Estamos creando sociedades débiles

Demasiada “protección civil” demasiado meter miedo a la población, demasiado protagonismo, de quienes desconocen el comportamiento técnico y las razones científicas de los eventos climatológicos y de la evolución de las capas geológicas. Volviéndose protagonistas anunciadores de la amenaza y al mismo tiempo  protectores omnipresentes en los medios de comunicación.  Haciendo a un lado a los técnicos, científicos, que se encuentran al frente de los centros  del comportamiento del planeta, que son quienes debieran dar la información.

Cuando realmente no existe una protección civil. Ya que si esta se llevará a cabo con medidas preventivas previas, el riesgo sería mínimo. Hay pérdida de vidas, por deslaves por vivir en condiciones deplorables. Luego entonces el protagonismo; fotografías de los dolientes con el condolente, utilizando el dolor y la desgracia humana para promoverse como un ser todopoderoso ante la desventura de los miserables.

Demasiada “protección”, demasiada “espantación” a la población, de eventos que deben de otorgar fortaleza y crear conciencia en el hombre, de que se deben al incremento de la temperatura de los océanos y que para ello se debe de estar prevenido con tiempo, mejorando los sistemas pluviales, la infraestructura de casas, el retiro e impedimento de habitar en zonas de alto riesgo. El alza de las temperaturas es el síntoma  ineludible del cambio climático y esto lo refieren de voz en voz las personas, ya que es el que más se percibe, existiendo otros factores que no se detectan con facilidad. El cambio climático incide constantemente en la forma de vida de las sociedades modernas. El asunto no es nuevo, y el termino cambio climático, tampoco. El tiempo ha pasado y se continua con practicas arcaicas de otorgar ciertos recursos a quienes se ven afectados por el patrón del comportamiento de estos fenómenos, no existiendo un programa de infraestructura urbana, suburbana y rural que permita mitigar los efectos del impacto en zonas poblacionales, así como estrategias de protección a los recursos naturales. El incremento de los gases de efecto invernadero en la atmósfera que ocasionan que un mayor porcentaje de la energía calorífica de los rayos del sol, quede atrapada en esta, produciendo así un incremento de la temperatura a nivel global, va en ascenso. La huella ecológica de esta alteración, es ya profunda generando fuerte impacto al hábitat en el planeta. Lo cual obliga a tomar todas las medidas conducentes de atención previa, sobre todo cuando una entidad se encuentra inmersa en ambos horizontes de riesgo.

Mencionar o conocer que el medio ambiente, el hábitat en que habita el hombre, esta cada vez peor y tiende a empeorar, es para tomar las providencias integrales de las infraestructuras sociales. Los fenómenos ambientales y geológicos, son señales, signos, síntomas, de que la naturaleza protesta y se autorrepara, ya que la gravedad del daño generado por el hombre, esta en constante evolución. Por ello la importancia urgente de revisar y establecer mecanismo que permitan la programación y estructuración en base  a los informes científicos de infraestructuras y comportamientos  acordes a la dinámica del cambio climático y evolución geológica.

Sociedades débiles

Los escolares atemorizados y acomodaticios también, en franco rechazo a la asistencia escolar, se emancipan en unión de los padres, de que es un bien el que se les hace, al no acudir a clase. Cuando es todo lo contrario. Se les somete al miedo, a mirar a un “protector” que les advierte no acudir a labores, porque corren peligro. En una aparente protección cuando no es mas que mero sometimiento. La lectura es protéjanse, este evento viene, con fuerza demoledora, estas en peligro, yo te protejo, y se registra en el consciente y subconsciente el miedo a enfrentar la adversidad, generando debilidad en la capacidad de frustración, que conlleva a formar un ser atemorizado, que no capacitado para conocer y superar los eventos y no quedarse secuestrado en un aparente refugio de insensatez.

Creando así a un pueblo atemorizado, sometido, complaciente. A los niños, a los escolares se les impide la lectura de la naturaleza, la capacidad de ser, de sortear los inconvenientes y el no aprendizaje de los imponderables. A la población le retiran la oportunidad de la solidaridad. La protección civil, es prevenir, estructurar comportamientos que otorguen capacidad de conocimiento a la población para tener conciencia para que eventos geológicos o climatológicos, de suceder, no pongan en riesgo su vida. Como lo es; no habitar en zonas de deslave o a las márgenes de los ríos, arroyos, la mar o lagunas. O en las zonas geológicamente inestables. Quienes han estudiado el comportamiento de la geofísica y de la atmósfera pueden y deben otorgar una orientación técnica de las condiciones  con que debe de contar el hábitat humano para protección de él y los recursos naturales. Pero no se hace, por diversos factores, entre ellos porque así se permiten las autoridades en turno, el protagonismo dramático ante el infortunio de los desprotegidos.

En un espectáculo mediatizante, que debilita la fuerza de voluntad para enfrentar los retos que la vida otorga a los seres humanos.

Proclamando así los gobernantes como única verdad estridentista   lo que ellos anuncian.

Que se conduelen. Protagonismo mezquino con intereses políticos electorales. Es su obligación y responsabilidad de que estos casos de daños a la integridad física sucedan lo menos, con prevención, prevención estructurada, programada, visualizada, ordenada. Lo que se debe de hacer para no padecer y que no se hace; es supervisar vías de comunicación, puentes, vados, líneas de comunicación, que atarjeas y drenajes tengan y cuenten con la capacidad permeable suficiente, que los medios de transporte estén capacitados para eventos imponderables, que las ambulancias se encuentren en condiciones óptimas, otorgar cursos de capacitación vecinal en coordinación con bomberos, rescatistas, medios de comunicación, policía. Entre muchos otros recursos, y no continuar actuando como   repartidores de sarapes, y aparentar ser condolentes de las desgracias. Actos que los encargados de la “protección”  debieron de haber realizado con antelación.

De consciencia y sobrevivencia

Un maestro de arte lúdico, pregunto a los padres por qué los hijos no habían acudido a la clase anterior. Los padres respondieron al maestro: es que estaba lloviendo. El maestro comento; si enseñan ahora a sus hijos que una lluvia les impide acudir a la escuela, que cosas no les irá a frenar en la vida.

Y eso se esta haciendo con las generaciones de relevo, enseñándoles a la pérdida de la voluntad. Porque un individuo anuncia a través de los medios que se suspenden actividades por lluvia, generalizando esta acción a zonas en donde más de las veces queda lo tan vehemente anunciado, en suspenso.

Lo conto Juan Leal

Me toco vivir, allá en el sur, en los Tuxtla,  en la comunidad  la Palma, colonia de Catemaco, un ciclón. A un lado de la colonia pasan tres brazos de río, uno de agua caliente, los otros dos de agua fría.  Nosotros vivíamos en una parte de terreno al que lo abrazan los tres ríos. Cuando empezó a subir el agua de nivel, mi abuelo empezó a otear la forma de protegernos, el agua torrencial inundaba la tierra. De pronto el abuelo Aurelio dijo, traigan los machetes, vamos a tirar el abasbabi, córtenle las ramas, lo vamos a colocar para pasar al otro lado, vamos a hacer un arnes con la reata de plástico, hagan bien los nudos. En la colonia sabemos hacer buenos nudos. Se pasaron los arnes a través de un cable de acero. Así alcanzamos cruzar los tres ríos. Subimos una loma, y allá estuvimos varios días, cazábamos chachalacas y las comíamos asadas. Dijo.

Así lo contó, nunca había ido protección civil a decirles que era zona de riesgo.

Estridentismo

Retomando el Manifiesto Estridentista, tan bien comentado en la Galería de Arte Presente de la Facultad de Artes Plásticas, por el maestro Roberto Santa Ana, académico de la Universidad Veracruzana, en vista de la presentación del libro “Memoria Gráfica de una Vanguardia en Jalapa: El Estridentismo” del autor Julio César Martínez, editado por Tinta Indeleble  Ediciones.

MANIFIESTO

Paráfrasis

Irreverentes, afirmales, convencidos, excitemos a la juventud intelectual del Estado de Veracruz, a los no contaminados de reaccionarismo letárgico, a los no identificados con el sentir medio colectivo del público unisistematizal y antropomorfo  para que engruesen la filas triunfales de la proclamación de lo bien hecho,  AFIRMEMOS:

Un profundo desdén hacia la ranciolatría ideológica de los políticos, funcionarios, catedráticos y de algunos valores funcionales, encendidos pugnazmente en un odio caníbal para todas las inquietudes y todos los deseos renovadores que conmueven la hora insurreccional de nuestra vida mecanística y mecanicista.

La posibilidad de un arte nuevo, juvenil, entusiasta y palpitante, estructuralizado-novi-dimensionalmente, superponiendo nuestra recia inquietud espiritual, al esfuerzo regresivo de los manicomios coordinados, con reglamentos políticos.

La exaltación del tematismo sugerente de las maquinas, las explosiones electoreras que estrellan los espejos de los días subvertidos. Vivir emocionalmente. Palpitar con la hélice del tiempo. Ponerse en marcha hacia el futuro.

La justificación de una necesidad espiritual contemporánea.

Que la poesía sea poesía de verdad. Que la pintura sea también, pintura de verdad con una solida concepción del volumen. La poesía, una explicación  sucesiva de fenómenos

ideológicos por medio de imágenes equivalntistasorquestralmente sistematizadas. La pintura, explicación de un fenómeno estático, tridimensional, redactado en las dos latitudes por planos colorísticos dominantes y no plenos de colorantes participantesgubernamentalistas.

Encaramados sobre el pedestal de la ignorancia colectiva. Horror a los ídolos populares. Rechazo a los panegiristas sistemáticos. Es necesario defender nuestra juventud y al pueblo todo, que han enfermado los merolicos exegísticos con nombramiento oficial de gobernantes funcionarios funcionales.

Que la política sea política de verdad.

¡ Viva el Caldo a la veracruzana !

¡ Viva el Mole de Guajolote !

Xalapa, Veracruz-Puebla, 1923-2017

En memoria retomantista retornatista

Manuel Maples Arce, Germán ListArzubide, Salvador Gallardo, M.N. Lira,  Mendoza, Salazar, Molina, Julio César Martínez, Roberto Santa Ana, Efrén Ortiz, Daniel Acevedo, Raciel D. Martínez, Hiram Abif, Víctor Blanco. Siguen doscientas firmas más y mil novecientos dos mil diecisiete like.