MEXICO, 29 ene (Xinhua) — La industria automotriz de Norteamérica evaluará en las próximas semanas una serie de ideas que presentó el gobierno de Canadá y que buscan destrabar el capítulo de reglas de origen del sector en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
El presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), Eduardo Solís, dijo el lunes que la delegación de Canadá puso en la mesa de renegociación «un marco conceptual» para proponer a Estados Unidos y a México un cambio metodológico y medir de una forma distinta el costo neto de los vehículos.
El objetivo es analizar el esquema como un contrapeso a la propuesta que hizo Estados Unidos a mediados de octubre para elevar dentro del pacto el porcentaje de contenido regional del sector automotriz al 85 por ciento, con el 50 por ciento sólo estadounidense.
«No se habló de números ni de porcentajes» , dijo Solís en una entrevista telefónica, al terminar la sexta ronda de renegociación del TLCAN en la ciudad canadiense de Montreal.
«Nadie ha movido sus posturas, estamos saliéndonos como de lado a hacer un análisis de metodología para evaluar si eso nos puede destrabar» , agregó.
Los gobiernos de México y Canadá han mostrado su rechazo a la propuesta de Estados Unidos de modificar la regla y han externado su deseo de mantenerla en su nivel actual, del 62,5 por ciento para automóviles y del 60 por ciento para autopartes.
La norma de origen automotriz del TLCAN, la más elevada del acuerdo trilateral, especifica la proporción del vehículo que debe ser construido en los países que integran el TLCAN para garantizar el libre comercio.
Al término de la sexta ronda el lunes, el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, expresó su oposición a la propuesta de Canadá en materia automotriz al considerar que derivaría en un menor contenido regional del que existe actualmente.
El representante de los fabricantes de autos en México consideró que todavía es muy prematuro tener una reacción a las ideas canadienses, al tratarse de un esquema muy complejo.
«Lo que sigue es trabajar con los colegas de Estados Unidos y Canadá para entender el marco conceptual, que es bastante amplio, y tiene bastantes huecos para que la industria les ayude a ir poniéndole los elementos que se requieran para que funcione y sirva» , dijo Solís.
La sexta ronda para renegociar TLCAN terminó entre pedidos de Estados Unidos a sus socios Canadá y México por acelerar el ritmo de las conversaciones, pese a que éstas han mostrado progresos con el cierre de varios capítulos.
La séptima ronda se llevará a cabo en la Ciudad de México, del 26 de febrero al 6 de marzo.
Canadá, Estados Unidos y México están renegociando el TLCAN desde el pasado 16 de agosto a solicitud de la administración del presidente Donald Trump, quien considera que el pacto, vigente desde 1994, ha sido injusto para su país y ha amenazado con abandonarlo en varias ocasiones.