Entre repartos y partos,
entre dibujos y sones,
entre giras y canciones,
entre plantíos y artos.
En una casa con cuartos
de hospital; entre escaleras
se gestaron las primeras
notas de estos quereres:
la fuerza de las mujeres
y el amor de las parteras
En la orilla de las nubes
Yo empecé a hacer piezas con estilo de son y una vez un maestro de totonaco nos contó que hay un cielo a donde van las mujeres que mueren de parto y que, además, es el cielo que bendice a las parteras. No solamente las mujeres que mueren de parto van ahí, también van los niños que no han nacido, se llama Natseni Inii, que es el filito dorado que hay en las nubes cuando les pega el sol.
Entonces me nació la inquietud de hacer algo acerca de eso, tardó muchos años en cocinarse este asunto porque considero que soy una rumiante de ideas, mis ideas pueden estar ahí años y años y años nutriéndose de todo lo que me pasa, de toda mi cotidianeidad y, de pronto, se condensan y salen pero no creo que sea algo mágico sino, precisamente, este dejar que las cosas vayan cayendo por su peso, dice una amiga que soy muy nerd (risas), pues, en cierto modo, en mi vida he sido muy obcecada con lo que quiero aprender, soy «yucaterca» (risas), realmente tengo una suerte de terquedad y no descanso hasta ver las cosas hechas, me puedo tardar mucho creo que así se debe hacer; así es como me enganché con el tema de las parteras y los partos, mucho antes de que yo fuera madre, pero además hay una historia aparte:
Roja flor
Mi vida siempre ha estado en una o en otra fase, a veces he estado haciendo cosas nada más como actriz, a veces como músico, a veces como dibujante y pintora, que es lo menos pero también es algo que he hecho. Como actriz fui a un encuentro de teatro en Oaxaca y llegué a una casa donde me dieron hospedaje durante una semana. La dueña de la casa era médico y tenía un sanatorio bastante modesto, era de dos plantas y había que subir y bajar a los pacientes, cargados, por los escalones (que no tenían barandales), no había de otra, arriba era donde los operaban. Platicando con ella le conté de Natseni Inii, que era algo que me resonaba, y me dijo:
-Oye, si hay un parto en estos días, si quiere ir, yo te llevo
-Ah, ok
Al tercer día me dice:
-Va a parir una mujer, ¿quieres ir?
-Sí, claro que sí
Llegamos y resulta que la pobre mujer tenía tres días en trabajo de parto pero la bebé venía atravesada y me dijo:
-¿Sabes qué?, voy a hacer una cesárea y luego averiguo quién me paga, cómo se llama y todo lo demás porque, si no lo hago, esta mujer se va morir aquí
Me preguntó si todavía quería entrar y yo, con este asunto de querer encontrar una señal en lo que me sucede, dije yo estoy aquí por algo y tengo que estar aquí.
Me metí, me explicó que las cesáreas se hacen en muy pocos minutos para que no se muera la mujer.
Yo había leído cómo es una cesárea, pero nada como verla. De pronto, entre todos los cortes, suturas y disecciones que hacían, sacaron a la bebé y, sí, fue emocionante ver una criatura nacer y dar su primer grito pero fue más emocionante cuando se llevaron a la bebé y mi amiga me iba diciendo lo que iba pasando con respecto a la mujer, tenía que seccionar y tenía que unir no sé qué, me estaba enseñando lo que ella intuía que yo quería ver y de pronto me dice mira y levanta la matriz, era una flor roja como esta visión que tiene Sylvia Plath de la matriz. Yo la vi y sentí cómo se me arrasaron los ojos de lágrimas.
Creo que eso fue lo que más me impresionó de todo, el nacimiento por supuesto que es un hecho impresionante, la muerte también lo es y para mí van de la mano, todos estamos todo el tiempo de la mano de ambas cosas, el caso es la imagen de esta matriz tan cansada que tuvieron que acomodar porque era la tercera cesárea, se me quedó todo el tiempo
Pero no es nada más la imagen de la matriz como fuente de vida, como el lugar de donde vienes sino ver, con crudeza, que eres carne, eres vísceras.
Me tocó ver, en menos de siete minutos, cómo le acomodaron a esta mujer todo y le fueron cociendo capa por capa y se me quedó como tema la fuerza de las mujeres, esta mujer había estado tres días pujando, con una bebé atravesada, y no se había muerto, tenía los pronósticos en su contra pero sobrevivió y sobrevivió la criatura.
Luego me pidieron que yo bajara a la bebé, porque ellos bajaron a la mujer, y fueron los escalones más largos de mi vida, con toda la responsabilidad de caminar firme pero con la empatía de ver todo esto.
Esta anécdota, si bien es algo que me conmovió y me dejó el tema, ha estado latente pero no ha estado en la superficie de lo que hago.
En un rayo de luna
Si la viese usted,
cantándose canciones de cuna
como un cascabel
que acunase un clavel
en un rayo de luna.
(Joan Manuel Serrat)
Así nació el proyecto Acompañando el nacimiento que consiste en hacer piezas (letra y música) que hablen acerca de la fuerza de las mujeres, acerca de la tradición de las parteras y de algunos puntos que son importantes para ellas, a partir de entrevistas.
Voy a hacer las entrevistas, voy a condensar la información y la voy a volver piezas musicales, la idea es que pueda hablar acerca de momentos de acompañamiento para el parto que, según he platicado con varias de ellas, es algo que se está perdiendo, los seres humanos no estamos acompañados de la misma manera que hace algunos años, por ejemplo, el parto en un hospital, lejos de la familia, es como delegar la responsabilidad únicamente al médico pero hay una corriente que dice que si tenemos seres humanos que desde el principio están con su mamá y están cobijados por la familia tienen más adaptación, más asimilación, son más amorosos.
He visto varias cosas y he leído sobre estas corrientes y lo que yo quiero es, simplemente, hablar con ellas y ver qué es lo que opinan acerca de esto.
La primera parte del trabajo, que ya hice, habla acerca de las manos de las parteras y de las canciones de cuna, me falta la otra parte. Este proyecto debe comenzar a grabarse en noviembre
Realmente mis estudios musicales son limitados pero sé que la voz es una de las herramientas más fuertes y más poderosas con respecto a los acompañamientos, nos cantan para todo en la vida entonces quiero que tenga como preponderancia el canto llano.
Eso creo que, durante los años, va teniendo una identidad en mí aunque no es una identidad propia porque yo soy el cúmulo de experiencias recolectadas de otras personas que me han nutrido, es un asunto de comunidad.
Tengo un apoyo del PACMyC [Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias] para grabar y maquilar el disco, es de los más sencillos que otorgan pero no por eso menos importante en cuanto a que tienes la posibilidad de desarrollar un proyecto.
Una cosa lleva a la otra, como te digo, hace varios años que pinto y estoy haciendo una bitácora en la que voy escribiendo la letra y estoy haciendo una viñeta sencilla. La idea es nutrir lo más que se pueda el proyecto con el proceso creativo, que ha sido muy importante en mi vida y quiero desarrollarlo lo más que pueda.
Esta libreta se va a exponer y la idea es que el disco incluya un folleto en el cual estén la letra y las viñetas. También quiero hacer un recuento fotográfico de mi experiencia con las parteras, es un proyecto integral.
Cuando metí el proyecto una amiga me dijo que, si quería, podía trabajar con más parteras del norte y del sur lo cual se me hace muy interesante porque si bien es cierto que las premisas son parecidas, la cosmogonía cambia de una región a otra y esa es otra cosa interesante que me gustaría hacer, por ejemplo, el asunto de los baños de hierbas para las mujeres y lo que significa que para las parteras, la voz para arrullar a los bebés y para acompañar a la mujer mientras está pariendo.
Con Iraida Noriega aprendí otra cosa que fue muy importante para mí; que tenía que poner todo lo que yo soy en una olla, o sea, todo lo que tenía brincando en mi cabeza a la hora de hacer una canción y dije sí, si tengo mi contenedor, mi menjurje sale con todo lo que yo tengo, parece algo muy simple pero, para mí, pensar en el contenedor me permitió pensar en cómo dosifico el brebaje.
PRIMERA PARTE: Ser o no ser SEGUNDA PARTE: Entre telones y sones
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