A cuarenta días de que rindan protesta los diputados que integrarán la próxima legislatura federal, vale la pena hacer un recuento de cómo llegará la bancada veracruzana del PRI-Verde.
Luego del favorable resultado para el gobierno de Javier Duarte, podríamos decir que en el proceso post electoral no hay sorpresas: todas las impugnaciones han sido desechadas por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). No hay un solo distrito en que se haya revertido el cómputo; incluso en Coatepec, donde aparecieron boletas clonadas, no hay cambio, Noemí Guzmán se mantiene como diputada federal electa. La alianza PRI-Verde se quedó con 15 de los 21 distritos en disputa.
En el contexto nacional, la lista de los 20 candidatos más votados de la alianza PRI-Verde es encabezada por 10 chiapanecos; hay 5 de Coahuila; dos de Durango; 2 veracruzanos; uno de Chihuahua y otro del estado de Sinaloa.
Entre los nuevos diputados que integrarán la LXIII Legislatura Federal, dos veracruzanos se encuentran entre los que obtuvieron los porcentajes de votación más altos, en relación a sus respectivos listados distritales.
El primero es Erick Lagos Hernández, quien triunfó con el 64.7 por ciento, que lo coloca en la primera posición en la elección local, en el décimo primer lugar nacional y en el quinto en la bancada priista nacional. Ese resultado es suficiente para ocupar el liderazgo de la bancada priísta veracruzana.
El otro caso es la maestra Sofía de León Maza. Ella se destaca por ser única candidata que no fue impugnada en los tribunales. Su triunfo, con el 54 por ciento de la votación en el Distrito I de Pánuco, la sitúa en el segundo lugar estatal y en el vigésimo a nivel nacional; además de colocarla en el lugar 14 de la bancada priista. Es la séptima mujer priista con más votos en la próxima Legislatura.
Sin duda, su imagen como maestra, profesionista, experimentada en el servicio público y, sobre todo, de mujer honesta, le aseguraron una gran aceptación entre los ciudadanos de su distrito. Desde Pánuco nos comentan que esos resultados la catapultarán en su carrera política.
Ahora resulta muy importante que ellos y otros diputados veracruzanos se sitúen al frente o como miembros destacados de las comisiones claves en la cámara baja.
Trabajando en otra pista, los próximos legisladores tendrán la tarea permanente del contacto directo con los electores, a fin de mantener los liderazgos vigentes en las diferentes regiones de la entidad.
Con una elección por la gubernatura que ya se ve, será muy competida, el trabajo de los diputados en la Cámara y en general en el Estado se tornará decisivo para mantener los buenos resultados del partido del gobierno.
Lo difícil, finalmente, no es ganar la elección para diputados, sino mantener la hegemonía de cara a 2016, el año de la sucesión en Veracruz; el verdadero trabajo apenas comienza para el PRI, el gobierno y sus aliados.
7 mil 458 homicidios y 445 secuestros en menos de 5 años
El Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, INEGI, dio a conocer las cifras del homicidio en México; durante 2014 se registraron 19 mil 669; 16 por cada 100 mil habitantes en el ámbito nacional.
Destaca que en todo el país, 2010, 2011 y 2012 fueron los años más violentos y con la mayor tasa de homicidios.
Veracruz aparece como la séptima entidad con más asesinatos; el año pasado se registraron 890, 11 por cada 100 mil habitantes, y en esa proporción tiene mejores números que 17 otras entidades del país. Las más violentas son Guerrero, Chihuahua y Sinaloa.
Habría que apuntan que los datos de Inegi no coinciden con los que maneja el Sistema Nacional de Seguridad Pública, que se basa en la información que surge de las procuradurías y fiscalías estatales.
Según esa fuente, en los primeros cinco meses del presente año se produjeron 379 asesinatos en la entidad; a estas alturas del año pasado se contabilizaban 432; mientras que de enero a mayo de 2013 fueron 740.
En total, de 2011 a la fecha se han registrado en la entidad 7 mil 458 homicidios; de ellos, 3 mil 393 son calificados como dolosos.
La cifra más lamentable de las estadísticas de los delitos del fuero común, sin embargo, no se relaciona con el homicidio, sino con el secuestro; ese es el saldo más grave de la presente administración estatal en materia de seguridad; al menos así lo confirman las 445 víctimas en menos de 5 años. @luisromero85