Damnificado principal de la peor debacle electoral en toda la historia del priismo en Veracruz –pues el partido tricolor ha perdido por primera vez el gobierno del estado y la mayoría en el Congreso local, donde estaría por quedar relegado como la tercera fuerza política en la LXIV Legislatura entrante–, Héctor Yunes Landa, ex candidato priista a la gubernatura, anunció este lunes al mediodía, en un breve mensaje leído en la Sala de ex Presidentes del CDE del PRI ante los medios de comunicación, que a partir de ahora el Revolucionario Institucional asumirá en la entidad un papel de oposición firme, responsable e inteligente.

Y ayer, en efecto, dio una primera muestra al reconocer responsablemente que las tendencias electorales del PREP le eran desfavorables, no obstante que la noche del domingo, recién cerradas las miles de casillas de votación, había difundido una serie de encuestas de salida que supuestamente le daban una ventaja de 4 y hasta de 8 puntos sobre Miguel Ángel Yunes Linares, de la alianza PAN-PRD, su más cercano contendiente.

Sin embargo, casi cuatro horas después de que el Órgano Público Local Electoral (OPLE) diera a conocer el resultado de su conteo rápido que posicionaba a Yunes Linares en primer lugar, Yunes Landa envió alrededor de las 00:30 horas del lunes un comunicado de prensa en el que afirmaba que a lo largo de su carrera profesional siempre había sido respetuoso de la legalidad y de las instituciones y que en esta ocasión no sería la excepción, por lo que, dijo, “acataré en estricto sentido el llamado del OPLE para tomar los datos del conteo rápido dado a conocer hace unos minutos, como estrictamente preliminares y esperaré al cómputo distrital que definirá con absoluta certeza al ganador de este proceso electoral”, subrayando que los resultados dados a conocer esa noche por el órgano electoral “son preliminares, como la propia autoridad advirtió”.

Para ese entonces, Héctor Yunes se resistía a aceptar aún su anunciada derrota, asegurando que “las actas en nuestro poder nos ponen en una posición muy competitiva en la elección, por lo que esperaremos los resultados finales que dará a conocer la propia autoridad”, y argumentando que “la amplitud del territorio, la complejidad geográfica del estado y la importancia de regiones rurales con escasa o nula comunicación impiden otorgar certeza a otro método que no sea el cómputo general”, adelantó.

“La propia autoridad reconoció las limitaciones de los mecanismos de predicción o conteo preliminares, lo que explica la diversidad de datos que han fluido desde el término de la votación”, concluyó.

Sin embargo, presuntamente a sugerencia del CEN del PRI y de los operadores políticos del gobierno federal, este lunes, alrededor de las 9 de la mañana, dio instrucciones para que convocaran a conferencia de prensa en la sede estatal priista, donde tres horas más tarde aceptaría que las tendencias no le eran favorables. Y es que, desde la Ciudad de México, el presidente Enrique Peña Nieto les mandó a decir a todos los que contendieron por las gubernaturas de 12 estados del país, que una vez acabada la jornada electoral era tiempo de dejar atrás la polarización, el encono y el enfrentamiento para buscar el trabajo en unidad. Al participar en la Reunión Nacional de Consejeros 2016 de BBVA Bancomer, el jefe del Ejecutivo Federal subrayó que “el Gobierno de la República trabajará con las autoridades electas con institucionalidad y sin distingo”.

Héctor Yunes, quien a principios de abril inició su campaña con una amplia desventaja en las encuestas atribuida al creciente descrédito y repudio popular de la administración priista del gobernador Javier Duarte, expresó que “los ciudadanos con sus votos no dan lecciones, dan mandatos”, por lo que afirmó que “llegó la hora de que todos los actores políticos cumplamos el mandato de tener un gobierno útil, ecuánime, honesto y eficiente, un Congreso independiente que ejerza los equilibrios que este estado demanda”.

“Veracruz debe cerrar una etapa de oscuridad y de rezago, de retraso y de inmoralidad. Contra esa corriente luché y seguiré luchando más allá de ciclos partidistas, de modas o de oportunismos. Los sufragios emitidos en la jornada de ayer deben ser interpretados con gran mesura, existe una sociedad agraviada que se manifestó contra una forma de hacer política que se ha agotado”, apuntó.

Yunes Landa dejó en claro que los veracruzanos están cansados de los abusos, así como de los engaños, por lo que consideró que el voto mayoritario en los comicios de este domingo fue para generar un cambio en estas formas.

“No hay forma de malinterpretar el mensaje en las urnas del día de ayer. Veracruz está cansado de su postración, del abuso, del engaño, por lo mismo no hay cheques en blanco, sino un mandato para reconstruir el poder público en un instrumento al servicio de los demás”, finalizó ante las caras largas y llorosas de los líderes de su partido, amigos, compadres y colaboradores que lo acompañaron en esta contienda electoral, la más desastrosa para el priismo en toda su historia estatal, ya que además de perder la gubernatura sólo estarían por ganar 9 de las 30 diputaciones de mayoría relativa; mientras que la coalición PAN-PRD iba arriba en 13; el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) podría ganar 7, y el Partido Nueva Alianza (Panal) habría amarrado el de San Andrés Tuxtla con el ex Oficial Mayor de la SEV, Vicente Benítez González, según el último conteo del PREP. Los resultados oficiales serán dados a conocer por el OPLE hasta el miércoles próximo.

¿Los dejarán impugnar?

El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI difundió la tarde de este lunes que “se encuentra en la valoración técnica y legal para determinar, conforme a los primeros resultados emitidos por los órganos electorales en las entidades donde se llevó a cabo el proceso comicial, la factibilidad de presentar las impugnaciones correspondientes a la elección de Gobernador”.

La dirigencia nacional priista que encabeza Manlio Fabio Beltrones expuso que “los primeros análisis arrojan que existen elementos cualitativos y cuantitativos que legalmente permitirían impugnar entre 5 y 6 elecciones al cargo de Gobernador en los estados de Aguascalientes, Durango, Chihuahua, Veracruz, Quintana Roo, Puebla y/o Tamaulipas”, y que “atendiendo a cada supuesto previsto en la ley electoral de las entidades analizadas, se considera factible –inicialmente– presentar impugnaciones en los estados de Aguascalientes, Veracruz y en Durango”.

¿Les darán luz verde en Los Pinos para impugnar? La pregunta se hace porque, como anotamos líneas arriba, este lunes el presidente Enrique Peña Nieto, en una reunión con banqueros, mandó el mensaje que una vez acabada la jornada electoral era tiempo de dejar atrás la polarización, el encono y el enfrentamiento para buscar el trabajo en unidad.

Sin embargo, en su comunicado, el CEN del PRI puntualizó que “en términos de lo previsto en los procedimientos de cómputo para las elecciones de Gobernador, el Partido Revolucionario Institucional agotará las etapas y los supuestos de desahogo para aquellas votaciones que ameriten el recuento de votos ante los órganos electorales correspondientes”.

El comunicado priista argumenta que “siendo el partido de la legalidad, todas las acciones que emprenda el Revolucionario Institucional se sujetarán a ley y a las normas que regulan las etapas post-electorales” y que “será en este marco jurídico en el que se conduzcan nuestros candidatos, candidatas y militantes.”