Si la bancada del PRI en el Senado de la República le quisiera echar una manita al presidente Enrique Peña Nieto para sacarlo del hoyo en el que se encuentra, los legisladores priistas bien pueden aprovechar la oportunidad de oro que en los próximos días se les presentará a la hora de designar al nuevo titular de la Fiscalía Especializada en Materia de Delitos Relacionados con Hechos de Corrupción.

La convocatoria quedó abierta desde el pasado viernes 21 y será cerrada este martes 25. Habrá que ver quiénes se inscriben y cuáles lo harán con el supuesto beneplácito presidencial. Con el nombramiento de este zar anticorrupción el presidente Peña y los senadores de su partido tienen la disyuntiva de seguir cavando el hoyo de la desconfianza ciudadana o mandar, en cambio, un alentador mensaje para empezar a atemperar a la indignada sociedad mexicana.

Todo dependerá, por supuesto, si el próximo fiscal anticorrupción resulta ser un personaje comprometido con los intereses políticos y patrimoniales del Presidente y su grupo en el poder, o si, por el contrario, se elige a una persona con perfil inobjetable, de honestidad probada y con la capacidad técnica para estar a la altura de los retos y desafíos que México enfrenta.

Ayer, a través de un comunicado, el Comité Ejecutivo Nacional del PAN puntualizó que no sólo el fiscal deberá contar con un perfil incuestionable sino que también el proceso mismo de nombramiento tendrá que ser igualmente impecable. “Todos debemos estar atentos para garantizar que así suceda”, advierte la dirigencia del partido blanquiazul, la cual afirmó que México vive tiempos de incertidumbre y crisis que deben convertirse en momentos de definición, ya que aseveró que los índices de corrupción han alcanzado niveles alarmantes.

“Un escándalo sucede a otro sin que haya explicaciones claras y contundentes”, advirtió el CEN del PAN.

En México y en el extranjero cada vez crece más la percepción de que el presidente Peña sigue sin entender la gravedad de la crisis que actualmente amenaza al país, pues hasta ahora su pasmado gobierno sólo atina a ofrecer respuestas torpes y convencionales. Minimiza y pareciera ignorar el origen de tanta rabia e incertidumbre social así como el riesgo evidente de descontento y anarquía que ello conlleva, cuando las principales fuentes de desestabilización son las negligencias, excesos y complicidades de la autoridad y el colapso total de los partidos de oposición que han sido inoculados también por el virus de la corrupción dejando de ser un contrapeso real para el gobierno que se ha quedado aislado y aturdido por sus propios yerros.

Por ello es que urgen mecanismos institucionales o alternativas electorales para encausar el enojo social. La República es una olla exprés sin válvulas de escape institucionales.

Pero en los próximos días la bancada del PRI en el Senado, que es la mayoritaria, tendrá una excelente oportunidad para evitar que la autoridad de su líder sexenal continúe erosionándose, pues aparte de elegir al nuevo zar anticorrupción también deberá designar al titular de la Fiscalía Especializada en Atención de Delitos Electorales que igualmente se espera sea una persona intachable, sin ataduras partidistas ni complicidades políticas para enfrentar los retos y desafíos que demanda la trastabillante democracia mexicana.

Con este par de nombramientos en puerta, los senadores priistas –entre ellos los veracruzanos Pepe Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa, que aspiran a gobernar Veracruz en 2016– tienen frente a sí el desafío de ayudar al Presidente a recuperar la iniciativa y el liderazgo, a pesar de que parece que Peña Nieto y todo su equipo se quedaron con el huso horario de Beijing y Sydney. Y es que hace apenas dos meses, el mayor reto del mexiquense era ejecutar la agenda más ambiciosa de reformas en la historia moderna de México. Hoy, paradójicamente, su mayor urgencia es estabilizar y asegurar la continuidad de su periodo constitucional.

Erick se lució

Como los buenos toreros, el pasado viernes 21 el secretario de Gobierno, Erick Lagos Hernández, salió en hombros del redondel de la avenida Encanto, donde compareció ante la Comisión Permanente de Gobernación de la LXIII Legislatura con motivo del cuarto informe de resultados del gobernador Javier Duarte de Ochoa.

Lagos Hernández afirmó que en estos cuatros años de la administración duartista, la gobernabilidad democrática, la paz social y el estado de Derecho son el mayor activo que tiene Veracruz para atraer inversiones que generan empleo y bienestar para las familias veracruzanas, y reiteró que la dependencia a su cargo ha hecho del diálogo, la herramienta fundamental para dar respuesta a las distintas expresiones de la sociedad.

“Al diálogo seguirá más diálogo, porque en el gobierno de Javier Duarte de Ochoa se escucha y respeta la opinión de los veracruzanos. Al día de hoy, tenemos 212 Ayuntamientos de todas las filiaciones políticas, laborando en paz y con normalidad, con quienes compartimos la responsabilidad de mantener y preservar la gobernabilidad”, dijo el titular de la SEGOB, quien enlistó los logros alcanzados este año en Registro Civil, Registro Público de la Propiedad, Catastro, Asuntos Religiosos, Editora de Gobierno, Atención a Migrantes, Política Juvenil, Archivo Histórico, Junta de Mejoras, Consejo Estatal de Población, Instituto Veracruzano de las Mujeres, Atención a Víctimas, Defensoría Pública, Desarrollo Municipal y Unidad de Transparencia.

En esta comparecencia, Lagos congregó a destacadas personalidades, entre ellas el arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios.

Condolencias

Desde este espacio le expresamos al coordinador general de Comunicación Social del Gobierno del Estado, Alberto Silva Ramos, nuestro más sentido pésame por el lamentable deceso de su señora madre, doña Elvira Ramos Salina. Descanse en paz.