La buena: Al dar a conocer el Índice de Información del Ejercicio del Gasto 2017, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) reveló que Veracruz se encuentra entre los cinco estados que registran los más altos niveles de cumplimiento en cuanto a la transparencia.
La mala: La fuente también indica que tomando en cuenta que dicho índice se realizó con datos del ejercicio fiscal 2016, la información financiera carece de credibilidad.
En pocas palabras, poco significan, para efectos de confianza, las cuentas presentadas por el gobierno de Javier Duarte, porque nadie les cree.
En ese índice, Veracruz aparece con un 79.2 por ciento de cumplimiento, y en esa casilla sólo le superan los estados de Tabasco, Campeche y Puebla.
El Índice de Información del Ejercicio del Gasto es una herramienta que sirve, si los datos fueran reales, para conocer la diferencia entre el destino de los recursos que se asignan a los estados y la manera en que el dinero público se aplica.
En promedio, las entidades del país tuvieron una calificación de 58 por ciento: 15 estados no llegaron al 6 de calificación, en una escala del uno al diez. Los peores fueron Chihuahua (39.9); Michoacán (39.2); Ciudad de México (37.8); Estado de México (37.5); Baja California Sur (25.0); y Guerrero (12.9).
Lo vergonzoso para Veracruz es que fue el único estado que tuvo una nota sobre la falta de confiabilidad en su información; y ésta obedeció a las malas notas que han dado las agencias calificadoras Moody´s y Fitch Ratings, que han denunciado la poca credibilidad de los datos financieros del estado durante el ejercicio fiscal 2016.
En términos generales, el IMCO señala que la mayoría de los estados del país presentan diferentes niveles de desorden financiero; lo común es que los gobiernos estatales subestimen los ingresos; gasten más de lo presupuestado; y se endeuden más de lo planeado, por lo que el Instituto propuso que los congresos locales no aprueben presupuestos irreales; que se sancionen las variaciones injustificadas entre el presupuesto aprobado y el monto del gasto; y que se elimine la discrecionalidad con la que los estados puedan disponer de los ingresos excedentes.
Ojalá que los diputados veracruzanos revisen bien esas recomendaciones del IMCO, antes de aprobar el presupuesto estatal para el ejercicio 2018.
Xalapa y el pago anticipado del agua
Con relación al Pago Anual Anticipado del Agua, convocado por el gobierno municipal de Xalapa, ha sido evidente la respuesta de los contribuyentes xalapeños.
Enormes filas se han observado en las ventanillas habilitadas para tal efecto.
Tan sólo en los primeros días del cobro, el ayuntamiento duplicó el promedio de lo recaudado por este pago anual, lo que ha sido interpretado por la autoridad municipal como muestra de la confianza de los xalapeños en la administración, “porque la gente está viendo que estamos haciendo obras, y que sus recursos se están aplicando”, señaló el alcalde Américo Zúñiga Martínez.
Habría que agregar que Xalapa es el municipio del estado que mayor obra pública ha registrado en estos cuatro años de gestión: se han rehabilitado escuelas, calles, canchas deportivas, parques y jardines, puentes, colonias y el Centro Histórico, que hace que la capital del estado tenga un nuevo rostro, transformado por el impulso del apoyo ciudadano y de la transparencia en el manejo de los recursos públicos.
Zúñiga Martínez, por cierto, ha informado que todos los recursos recaudados del Pago Anual Anticipado de Agua, se entregarán, ante Notario, a la administración municipal entrante, la que encabezará Hipólito Rodríguez Herrero, para que se apliquen a partir del 1 de enero de 2018.
Lo importante es que todo apunta a que el próximo gobierno municipal no entrará en funciones con las arcas vacías, sino que dispondrá de los recursos necesarios para hacer frente a las necesidades iniciales. Esos recursos, que corresponden al Pago Anual Anticipado del Agua, se sumarán a los que logre recaudar el Ayuntamiento en enero próximo, por concepto del Impuesto Predial. @luisromero85