En promedio, cada año fallecen más de 11 mil personas por percances viales, según los datos del SNSP, aunque hay estados que presentan un número mayor de casos.
Nueve entidades concentran la mitad de las víctimas en los últimos tres años: Jalisco (2,484), Puebla (2,268), Ciudad de México (2,048), Estado de México (1,882), Guanajuato (1,865), Sinaloa (1,824), Nuevo León (1,764), Tamaulipas (1,649) y Michoacán (1,584).
Guanajuato es una una de las entidades en donde más se redujo el número de víctimas fatales de accidente viales, al pasar de 733 casos a 405, mientras que Michoacán fue de las entidades con mayor crecimiento al pasar de 365 casos a 557 en mismo periodo.
Las entidades donde hay una mayor tasa de incidencia de víctimas por accidentes automovilísticos por cada 100 mil habitantes son: Sinaloa (61.5 casos por cada 100 mil habitantes), Tabasco (58.8), Tamaulipas (47.9), Querétaro (45.4), Tlaxcala (44.9), Aguascalientes (43.2), Durango (40.7), Sonora (40.2), Puebla (36.8), Morelos (36.1) y Michoacán (34.6).
Estados como Puebla, Sinaloa, Tamaulipas y Michoacán se encuentran en ambos grupos, tanto en el de mayor número de víctimas como en la incidencia de casos.
La tasa de incidencia por 100 mil habitantes permite comparar datos de poblaciones de diferentes magnitudes sin que el volumen poblacional interfiera en la medición.
En los últimos tres años se ha incrementado el número de muertes por accidentes de tránsito. En los estados donde se aplican fotomultas los fallecimientos y los lesionados han disminuido.
¿Fotomultas, herramienta que ayuda?
Organizaciones no gubernamentales e incluso la Cruz Roja han señalado que el uso de la fotomulta ayuda a reducir los accidentes viales y sus consecuencias.
En la Ciudad de México, en donde el uso de la fotomulta entró en vigor a finales de 2015, se muestra una clara tendencia a la baja en el número de víctimas mortales. La capital cerró el 2015 con 739 decesos por percances viales, para 2016 la cifra se redujo a 626 casos; hasta mediados de diciembre de 2017 se habían contabilizado 517 casos (se estima que el año cerró en poco más 550 casos).
Las fotomultas también han ayudado a reducir el impacto de los accidentes viales y las lesiones que provocan: se registraron 4,122 en 2015; 4,041 en 2016 y 3,684 a noviembre de 2017.
Otro caso es el Estado de México, entidad que inició el uso de fotomultas a finales de 2015. En ese año las víctimas fatales por accidentes sumó un total de 854 casos, para 2016 –aunque la fotomulta sólo funcionó durante medio año–, se registraron 544 decesos, y para 2017, ya sin fotomulta, el número de decesos volvió a repuntar hasta contabilizar 650 casos, y se estima que cerró el 2017 en poco más de 700 casos.
Las lesiones por accidentes muestran una tendencia similar. En 2015 se registraron 5,846 víctimas, cifra que se se redujo a 3,980 para 2016 y aumentó a 4,142 para noviembre de 2017, cuando dejó de utilizarse la fotomulta.
En Puebla, las fotomultas no ayudaron a reducir el número de víctimas fatales, pero sí el de lesionados producto de accidentes viales.
La entidad cerró el 2015 con 791 decesos, para 2016 la cifra bajó a 709 y para 2017 volvió a subir a 768, faltan por contabilizar los casos de diciembre, pero por tendencia se prevé que supere los casos de 2015.
En donde sí hay un descenso drástico es en el número de víctimas de lesiones producto de accidentes viales. Los datos del SNPS muestran que de 2,017 casos registrados en 2015 hubo una reducción a 1,119 para 2016 y para 2017 se reportaron prácticamente la mitad, 606.
Con información de Animal Político