Desde hace semanas muchas mujeres, principalmente, hemos recibido invitaciones a toda clase de redes, círculos y flores donde «das desinteresada y generosamente y con todo el amor» un regalo económico con la promesa de que recibirás esa cantidad multiplicada por ocho. Pues bien, ya desde ahí deberíamos saber que al menos 8 personas perderán su «regalo» para que yo gane y haga ganar más a quienes están adelante de mí. Este tipo de cosas son un sistema que funciona de manera exponencial.
La manera en que te muestran la dinámica es la siguiente:
Una persona, denominada agua invita a otras dos personas denominadas aire, quienes a su vez invitarán a otras dos cada una para tener 4 elementos tierra y estas personas invitarán a otras 2, cada una, para sumarse como fuegos y éstas son las que deben dar su “regalo” económico para que llegue a su agua. Una vez que agua ha recibido sus 8 regalos se retira y los dos aires se convierten en agua de su propia flor, es decir, que la flor se divide en dos y cada fuego pasa a ser tierra y deberán invitar a otras dos personas, cada una, para realizar otra iteración. Así, cada vez se van duplicando las flores y el número de personas necesarias para continuar (por eso es una función exponencial). En la flor original 7 elementos no habrán puesto un solo centavo pero sí ganarán cuando les toque ser agua. Cabe aclarar que cada vez que alguien se convierte en agua y recibe sus 8 regalos, debe volver a dar la cantidad equivalente a un regalo al agua de su flor… ¡Wow! ¿Cuánto dinero se habrá embolsado quien inició esto?
Como podemos ver, todo sistema exponencial es infinito (dado que los números son infinitos) y crece más rápido de lo que la gente alcanza a darse cuenta…y mucho más rápido que los ingresos corrientes de las personas y que la población. Esto hará que el sistema colapse más pronto que tarde y perderás tu dinero…o ganarás a costa de los otros 14 que conforman tu flor, que lo han perdido.
En este cuadro muestro, por número de iteración, cuántas personas se involucran por flor, cuántas ganan cada vez y cuántas personas extra deben sumarse para que el sistema avance:
Si se fijan está clarísimo: por cada persona beneficiada hay alrededor de 14 que no ganan…y que pueden perder todo lo que tienen cuando colapse el sistema.
La población de México es de aproximadamente 127 millones de personas (entre hombres, mujeres, niños y niñas). Si nos fijamos, para la iteración 24 ya superamos los 137 millones de individuos involucrados. Ya ni qué decir de si queremos llegar a la número 30 porque superaríamos la población mundial, que es de unos 7,000 millones de personas. Algunas personas alegan que quienes invitan son tan generosos que vuelven a participar en dos o más flores nuevas para ayudar al “reciclaje de gente”, pero lo único que hacen es extender un poquito más la sostenibilidad del sistema… ¿Pueden imaginar el dinero que se están embolsando?
Disfrazados de solidaridad no hay más que ambición disfrazada de buenas intenciones. Así que antes de invitar a alguien o aceptar participar en una, debes de estar consciente de que el dinero fácil trae consecuencias, ya sea porque puedes perder tu «regalo» o porque contribuirás a que otras personas (14 directamente de ti) pierdan su dinero y es muy probable que en el camino pierdas al menos a alguna amistad.
¿Verdad que ya no suena tan amoroso, solidario y desinteresado el asunto?
Los negocios nunca serán desinteresados, aún si están planeados para utilizar las ganancias en una buena causa. Los negocios derechos son para ganar mediante una buena estrategia de inversión y siempre hay algo que se da a cambio, es decir, nadie debe quedar con las manos vacías, de otra manera solamente se trata de un fraude.
Si en verdad somos tan amorosos y solidarios mejor donemos ese dinero a alguna ONG o AC donde el trabajo que realizan contribuye a mejorar la calidad de vida de las personas, o bien, invirtamos nuestra energía y talento en un buen negocio y así ayudarnos a nosotros mismos y a otros. Ese es el mejor karma y no que te hablen bonito para que el universo te recompense tu generosidad…a costa de otros. Mejor organizar una tanda de ahorros con las personas que sepas que pueden comprometerse y así se ayudarán ahorrando para lograr lo que necesiten y a la medida de sus posibilidades.
Si aún así consideras que has hecho la «inversión» de tu vida, solo te pido que estés consciente de que es un fraude ante la ley y que en algún momento puedes tener problemas legales o con gente que te importa. Gracias por tu atención. Para mí la amistad y una conciencia tranquila valen más que los miles de pesos que me prometa tu círculo, red o flor.