Hay un extraño enojo, una molestia incomprensible en ciertos sectores de la población por las obras de rehabilitación del centro histórico de Xalapa. Lo menos que han dicho es que ese recurso debería destinarse mejor a las colonias populares, las de la periferia, y no invertirse en lo que ellos llaman una obra de relumbrón para un área que ni baches tiene.
Muchos periodistas, tanto en sus espacios escriturales como en redes sociales, le han echado montón al alcalde; a muchos les molestan los postes de contención y la ampliación de las áreas peatonales, y preferirían que en su lugar se ampliaran las calles al disfrute del amo y señor de la ciudad, el automóvil; a otros no les cuadra que el centro histórico tenga por fin la atención de un alcalde. Se les hace un despropósito, una pérdida de tiempo, una incomodidad innecesaria.
Si ellos tuvieran la oportunidad de decidir el destino de la ciudad optarían entre dos posibles caminos: destinar esos recursos a construir o rehabilitar calles en las colonias, sin importar que una autoridad competente lleve a juicio al ayuntamiento por desviar recursos etiquetados para las obras que se realizan, o regresar esos recursos al gobierno federal para que los destine a mejorar el centro histórico de cualquier otra ciudad del país, porque en la nuestra, ¡niguas!
Hay, en todo ello, además de algún genuino interés por mejorar a la ciudad desde un enfoque distinto, una corriente de mala leche política, un ánimo por despedir con cajas destempladas al último alcalde priista en mucho tiempo, ahora que Morena empezará, en 2018 con Hipólito Rodríguez, su andadura para mostrar que también para gobernar son buenos.
Hace ya mucho tiempo que la actividad económica del centro xalapeño se ha ido por las cañerías. Algunos acusaron en su momento la lentitud con que efectivamente se realizaron obras de rehabilitación de las redes sanitaria y de agua potable, acometidas por esta misma comuna en tiempos en que el hoy presidiario Javier Duarte se apropiaba hasta de los recursos federales que iban para ayuntamientos. También, por el intenso quehacer de las bandas criminales que obligaron a cerrar todo tipo de negocios pues hasta a los ambulantes metieron en cintura.
Centro histórico, el patito feo
Nada se hacía para mejorar el rostro de la capital de Veracruz. Por cuestiones electorales, los anteriores alcaldes le han invertido en las áreas más pobladas y necesitadas de la ciudad. La verdad es que querían comprar votos con obras. Estamos de acuerdo con que las colonias populares necesitan no que se les rehabiliten sino que se les construyan calles, pero la ciudad también necesita crear condiciones para la actividad económica, de la que dependen los empleos que requieren los habitantes de la periferia.
¿Se han destinado recursos del presupuesto municipal a esas obras? Difícilmente podría el ayuntamiento local sufragar con sus recursos esas inversiones. El papel más importante de un alcalde, y en eso Américo Zúñiga ha sido muy exitoso, con el apoyo de los senadores y de diputados federales no solo del PRI, es la de gestionar y atraer recursos de programas federales, y hacerlo en la mayor cuantía.
Los casi 500 millones de pesos que se han estado aplicando en la mejora de la red de agua potable y alcantarillado y a la rehabilitación de las calles del centro histórico con concreto hidráulico, han sido bajados del presupuesto federal.
Son programas que están destinados a mejorar la imagen de las ciudades del país y que, por fortuna, en Xalapa ha habido alguien que ha presentado proyectos que han merecido el financiamiento del gobierno federal. Por ello, es ridículo que muchos xalapeños pidan que mejor se destinen a colonias, porque los recursos están etiquetados.
El año pasado vimos con espíritu crítico cómo el diputado federal por Xalapa, Cuitláhuac García Jiménez, se negó a aceptar las partidas que, ciertamente con un tinte político, se autorizan a los representantes populares para que financien obras en sus estados y distritos. Así lo hizo su predecesor, Uriel Flores Aguayo, quien logró mejoras en infraestructura urbana de colonias donde obtuvo buena parte de la votación que lo llevó al Congreso de la Unión con la bandera del PRD. Y así lo ha hecho el senador José Yunes Zorrilla, quien ha bajado recursos para la mejora en la infraestructura urbana de varias colonias y congregaciones.
Esperamos que el próximo alcalde, Hipólito Rodríguez Herrero, de Morena, también tenga estos alcances y logre mantener la línea de inversión pública lograda en los últimos cuatro años, tiempo en el cual el estado de Veracruz no ha logrado prácticamente ninguna mejora, gracias al paso destructivo del corrupto Javier Duarte de Ochoa y al desdén del actual gobernador Miguel Ángel Yunes Linares.
¿Se ha olvidado Américo de las colonias?
Dos cosas hemos investigado en fuentes oficiales del ayuntamiento: uno, qué proporción de la inversión para obra pública se ha destinado a unas cuantas calles del centro histórico y cuánto a las colonias populares, y dos, de dónde provienen los recursos.
De entrada, la cifra de recursos invertidos en la mejora de la infraestructura urbana de las colonias y congregaciones del municipio de Xalapa es espectacular: en total, en los últimos cuatro años, se han invertido mil 300 millones de pesos en esas áreas, lo que equivale a más del 72 por ciento del presupuesto destinado a obra pública.
No es una cifra menor. El actual gobierno del estado no la ha destinado a obra pública en toda la entidad, pese a que los presupuestos entre ambos órdenes de gobierno no tienen comparación.
Con esos mil 300 millones de pesos se han realizado obras para mejorar la calidad de vida de los habitantes de colonias y congregaciones, donde se han realizado pavimentaciones, mejora de infraestructura hidráulica y sanitaria, construcción de espacios deportivos y culturales y ampliación de las redes de agua potable, energía eléctrica o alumbrado.
Solamente en infraestructura para evitar inundaciones, el Ayuntamiento de Xalapa y la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento han invertido más de 300 millones de pesos en obras como los colectores pluviales División del Norte, Fernando Gutiérrez Barrios, Amazonas, Santa Rosa, Coatzacoalcos, Mercurio, Bugambilias y Misantla, entre otros.
Muchas calles y avenidas que dan acceso a las colonias y congregaciones han sido pavimentadas o rehabilitadas; además, se pavimentó la carretera a Las Cruces y se impulsó la reconstrucción de la carretera Xalapa-Seis de Enero.
En el Programa de Regeneración del Centro Histórico, se ha invertido una cantidad importante de recursos con el propósito de impulsar el desarrollo económico de toda la ciudad; hasta el momento se han reconstruido calles que presentaban un avanzado estado de deterioro, particularmente en su infraestructura hidráulica y sanitaria, como Primo Verdad, Zaragoza, Mata, Manuel Doblado, Hidalgo y Xalapeños Ilustres. Ahora mismo se reconstruye Enríquez, desde Primo Verdad hasta Ávila Camacho, y próximamente se completarán varios tramos de Xalapeños Ilustres. Comentarios: belin.alvaro@nullgmail.com | www.alvarobelin.com | Twitter: AlvaroBelinA | Facebook | Google+ | Linkedin | Instagram