No parece que los problemas políticos y mediáticos en la entidad estén amainando: a los temas de inseguridad, manejo discrecional de la reforma electoral y graves circunstancias financieras, se agregan ahora las voces discordantes que, contra lo previsto, no han esperado la cercanía del proceso electoral de 2016 para enderezar verdaderos ganchos al hígado.

Como si la renuncia del titular de la Sefiplan Fernando Charleston Hernández “por motivos de salud” hubiera sido el detonante, este fin de semana se unieron tres viejos contrincantes políticos para enturbiar aún más el panorama político de Veracruz: Fidel, Dante y Miguel Ángel.

La presencia del exgobernador Fidel Herrera Beltrán en el puerto jarocho, con el garlito de asistir al bautizo de la hija de Carolina Gudiño, exalcaldesa de Veracruz, en realidad dejó ver en qué medida sigue metido en la política veracruzana y la gravedad que intuye en los asuntos locales.

El diario Notiver despertó al Tío Fide ayer domingo con tremendo borregazo: Fernando Aportela, subsecretario de Hacienda y sólido aspirante desde el centro a la candidatura gubernamental del PRI en 2016, viene como tesorero comisionado “para poner en orden las finanzas, arreglar las deudas, fincar responsabilidades”.

Independientemente de la desproporción del comentario, lo cierto es que las cosas se complican a un paso de dos eventos internacionales importantes, los Juegos Centroamericanos y del Caribe y la Cumbre Iberoamericana, y parece que todo mundo trata de contribuir a que las cosas empeoren.

¿Domingo 6 o domingo 7?

Tanto en el Puerto de Veracruz como en Martínez de la Torre, los excandidatos a Gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares y Dante Delgado Rannauro, aprovecharon este domingo para acusar una grave corrupción en las instancias locales.

Yunes Linares dijo que Fernando Charleston había tomado una decisión acertada, pues con ello evitaba prestarse a conductas indebidas en el uso de los recursos públicos; “no se quiso prestar a todas las conductas indebidas (…) financiadas con recursos públicos”.

Es posible que el mismo Yunes Linares haya generado la especie en torno al arribo de Fernando Aportela, porque al ser entrevistado señaló que el ahora subsecretario de Hacienda es una persona seria y técnicamente preparada, que tendría capacidad para sacar adelante a una entidad que “se encuentra en quiebra”.

Dante Delgado, por su parte, dijo en Martínez de la Torre que Veracruz tiene representantes que únicamente brillan en sus declaraciones, pero que en la realidad no tienen propuestas, ni proyectos de gobierno.

Sus acciones, añadió el coordinador nacional de Movimiento Ciudadano, “están basadas en el robo de capital, institucionalizando la corrupción y sus derivados como el nepotismo, el clientelismo político y el peculado, de forma que estas acciones delictivas quedan impunes”.

Ya veremos en qué termina todo esto; por lo pronto, dos versiones se unieron en torno a la vacante que dejará el joven Charleston: por un lado, que Fidel Herrera se habría decantado por Mauricio Audirac para el cargo; por la otra, que su acérrimo enemigo Miguel Ángel Yunes Linares (sin la influencia del primero) estaría apostando por Fernando Aportela.

¿Cuántos años más estaremos los veracruzanos en la boca de estos viejos enemigos?

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