Delitos como el soborno, la malversación, desvíos de recursos y cohecho internacional serán sancionados en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte a través de obligaciones “espejo” para México, Canadá y Estados Unidos.
Esto quedó establecido al cerrarse el capítulo de anticorrupción en la sexta ronda de negociaciones del TLC.
Juan Rodrigo Moreno, consejero delegado para Asuntos Internacionales de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), detalló a Excélsior que cada uno de los países deberá regular su marco jurídico para estar a nivel internacional en materia anticorrupción.
Ahora, México deberá concluir los temas pendientes en la agenda del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), como la designación de la fiscalía general de la nación, la fiscalía especializada en materia anticorrupción y las leyes secundarias.
Éste es un texto ligado a otros apartados como el de transparencia y mejores prácticas regulatorias. Los temas que siguen pendientes son la regla de origen en el sector automotriz, la temporalidad agrícola, solución de controversias comerciales y la cláusula de extinción quinquenal.
CORRUPCIÓN TENDRÁ CASTIGO EN TLCAN
En la sexta ronda de negociaciones para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte
(TLCAN) se cerró el capítulo de anticorrupción, el cual tipifica delitos como soborno, malversación, desvíos de recursos y cohecho internacional, con obligaciones “espejo” para los tres países.
Este apartado plantea elementos vinculantes en materia de derecho internacional y representa un avance hacia mecanismos y mejores prácticas que cumplan con los más altos estándares jurídicos.
«Con este texto podremos alcanzar los niveles de certeza jurídica que requiere la inversión y el comercio”, dijo Juan Rodrigo Moreno, consejero delegado para Asuntos Internacionales de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) a Excélsior .
En entrevista detalló que el rubro de anticorrupción obliga a México, Canadá y Estados Unidos a tener un compromiso jurídico “espejo”; es decir, cada uno de los países deberá regular su marco jurídico para estar a nivel internacional en la normatividad aplicable en materia de anticorrupción.
«Se establecen mecanismos de colaboración y cooperación, sistemas de denuncias y actos de corrupción, protección de denunciantes, integridad de funcionarios y gobiernos, además de responsabilidad de empresas”.
Moreno comentó que el lenguaje del capítulo es de carácter vinculante, donde se declara el compromiso de cada uno de los países para fortalecer sus sistemas legales y dar certeza a los demás miembros del TLCAN.
Dijo que México deberá concluir los temas pendientes en la agenda del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), como la designación de la fiscalía general de la nación, la fiscalía especializada en materia anticorrupción y las leyes secundarias de obra pública, adquisiciones y servicios relacionados.
El gremio patronal espera que el avance en el acuerdo comercial tenga “un efecto cascada” en el país para que se logre tener un andamiaje jurídico acorde con las prácticas internacionales a fin de hacer frente a los compromisos pactados en el acuerdo.
«Estas disposiciones al haber escalado a un tratado internacional, que esté apegado a la constitución, se convierte en una ley suprema que deberá respetarse”, señaló.
Dijo que el sector privado espera que durante la conferencia ministerial del TLCAN, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, el representante Comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer y la ministra del Exterior de Canadá, Chrystia Freeland, confirmen el cierre del capítulo anticorrupción, el cual es el tercero que se concluye luego de seis rondas de trabajo trilaterales.
Cabe mencionar que este es un texto de carácter horizontal y transversal, pues está ligado a otros apartados de acuerdo comercial como el de transparencia y mejores prácticas regulatorias.
Los temas que siguen pendientes en la negociación trilateral son la regla de origen en el sector automotriz, la temporalidad agrícola, la solución de controversias comerciales y la cláusula de extinción quinquenal.
Con información de Excélsior