Actualmente, todo el mundo está conectado y digitalizado lo que ha generado nuevos paradigmas sobre lo que puede considerarse un riesgo. Hoy se puede atacar y provocar daños a través de un proceso computacional, una persona o una computadora; el escenario de cualquier delito, crimen y abuso es digital ya no es real.
En México, hay una población de más de 120 millones de habitantes, de los cuales, alrededor de 63 millones están conectados a internet y son usuarios de perfiles en alguna red social, aseguró Leobardo Hernández Audelo, maestro en Ciencias Computacionales por la UNAM.
Según el especialista, nuestro país ha logrado la penetración del internet y se ha colocado en los primeros lugares a nivel mundial en el uso de las redes sociales. Sin embargo, “esto no ha logrado el desarrollo educativo de las personas, parece que sucede lo contrario, debido a que el uso del internet en México está supeditado a tres tipos: comunicación (chat, redes sociales, e-mail) contenidos en YouTube y pornografía”.
México ocupa el cuarto lugar en el mundo (después de Filipinas, Brasil y Argentina) con usuarios que más tiempo gastan en uso de redes sociales, “en promedio cuatro horas y el nivel de aprovechamiento cultural y de conocimiento en México es bajo, mientras que los países que son más desarrollados, como Japón, las utilizan una hora en promedio”, afirmó el también coordinador del Laboratorio de Seguridad Informática de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón.
Ante esto, el académico advirtió que el escenario en redes sociales en términos de ataque es amplio por la información que publican en ellas, “se les da información completa a los criminales para victimizar a los usuarios”.
Las empresas que ofrecen estos servicios no se preocupan por poner candados a las redes sociales porque inhibiría su uso de comunidad, y los usuarios tampoco están preocupados por poner candados porque entre más amigos virtuales tienen más comparten los contenidos que suben.
Hernández Audelo mencionó que México es uno de los países que más explota esa información, “los criminales usan esos perfiles para tráfico de órganos, pornografía infantil, secuestros reales y virtuales, extorsión, robo a casa habitación, robo de vehículos ya que les damos a los criminales toda la información sin que ellos la pidan”.
Asimismo, afirmó que nuestro país es el segundo más atacado en este rubro, lo que genera importantes pérdidas económicas, “un porcentaje entre 60% y 70% de los que han sido víctimas de estos crímenes, ha derivado de la información expuesta en sus redes sociales”.
Ante este panorama, el especialista aconsejó no poner información “que los comprometa, no compartir ubicación, no decir a donde voy o a qué hora salgo”. Debe tenerse conciencia que todo lo que se pone en una red social no se puede borrar y cuando se comparte ya se propagó.
El académico exhortó a los usuarios de las redes sociales a que las utilicen adecuadamente, ya que la información tiene un precio muy alto porque la identidad es digital, ya no está en papel y está en todos lados.
Finalmente, Hernández Audelo acotó que deben utilizarse los candados de seguridad que se ofrecen, “aunque limite un poco el acceso a la red social, crear un password seguro (mayor a ocho caracteres, utilizar mayúsculas, minúsculas, números) y utilizarlo con fines limitados y conscientes”.
Con información de Excélsior