Si la versión que el periodista José Ureña dio a conocer este miércoles en su columna política “Teléfono Rojo”, de la página web “24-horas.mx”, es cierta, ahora se entiende la manifiesta animadversión del gobernador Javier Duarte de Ochoa hacia el precandidato priista Héctor Yunes Landa, y por qué el mandatario veracruzano intentó hasta el último momento bloquear su candidatura a sabiendas de que el senador con licencia era desde hace rato el aspirante del PRI mejor posicionado en todas las encuestas para sucederlo.

Según escribe el columnista, “el mando político del país está asustado”, preocupado por las elecciones en varios estados ante “las difíciles condiciones imperantes”, en algunos casos “por los niveles de violencia del crimen organizado”. Y apunta que de entre las 13 entidades donde habrá votaciones, 12 para gobernador y elecciones para diputados y alcaldes en Baja California, destacan dos: Veracruz y Oaxaca.

“Hay dos enfoques. El primero es eminentemente comicial: cómo posicionar al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y a sus candidatos, Héctor Yunes y Alejandro Murat.

“Y el segundo es el comportamiento de varios sectores. En Veracruz no saben cómo reaccionará la población ante la polémica desatada por ese ominoso coctel de delincuencia, el bajo nivel de crédito del gobernador Javier Duarte, su abierta oposición a Héctor Yunes y la enfermiza ambición de Miguel Ángel Yunes, ex priista ahora cobijado por Acción Nacional (PAN)”, resume el periodista Ureña, quien posteriormente aborda el costo de haber dejado “avanzar la crisis” en Veracruz.

“La preocupación –asienta– va aliada de un lamento: no haber actuado con oportunidad.

“Bien le planteó Héctor Yunes al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong a principios del año pasado:

“–No dejen pasar el tiempo. El PRI va a perder Veracruz si sigue Javier Duarte.

“Y propuso la solución:

“Ir él de interino, mejorar la administración pública y preparar el terreno para la candidatura del senador José Yunes en 2016 y la suya para 2018, entonces sí para seis años.

“–No puedo –fue la respuesta, según una fuente de primerísimo nivel.

“En consecuencia, ahora el gobierno federal se encamina a una contienda donde el PAN presionará por las buenas, por las malas y hasta las ‘concertacesiones’, a fin de hacerse del tercer padrón electoral del país.

“Ante el escándalo, tal vez palidezca la instrucción del presidente Enrique Peña Nieto:

“–Nada de negociaciones. Se gana y se pierde por un voto, siempre ganado a la buena.

“Sí, pero en Veracruz no está dicho qué será bueno y qué será malo, habida cuenta de cómo Miguel Ángel Yunes se hizo del padrón de la Secretaría de Desarrollo Social en tiempos del panismo y luego mandó operadores para ensuciar la elección de hace tres años.

“Ya se sabe la historia: la entonces secretaria Rosario Robles debió destituir a varios funcionarios, pero se reservó un dato clave aunque lo ofreció a los senadores: todos identificados con la estructura azul.”

¿Por qué en el gobierno federal no actuaron a tiempo para recomponer el desorden administrativo y la seguridad pública en Veracruz, cuya crisis hoy parece haber tocado fondo? La respuesta más obvia es que suponían que el gobernador Javier Duarte sí tenía el control político de la entidad, tal como lo había aparentado con los extraordinarios resultados en las turbulentas elecciones locales de 2013; la exitosa organización tanto de los Juegos Centroamericanos y del Caribe como de la XXIV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno en noviembre y diciembre de 2014, y el sorprendente triunfo en 16 de los 21 distritos electorales en los comicios de diputados federales en julio de 2015.

¿Por qué no darle entonces el beneficio de la duda de que podría sacar también su propia sucesión? Duarte, pese a todo, sigue gozando del afecto del presidente Peña Nieto, aunque contra lo que aseguraba el gobernante veracruzano, el mexiquense no le dejó imponer al candidato priista de su preferencia. Sin embargo, el jefe del Ejecutivo federal lo sigue apapachando. Acaba de estar en Poza Rica y próximamente vendrá a Tuxpan y a Veracruz para supervisar los trabajos de la ampliación de ambas terminales portuarias, según dijo Guillermo Ruiz de Teresa, coordinador general de Puertos y Marina Mercante de la SCT.

Es de suponerse que a eso se debe que, en su momento, Osorio Chong le respondiera al senador Héctor Yunes que no podía empujar un interinato en la gubernatura de Veracruz, y que también esta semana el propio Duarte de Ochoa desmintiera los nuevos rumores de su salida. Ni él ni su secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez, se irán antes de que concluya su sexenio, el 30 de noviembre próximo, afirmó.

Eso sí, el virtual candidato del PRI ha recibido el apoyo del titular de la SEGOB, quien ha promovido cambios en dos delegaciones federales estratégicas: Sedesol y Sagarpa. La gran duda es si le será suficiente a Yunes Landa para revertir los pesados negativos del régimen duartista, acosado por la delincuencia y el reclamo de sus irritados acreedores.

Distinguen a Erik Porres

Más que merecida la distinción que recibió el cordobés Erik Porres Blesa, secretario de Desarrollo Económico y Portuario del estado, quien acaba de asumir la Presidencia del Consejo Directivo de la Asociación Mexicana de Secretarios de Desarrollo Económico del país, razón por la cual acompañó este martes al presidente Enrique Peña Nieto en la XXVI Entrega del Premio Nacional de Calidad, otorgado a 14 empresas y organizaciones.