Este jueves debieron prenderse los focos rojos en el bunker de Miguel Ángel Yunes Linares, pues el diario capitalino Reforma –uno de los que más apoyo y blindaje periodístico le vienen dando al panista veracruzano– acaba de publicar una encuesta que coloca al candidato de la alianza PAN-PRD sólo un punto porcentual arriba de Héctor Yunes Landa, de la coalición “Para mejorar Veracruz” (PRI-PVEM-PANAL-AVE y Partido Cardenista), que obviamente contradice los sondeos difundidos por Yunes Linares y algunos medios locales afines que todavía hace un par de días le daban al ex priista una supuesta ventaja de hasta 16 puntos sobre el abanderado tricolor.
La medición de Reforma debió preocupar a Yunes Linares por varias razones, principalmente porque es un medio que los priistas siempre han considerado ideológicamente muy cercano al PAN; pero además porque en 2015 fue de los pocos cuyas encuestas acertaron en la sucesión gubernamental del estado de Nuevo León, advirtiendo sobre el posible triunfo del candidato independiente Jaime Rodríguez, motivo por el cual algunos conductores de noticieros de Televisa llegaron a insinuar que “El Bronco” sería un gobernador subordinado a los intereses de ese poderoso grupo editorial regiomontano.
Contrario a lo que venían festinando sus panegiristas con base en una encuesta levantada el pasado fin de semana y publicada este miércoles 27 por el diario “El Liberal del Sur”, de Coatzacoalcos –sondeo avalado por la firma Berumen y Asociados que daba hasta 16 puntos de ventaja en la preferencia bruta a Yunes Linares sobre el candidato del PRI–, la reciente medición de Reforma parece evidenciar que al candidato panista sí le habrían hecho mella los escándalos recientes en que han sido involucrados él y su hijo Omar Yunes Márquez, primero en la investigación periodística mundial conocida como “Panamá Papers” y sobre todo con la revelación de la presunta compra que hicieron de un edificio en Nueva York y de al menos dos apartamentos en Manhattan, como lo dio a conocer hace once días una televisora de Miami, y luego el diario capitalino El Economista.
Y es que de acuerdo con la encuesta de Reforma, realizada del 21 al 25 de abril en vivienda a mil ciudadanos veracruzanos con credencial de elector, el candidato de la alianza PAN-PRD obtuvo el 33% de las preferencias electorales, seguido por el priista Héctor Yunes Landa con 32%, y en tercer lugar figura Cuitláhuac García Jiménez, de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), con 24%.
Sin embargo, cuando a los entrevistados se les preguntó que “independientemente de por quién vaya a votar, ¿quién cree que va a ganar las elecciones para Gobernador de Veracruz?”, la percepción de ganador le favoreció a Héctor Yunes, del PRI, que recibió 39% de las menciones; Miguel Ángel Yunes obtuvo 23%, y Cuitláhuac García, sólo 9%.
Como ya lo habíamos apuntado en este espacio periodístico, Yunes Linares tendría todas las circunstancias a favor para arrasar en la elección de junio próximo, pues tal como lo corrobora también la encuesta de Reforma, la administración del gobernador Javier Duarte de Ochoa salió con un alto índice de reprobación. A la pregunta de si aprueba o desaprueba el trabajo del mandatario estatal, sólo el 11% dio su aprobación y 83% lo desaprobó.
Este elevado nivel de rechazo popular del gobernante priista explica la nueva estrategia del candidato de la alianza PAN-PRD de evadir los cuestionamientos de los otros aspirantes a la gubernatura y enfocar sus ataques sobre Duarte de Ochoa, tal como lo hizo de manera sistemática en el primer debate organizado por el OPLE el domingo pasado.
Sin embargo Miguel Ángel Yunes no ha logrado el efecto deseado, ya que en vez de ampliar su ventaja sobre Héctor Yunes, el candidato del PRI ha remontado y acortado a sólo un dígito la distancia entre ambos en las preferencias.
¿Por qué el panista no ha sacado mayor rentabilidad electoral a su campaña contra Duarte? La encuesta de Reforma da un dato revelador: a la pregunta de “¿cuál es su opinión acerca de los candidatos a Gobernador?”, resulta que Miguel Ángel Yunes recibe 23% de opiniones favorables pero ¡29% desfavorables!, percepción que contrasta con la imagen de Cuitláhuac García, de Morena, que obtuvo 20% de opiniones a favor y sólo 7% desfavorable.
No obstante, la percepción sobre Héctor Yunes no es muy superior a la de su primo hermano, ya que el priista obtuvo 24% de opiniones a favor pero también un 29% desfavorable, lo que quizá habría que atribuirlo a la carga negativa que arrastra por representar al repudiado partido en el poder.
Esta encuesta de Reforma viene a corroborar lo dicho por Armando Méndez de la Luz, de Movimiento Ciudadano (MC), quien afirmó que a cuatro semanas de haber comenzado las campañas electorales todavía no está definido hacia quién se inclinará la balanza, y que por su experiencia como candidato, coordinador de campaña y estudioso de los procesos electorales considera que una tendencia definitiva podría marcarse hasta la tercera semana de mayo, dependiendo de las circunstancias que se vayan presentando.
Por ejemplo, otro factor que apalancará, restará o les representará una simple suma cero a los aspirantes a la gubernatura serán los candidatos de sus respectivos partidos o coaliciones a la diputación local, tanto los registrados por el principio de mayoría relativa como los que vayan por la vía plurinominal. Habrá que ver quién cuenta con los más rentables y efectivos, electoralmente hablando.