A diferencia del diputado federal Alberto Silva Ramos, que en cuanto se lo pidió su jefe político y amigo, el gobernador Javier Duarte de Ochoa, de inmediato solicitó licencia para separarse de su cargo en el Congreso de la Unión para volver a asumir la Coordinación General de Comunicación Social del Gobierno del Estado, el senador Pepe Yunes Zorrilla se ha venido resistiendo a separarse temporalmente del Senado de la República a pesar de la petición expresa que le habrían hecho de la cúpula del gobierno federal y del Comité Ejecutivo Nacional del PRI así como el propio candidato priista a la gubernatura Héctor Yunes Landa para que se incorporara de tiempo completo a su campaña electoral.
Según ha trascendido, el legislador oriundo de Perote no quiere solicitar licencia porque ello implicaría dejar la presidencia de la Comisión de Hacienda del Senado, en la cual tiene varios asuntos relevantes que atender y resolver. Este martes 12, por ejemplo, será el anfitrión del gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, quien cada año debe comparecer en la Cámara alta. Pero además sigue pendiente la Ley Federal de las Zonas Económicas Especiales, aprobada ya por la Cámara de Diputados en diciembre de 2015.
Sin embargo, todo mundo esperaba que Pepe Yunes se metiera de lleno y con todo a la campaña de su camarada priista, con quien desde hace más de un año –luego de que Duarte de Ochoa enviara al Congreso local la iniciativa de reforma electoral para homologar la elección de Gobernador con la de Presidente de la República a partir de 2018, acortando a sólo un bienio la siguiente administración estatal cuyo titular del Poder Ejecutivo será electo en junio entrante– pactó una alianza aparentemente indestructible con Héctor para un proyecto gubernamental de ocho años consecutivos que primero encabezaría el senador nativo de Soledad de Doblado en diciembre próximo.
¿Qué fue lo que motivó que Pepe apoye personalmente sólo a medio gas la campaña de Héctor? Y es que si bien es cierto que algunos pepistas como Ranulfo Márquez Hernández ocupan un lugar estelar en el staff del equipo de Yunes Landa, además de que otro cercano operador de Yunes Zorrilla, el diputado local cuenqueño Juan René Chiunti, acaba de solicitar licencia al Congreso del estado para dedicarse de tiempo completo a las actividades proselitistas a favor de la alianza “Para mejorar Veracruz”, también es verdad que el impacto sería totalmente otro si el legislador oriundo de Perote se pone al frente de su grupo para recorrer el estado completo durante las siete semanas que legalmente le restan al candidato del PRI para hacer proselitismo.
¿A poco Pepe Yunes es de los optimistas que presumen que Héctor ya tiene todas las de ganar luego del escándalo mundial de los “Panamá Papers”, el más grande en cuanto al ocultamiento de fortunas en diversos países del mundo, y en el que uno de los 33 inversionistas mexicanos que figuran en la lista es precisamente Omar Yunes Márquez, el hijo mediano del más fuerte candidato opositor, Miguel Ángel Yunes Linares, de la alianza PAN-PRD, un estridente caso que en mayo, en la víspera de la elección, alcanzará su máxima repercusión al conocerse el expediente completo?
Por lo mientras este domingo 10, la revista “Proceso” publica un amplio artículo titulado “Secretos y mentiras de Omar Yunes y su padre”, en el que el reportero Álvaro Delgado refuta los desmentidos de los Yunes de El Estero, quienes cínicamente negaron haber creado, con la asesoría del despacho panameño Mossack Fonseca, un fideicomiso en Nueva Zelanda para presuntamente ocultar dinero en paraísos fiscales.
“Hay un señor que se llama Omar Yunes, que nadie dice que sea mi hijo. Hay 20 Omar Yunes en mi familia, para empezar, y muchos fuera de la familia”, afirmó. “Lo ponen a nivel de Putin, lo ponen a nivel de jefes de Estado, a nivel del rey de Arabia Saudita, a un joven que tiene unos restaurantes, es una tontería, no tiene nada que ver”, alegó el panista.
Por su parte, el propio Yunes Márquez rechazó también, en entrevista colectiva, ser el titular y el beneficiario junto con su esposa, Ángela Ruiz Pérez, del fideicomiso en Nueva Zelanda, según publicó Proceso en su página web como parte de la investigación periodística global con los archivos de Mossack Fonseca conocidos como #PanamaPapers. “Todo lo hago abiertamente, eso es lo chistoso, y por eso me atacan”, se quejó Omar Yunes, quien dijo que procedería a hacer la aclaración, aunque acotó que “la realidad es que los medios, con todo respeto, los que quieren atacar publican lo que quieren…”
Sin embargo, el reportero del semanario Proceso asegura que “padre e hijo mienten”, ya que “Omar Yunes Márquez gestionó, cotizó, contrató y pagó la creación del fideicomiso a través de Mossack Fonseca y el despacho mexicano Doporto y Asociados –cuyo dueño, Luis Doporto, participa en la reestructuración del mercado de la distribución de medicamentos en México–, una operación que hizo entre mayo y julio de 2012, en pleno proceso electoral en México”.
El periodista Álvaro Delgado añade que “incluso, el 3 de mayo de ese año el mismo Yunes Márquez se comunicó, por teléfono y vía correo electrónico, con Giovani Castillo, abogado de Doporto y Asociados, para dar instrucciones sobre el caso, según consta en los propios archivos de Mossack Fonseca obtenidos por Proceso, los cuales reproduce textualmente. Si usted quiere leer la información completa, consulte la edición número 2058 de la revista, que comenzó a circular este domingo 10.
Américo: liderazgo a prueba
El candidato de la coalición Para mejorar Veracruz, Héctor Yunes Landa, tuvo este domingo un encuentro con la comunidad xalapeña.
Desde muy temprano, en redes sociales se hizo sentir el hashtag #XalapaConHéctor. No es raro, ya que el líder priista de la ciudad capital, Américo Zúñiga Martínez, es un joven a quien le gustan las redes sociales.
Más de 12 mil xalapeños, entre cetemistas, antorchistas y militantes de los partidos de la coalición PRI-PVEM- PANAL-AVE y Partido Cardenista estuvieron ahí con el sol a plomo, en el Deportivo Colón.
En este multitudinario acto, el último de su primera semana de campaña, Héctor le dijo a los xalapeños que aunque nació en Soledad de Doblado escogió Xalapa para vivir y por ello, su gobierno, le dará no sólo un gran presupuesto a la capital veracruzana sino también seguridad y mejores empleos.
Destacó el reconocimiento que Héctor Yunes hizo al joven alcalde Américo Zúñiga Martínez y al liderazgo que posee en la ciudad, a la que ha atendido con una gran inversión en obras públicas.
Llamó la atención también el que le dieran la palabra, dentro de los oradores, a otro joven: Rodrigo Montoya Rivera, ex secretario particular del munícipe. Su trabajo en la ciudad es también un gran activo político para el partido y el candidato, con quien colaboró en algún momento.
En su discurso, Montoya Rivera destacó que Héctor Yunes es un candidato ganador, que presentó en tiempo y forma su declaración 3 de 3, marcando así una gran diferencia de otros contendientes que toda su vida han vivido en la opulencia a costillas del erario público.
Además, resaltó que Héctor es un priista leal y congruente, ya que desde que inició su carrera política siempre ha militado en el Revolucionario Institucional, que no ha ido saltando de un color a otro cuando no ha sido favorecido con una candidatura.
Y vaya que quien lo dijo fue este joven que aspiraba a ser candidato a diputado local y que muy dignamente se disciplinó.