El Movimiento de Regeneración Nacional, Morena, llevó a efecto un curso taller de capacitación para los 17 presidentes municipales electos con que cuenta en Veracruz.
Sábado y domingo, los futuros ediles del partido que encabeza Andrés Manuel López Obrador se reunieron en un hotel de la capital de Veracruz para abordar temas relacionados con el reto de sus municipios en cuanto a temas como servicios públicos, obra, desarrollo económico, medio ambiente, transparencia y rendición de cuentas, entre otros.
Para el desarrollo del taller de capacitación impartido por Morena a los alcaldes electos veracruzanos, en Xalapa estuvo Octavio Acosta Arévalo, director de Capacitación del Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal, quien impartió una conferencia magistral.
Morena no reunió a sus alcaldes con ningún improvisado; tampoco con un político, en la tradicional y popular acepción del término, sino con un especialista en temas municipales y de gestión pública; Acosta Arévalo fue, por ejemplo, director fundador del Instituto de Desarrollo Municipal del Partido de la Revolución Democrática, así como director ejecutivo de la Asociación de Autoridades Locales de México; y vino a compartir su experiencia y a sugerir a los próximos alcaldes de dicho partido que se capaciten en todos los ámbitos de la administración pública municipal, a fin de evitar en todo lo posible los errores.
Uno de los alcaldes de ese partido, que gobernará un pequeño y pobre municipio de la entidad, hacía un comentario en los pasillos que me pareció muy interesante; decía el de Morena que quienes asumirán las presidencias municipales tienen el reto no sólo de gobernar de manera eficiente y responsable, sino de hacerlo con honestidad. “Podemos cometer errores, pero éstos no deben ser por ambición ni por corrupción; si así fuera, entonces no serían errores, hablaríamos de otra cosa”.
El punto es que el futuro de ese partido, que es el que mayor crecimiento ha registrado en los dos últimos procesos electorales veracruzanos, depende en gran medida de quienes encabezarán las alcaldías a partir del primero de enero de 2018.
Del trabajo que realicen Pedro Hipólito Rodríguez Herrero, en Xalapa; Francisco Javier Velázquez Vallejo, en Poza Rica; Nicolás Reyes Álvarez, en Minatitlán; y Víctor Carranza Rosaldo, en Coatzacoalcos, dependerá en gran medida la aceptación o el rechazo que tenga en Veracruz el Movimiento de Regeneración Nacional, dado que ellos serán las autoridades locales, las más cercanas a la gente, en los municipios más poblados del estado.
Básicamente por esa consideración; y sobre todo por la preocupación de Morena sobre el papel que habrán de desempeñar en sus respectivos municipios los 17 alcaldes del partido, fue organizado el curso taller del sábado y domingo pasados.
En ese contexto, el primer problema a que se enfrentarán las próximas autoridades municipales de Morena son las altas expectativas generadas durante las recientes campañas. Pedro Hipólito Rodríguez, por ejemplo, llegó con suficientes cartas credenciales en la academia y en el activismo; sin embargo, ya en el cargo se enfrentará a enormes retos, como la inseguridad, la movilidad urbana, la deuda pública, la pobreza y el descontrolado crecimiento demográfico.
Otro hándicap en contra del de Morena podría ser la relación con las autoridades estatales y federales durante el primer año de la administración, dado que la primera será panista, al menos durante 2018; en tanto que la segunda seguirá un año más del Revolucionario Institucional.
De esas futuras autoridades dependerá, en gran medida, el resultado que habrá de lograr el partido de Andrés Manuel en Veracruz; y también la victoria o la derrota en el proceso para elegir gobernador, senadores, y diputados federales y locales.