En las semanas recientes, las diferencias entre el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares y el dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional, Andrés Manuel López Obrador, han llamado la atención de medios informativos nacionales y estatales.

El intercambio de señalamientos, acusaciones y descalificaciones, en redes sociales, ha sido la principal característica de este diferendo entre dichos personajes.

López Obrador llega a Veracruz y de inmediato se lanza contra el ejecutivo, a quien señala con el índice por la participación política de sus hijos, uno alcalde de Boca del Río y el otro senador con licencia, que buscan la gubernatura en 2018 y la alcaldía de Veracruz el presente año. De inmediato, Yunes Linares responde al fuego y acusa que el de Morena habría sido financiado por el ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, lo que ubicaría al Peje en calidad de cómplice del saqueo caracterizado por la pasada administración estatal.

Andrés Manuel vuelve a la carga y sostiene que contra Yunes Linares pesan 4 denuncias ante la Procuraduría General de la República y dice que éstas han sido tapadas por un pacto entre gobierno el PRI, es decir Peña Nieto y Osorio Chong, con el gobernador veracruzano, quien revira señalando un presunto enriquecimiento ilícito del tabasqueño.

Las acusaciones suben cada vez más de tono e intensidad y se circunscriben en el contexto  del presente proceso electoral de Veracruz.

Sin embargo, ese flanco no es el único que el gobernador veracruzano tiene abierto: en días pasados, por ejemplo, el senador Héctor Yunes Landa anunció que este lunes realizaría una evaluación sobre el gobierno que encabeza Yunes Linares, a fin de recordar los compromisos de campaña que no han sido cumplidos por el panista.

Yunes Landa utilizó sus redes sociales para difundir un video en el que explica que ese «corte de caja” pretende revisar el cumplimiento de los compromisos de campaña del gobernador del estado, a cien días de iniciada la administración.

Lo predecible, por supuesto, no es un reconocimiento de Yunes Landa a Miguel Ángel Yunes, sino una andanada de críticas contra el  ejecutivo por lo problemas como el de la inseguridad y la violencia.

Hay quien señala que con esos petardos verbales, el senador buscaría mantener su presencia en la opinión pública veracruzana, con miras a postularse, por el PRI o por cualquier otra vía, para contender otra vez en 2018 por la gubernatura estatal.

Es de esperarse que el ejecutivo estatal responda, también con un video, a las críticas que seguramente lanzará el senador Héctor Yunes.

El punto es que ese será un nuevo enfrentamiento del gobernador veracruzano.

La confrontación Antorcha-gobierno veracruzano

Por si fuera poco, hay organizaciones que ya se preparan para realizar un movimiento de protesta contra el actual gobierno estatal.

Una de ellas es Antorcha Campesina, cuyo dirigente estatal, Samuel Aguirre Ochoa, declaró el pasado jueves a medios informativos estatales que debido al incumplimiento de apoyos por parte del gobierno estatal, iniciarían un movimiento de protesta contra Yunes Linares.

De acuerdo con el dirigente antorchista, algunas dependencias del gobierno estatal no están funcionando; es decir, “no resuelven los problemas de los veracruzanos, a pesar de que ya existen pláticas con el gobernador y con el secretario de gobierno”. Hay obras de caminos, escuelas y centros de salud que ya estaban aprobadas; dicha organización acordó con el ejecutivo estatal que se concluirían pero, dijo Samuel Aguirre, no hay respuesta satisfactoria, ni trabajo en las secretarías del gabinete.

En ese contexto, el antorchista acusó una “actitud facciosa, de partido”, en algunas secretarías del gobierno estatal; en pocas palabras, “tintes partidistas” en las obras del gobierno estatal; y señaló a las secretaría de Infraestructura y Salud, a la Caev  y a la dirección de espacios educativos.

Samuel Aguirre señaló que están pendientes obras por 500 millones de pesos, aproximadamente y advirtió que de no encontrar respuesta, los antrochistas iniciarán una campaña de denuncia ante la opinión pública nacional y saldrán a las calles para manifestarse.

No habían pasado ni dos días de esa declaración cuando el movimiento antorchista denunció la agresión que sufrió el representante de la organización en Tierra Blanca, Humberto Aguirre Ochoa, hermano del dirigente estatal.

Humberto Aguirre fue interceptado por sujetos armados, quienes con amenazas lo despojaron de su vehículo.

Ante esos hechos, el dirigente estatal de Antorcha, sin responsabilizar de forma directa a un actor en particular, acusó “intimidaciones por parte de fuerzas políticas”, al tiempo que señaló que la agresión contra su hermano se registró justo cuando acababa de denunciar a funcionarios del gobierno estatal.

Probablemente el asalto que sufrió Humberto Aguirre nada tenga que ver con la declaración del dirigente antorchista en la entidad; sin embargo, dicho acto delictivo terminó por fracturar aún más la cada vez más descompuesta relación entre Antorcha y el gobierno estatal.

Así las cosas, podríamos decir que a Miguel Ángel Yunes se le están abriendo cada vez más flancos. @luisromero85