De unos meses a la fecha, los asesinatos en fin de semana se han convertido en una macabra constante en Veracruz. Si casi todos los días hay al menos un par de ejecuciones, éstas se acentúan los viernes, sábados y domingos de cada semana.
Y el número de víctimas es cada vez mayor.
Si en julio pasado nos espantamos con nueve ejecutados en un fin de semana, aún nos faltaba el tercer fin de semana de agosto con 13; el segundo fin de semana de septiembre con 17; el cuarto fin de semana de octubre (el mes más violento en la historia reciente de México) con 21, y ésta que es la cuarta semana de noviembre donde entre viernes y sábado hubo 26 ejecuciones.
Muchas de esas ejecuciones han sido acompañadas con el desmembramiento de las víctimas, como sucedió la noche de este sábado con cuatro desmembrados y tirados a un costado de una telesecundaria en Poza Rica.
También esta semana fueron asesinados dos alcaldes en menos de cuatro días.
Y en cuanto a feminicidios la cosa no va nada bien para las mujeres. En lo que va de este año han sido asesinadas en Veracruz 219. Es decir, un promedio de 22 veracruzanas por mes, según dijo Estela Casados, investigadora de la Facultad de Antropología y coordinadora de la maestría en Estudios de Género de la UV.
Las cifras son brutales para un estado que simplemente no era así.
Y el problema es que declaraciones como las del alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez, no abonan en nada a la esperanza de que esto cambie.
Este sábado en Córdoba, dijo que la violencia no es tan alarmante como la pintan los medios nacionales “Las estadísticas que manejan no son las oficiales, y las pueden revisar. Son cuestiones de rumores que han venido haciendo. Pero si se van a las estadísticas oficiales podrán ver que Veracruz no está ni por mucho en los niveles más altos de delincuencia del país. Hay muchos estados arriba de nosotros”, dijo.
Vaya con el preocupante optimismo de un futuro candidato. Si con ese discurso piensa ganar adeptos para suceder a su papá, anda muy despistado el chavo.
Oficiales o no, las estadísticas son lo que menos importa a los veracruzanos. Lo que les asusta es lo que ven y conocen a diario.
Para decirlo con todas sus letras, ninguno de los 212 municipios de la entidad es seguro. En todos hay presencia de la delincuencia y la policía simplemente ha sido rebasada.
Hace una semana señalé en este espacio que lo más sano para los veracruzanos es que el gobernador Yunes Linares, cancele sus acostumbradas conferencias de los domingos después de su reunión con el grupo Coordinación Veracruz, porque lo que nos dice sobre el combate a la inseguridad no empata con lo que se ve y se percibe a diario.
Pasadas las siete de la noche de este domingo un amigo me llamó para decirme: “Seguro te oyeron porque no habrá conferencia dominical del gobernador”.
Pero ni me oyeron ni me vieron.
El gobernador cambió la conferencia para este lunes ya que el domingo asistió al funeral del alcalde Víctor Manuel Espinosa Tolentino, asesinado junto con su esposa y tres ayudantes. Desde ese lugar escribió en su face: “Asistí a los funerales del Presidente Municipal de Ixhuatlán de Madero y de su esposa. Se hará justicia”.
Pero este lunes volverá con la misma cantaleta; a hablar de la inseguridad que priva en la entidad (lo que ya sabemos) y de las medidas que se están tomando para combatirla (que hemos escuchado hasta la saciedad).
¿Cuándo será el día que diga algo que no sepamos y que ese algo sea una buena noticia?
Elízabeth Morales va
Siempre a contra corriente, Elízabeth Morales demostró este sábado en el Consejo Político Estatal del PRI que es una de las aspirantes fuertes al Senado de la República.
Aún sin estar al frente de un monstruo electoral como la SEDESOL que es la encargada de administrar la mayoría de los programas sociales y que cuenta con muchos recursos para hacer clientelismo político, Elízabeth demostró que va a dar la batalla.
Este sábado llegó apoyada por docenas de militantes que ven en la actual delegada del ISSSTE a la próxima senadora.
Las porras y las arengas en apoyo a Morales García reavivaron la efervescencia política de un partido político que atraviesa por una de las peores etapas de su historia.
Además, al buscar acercamiento con varios de los principales actores de la política nacional, Elízabeth ha sido notificada de que se encuentra arriba en las encuestas del CDN del PRI para lograr la candidatura.
Aunque en ese renglón las postulaciones para el 2018 aún no están definidas, Elízabeth está más que puesta para participar en la contienda.