolivia.

El carnaval demuestra cada año la unidad en la diversidad de las danzas y música del territorio boliviano, según Matos.