Cosas de política y procesos electorales; lo que para unos candidatos es suficiente, para otros no alcanza. En la pasada jornada del 7 de junio, a Tarek Abdalá, abanderado de la coalición PRI-Verde, le bastaron 60 mil votos para convertirse en diputado federal electo, porque con esos sufragios llegó al 46 por ciento de la votación total.
Tres años atrás, Elena Zamorano Aguirre, conocida en la Cuenca como La Negra Zamorano, obtuvo 10 mil 600 sufragios más que Tarek pero ello no le fue suficiente: perdió contra el panista Gabriel Cárdenas, que registró más de 78 mil 600.
De acuerdo con las estadísticas oficiales que se manejan en el portal del Instituto Nacional Electoral, en 2012, Zamorano Aguirre consiguió 70 mil 639 sufragios; cierto, la participación fue mayor que en el proceso de 2015 porque hace tres años también se eligieron senadores y presidente de la República; en esa ocasión, todos los candidatos de la alianza PRI-Verde perdieron el distrito.
Tres años antes, en 2009, en la elección intermedia, con Tomás Carrillo Sánchez el PRI superó los 68 mil sufragios y ganó la curul por el distrito 17.
Hoy, los malquerientes de Tarek Abdalá comentan que el resultado del domingo 7 de junio puede considerarse una victoria pírrica para el PRI en ese distrito, debido a que sólo ganó con el voto a favor del 20 por ciento de los ciudadanos inscritos en el padrón electoral. Sin embargo, esa fue la tendencia en prácticamente todo el estado, exceptuando Acayucan y Pánuco, donde los candidatos de dichas opciones políticas prácticamente arrasaron con el 65 y 54 por ciento, respectivamente.
En ese distrito, la oposición simplemente no apareció; los votos del PAN casi fueron duplicados por el PRI; y parecía que la disputa era entre los partidos Revolucionario Institucional y Verde Ecologista. De hecho, hubo señalamientos en el sentido de que en Cosamaloapan, Tres Valles, Alvarado, Otatitlán y Tierra Blanca, gente identificada como priísta intentaba, con todo tipo de argumentos, convencer a quienes apoyaban al Verde de promover el voto a favor del tricolor.
Incluso, los alcaldes de Cosamaloapan, Adriana Maass Michel; Tres Valles, Nelson Cano Ramos; y Alvarado, Octavio Ruiz Barroso, famoso en la región por su adicción a las motocicletas de lujo, operaron con todo para intentar que el Verde no quedara tan cerca del PRI en cuanto a número de sufragios, porque la intención era debilitar la posición del partido del tucán, que era impulsado por el ex gobernador Fidel Herrera. Aun así, el Verde aportó 17 mil votos a esa coalición en dicho distrito.
Los críticos de Abdalá Saad apuntan que el número de votos del candidato del PRI por Cosamaloapan es mucho menor que el de su homólogo de Acayucan, Erick Lagos Hernández (quien superó los 72 mil); sin embargo, a diferencia de otras demarcaciones, en el distrito de la Cuenca, el 17, no hubo señalamientos formales, denuncias e impugnaciones, lo cual nos habla de una elección limpia. Pocos sufragios para un padrón de 300 mil ciudadanos, pero suficientes para convertirse en la segunda mayor votación del estado. Lo cierto es que el diputado electo por ese distrito intentará ahora consolidar un nuevo liderazgo regional y trascender a otras zonas de Veracruz. @luisromero85