Tlaxcala, México, 2 feb (Xinhua) — Una cría de león blanco, una especie en peligro de extinción, nació el 28 de octubre pasado en el Zoológico del Altiplano del central estado de Tlaxcala, donde será presentado por primera vez al público el próximo domingo.

Para celebrar la llegada de este pequeño felino, cuyo peso actual es de 11 kilogramos, se ha sometido a un concurso el nombre de este ejemplar, en el que centenares de niños mexicanos y hasta de España han enviado un sinnúmero de propuestas, explicó el coordinador general de Ecología del estado de Tlaxcala, Efraín Flores, a la agencia Xinhua.

«El león blanco es actualmente una especie en peligro de extinción y de acuerdo con estadísticas oficiales existen 300 en cautiverio en todo el mundo, además de que son difíciles de localizar en libertad», explicó Flores durante una visita que realizó esta agencia informativa al nuevo hogar del pequeño felino en donde es cuidado por un equipo de veterinarios que desde su nacimiento.

Por ello, el funcionario estatal resaltó que «es una verdadera satisfacción y orgullo».

Flores destacó además la importancia de este suceso al explicar que de acuerdo a los datos oficiales, solamente existen tres antecedentes de nacimiento de este tipo de felino en zoológicos mexicanos pero han sido privados. «Este es el primero que ocurre en un zoológico público», apuntó.

La cría es hijo de una pareja de leones blancos que llegaron hace cinco años al Zoológico del Altiplano en donación y ellos son: Metztli (Luna en náhuatl) y Tonatiuh.

Además de la pareja y su cachorro, hace un año que llegó una hembra de la misma especie, cuya edad actual es de 2 años, y que de acuerdo a Flores esperan que en unos años pueda hacer una nueva familia a lado del nuevo miembro.

«El cachorro es totalmente sano, es un león blanco que nació el 28 de octubre, actualmente pesa 11 kilos y mantiene una alimentación de tres tomas de leche al día y come 500 gramos de pollo, pechuga de pollo y es una dieta que lleva actualmente», explicó el funcionario estatal.

El cachorro, al momento de nacer, estuvo amenazado a sobrevivir pues la madre lo rechazó. Sin embargo, los médicos veterinarios, encabezados por Santa Melina de la Cruz Espinoza, diseñaron un protocolo para poder sacarle el calostro a la felina adulta, para que el cachorro comiera y generara defensas. Además, utilizaron una fórmula láctea especial para felinos, lo que ha mantenido sana a la cría.

«Un reconocimiento porque es un logro de equipo de trabajo y estamos muy orgullosos y contentos de los logros obtenidos», agregó Flores.

El león blanco llega a pesar en promedio 250 kilos y medir hasta tres metros de largo, desde la nariz hasta la cola, en edad adulta, explicó por su parte

El cachorro, aún sin nombre oficial, se suma a 54 especies que nacieron durante 2017 en este Zoológico de Tlaxcala, lo que para las autoridades locales, es además «una muestra de que con un buen manejo y trabajo, se puede realizar un proyecto de conservación y preservación de especies, principalmente en peligro de extinción», dijo Flores.

Para el funcionario local destacó la importancia de la existencia de los zoológicos en el mundo, en los que aseguró que «pueden ser un centro de conservación, de preservación, de enseñanza».

«Entendemos la parte de quienes están en contra de un zoológico o animales cautiverio, pero también es cierto que en el Altiplano tratamos de tenerlos a lo más que se pueda a las especies en su hábitat habitual para el desarrollo y crecimiento de los animales y así a su vez, podamos nosotros entender su compartimiento, entender su dinámica de vida y lograr su reproducción animal que es uno de los propósitos para la conservación y eso creo es algo digno a nivel mundial», agregó al confesar que además ante los resultados obtenidos esperan apoyo internacional y nacional para seguir con la meta».

El singular cachorro, de ojos azules, actualmente está desparasitado, vacunado y casi todo el día gruñe, muerte y se divierte con una pelota, y otros juguetes así como con un pedazo de manguera y un enorme bote de plástico que cuelga de su reja y suena al moverlo como una sonaja, al que le introdujeron unas semillas de frijol.

«Es una etapa en la que podemos acariciar, alimentarlo directamente pero en tres semanas será complicado y por ser un animal salvaje deberemos tomar medidas y distancias para poder manejar», dijo por su parte la médico veterinaria De la Cruz Espinoza, quien desde la llegada de la cría, ha estado al pendiente y es como su segunda madre.