Este domingo fue el último día de las precampañas políticas, en el marco de la sucesión veracruzana; en un multitudinario evento, ante un World Trade Center abarrotado, Héctor Yunes Landa rindió protesta como candidato del Revolucionario Institucional (y por tanto, de la alianza con los partidos Verde, Panal, Ave y Cardenista).
A Yunes Landa le arropó la clase priista: en Veracruz estuvo el dirigente nacional, Manlio Fabio Beltrones; el coordinador de la bancada en el Senado de la República, Emilio Gamboa Patrón; el ex gobernador Miguel Alemán; el mandatario chiapaneco, Manuel Velasco Coello; y hasta el actual ejecutivo veracruzano, Javier Duarte de Ochoa, quien se había convertido en blanco de los recientes petardos del candidato del PRI, en un evidente intento de deslinde.
Tal vez debido al morbo que despertaba, la presencia del gobernador del estado fue la que más miradas acaparó en el evento priista, sobre todo porque un par de semanas antes, el hoy abanderado del partido había hecho sonar los tambores de guerra contra el ejecutivo, al que calificó como un lastre para su campaña.
Ese “lastre” terminó por asistir al evento de toma de protesta del candidato; analistas de la política estiman que la presencia, y el irremediable vínculo, representa un golpe para la campaña de Yunes Landa.
Aun así, Duarte de Ochoa no tuvo que tragar sapos, ni soportar muestras de desprecio o abucheos; al contrario, recibió un trato cordial de quienes saben que el gobernador ya tiene preparadas las maletas, porque dentro de poco más de siete meses tendrá que entregar la estafeta y abandonar la Casa Veracruz.
Javier Duarte ha recibido fuertes golpes mediáticos; en términos de opinión pública es un personaje lastimado; sin embargo, los priistas, acostumbrados como están a la disciplina y a la institucionalidad, saben que sigue siendo el gobernador del estado.
En el evento, por supuesto, no faltaron los dirigentes de los sectores y las organizaciones del partido. Miles vitorearon a su candidato, a quien, contrario a lo que uno podría esperar, no se le observó eufórico; de hecho, la sonrisa parecía forzada y el rostro, desencajado; hay quien interpretó los gestos del candidato como producto de la incomodidad por la presencia del ejecutivo; sin embargo, también hubo especulaciones, durante el día, en el sentido de que al PRI y su candidato no le estarían saliendo bien las cosas, a dos meses y medio de la jornada electoral.
La encuesta de Yunes y la ventaja panista
Por otro lado, justo mientras Manlio Fabio Beltrones levantaba el brazo al candidato priista a gobernador del estado, Miguel Ángel Yunes Linares, aspirante de Acción Nacional, se reunía con la prensa estatal para presentar los resultados de la encuesta que levantó la empresa Votia, una de las casas que más ha ganado prestigio nacional por sus trabajos y su aproximación a los resultados finales de las contiendas.
En síntesis, la encuesta presentada por Miguel Ángel Yunes ofrece los siguientes resultados en cuanto a preferencia bruta: alianza PAN-PRD, 33 puntos porcentuales; PRI-PVEM-Panal-Ave-PC, 25; Morena, 15; candidatos independientes, 4; y Movimiento Ciudadano, 2 por ciento; en tanto que el 19 por ciento de los encuestados no respondió.
En preferencia efectiva, PAN-PRD aparece muy arriba, con 41 por ciento; PRI y sus aliados, 31; Morena, 19; los candidatos independientes, 5; y Movimiento Ciudadano, 2 por ciento.
De ese trabajo se desprende una muy amplia delantera de Acción Nacional sobre el PRI, diez puntos porcentuales que podrían parecer determinantes e irreversibles; sin embargo, a casi 80 días de la jornada electoral del 5 de junio, nada se puede dar por descontado (recordamos la impresionante ventaja que prácticamente todas las casas encuestadoras atribuían al entonces candidato perredista, Andrés Manuel López Obrador, en la elección de 2006, sobre el panista Felipe Calderón).
Lo importante, por otro lado, es que la estrategia del panista en el sentido de enfocar sus baterías, sus ataques y críticas al actual gobernador veracruzano, parece rendir frutos y puntos a favor en las preferencias ciudadanas.
Sin duda, el Partido Revolucionario Institucional, el candidato Héctor Yunes Landa, el equipo priista de la campaña, los aliados y el propio gobierno del estado, deberán trabajar a marchas forzadas; unos, para modificar la estrategia y revertir la tendencia –de ser cierta–; y los otros, para evitar el impacto del desgaste gubernamental en la imagen del abanderado priista.
Xalapa, capacidad de negociación
Demostrando que con disposición al diálogo se logran buenos acuerdos, el alcalde Américo Zúñiga Martínez puso nuevamente su capacidad de negociación para convenir con el sindicato de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) un aumento directo de 4.5 por ciento al salario y 8 por ciento a prestaciones de trabajadores del Ayuntamiento.
Al firmarse las Condiciones de Trabajo que garantizan el cumplimiento de los acuerdos, el alcalde xalapeño se pronunció por una administración exenta de conflictos laborales. Con esto, todos ganan, los trabajadores, el gobierno y la ciudadanía, teniendo todos certidumbre y mejoramiento en sus prestaciones y en la calidad del servicio. Por cierto que este acuerdo es el mayor incremento salarial ofrecido este año por una institución de la entidad a sus sindicatos. Nada menor este acuerdo. @luisromero85