La encuesta difundida este lunes por un importante impreso de circulación nacional confirma la muy cerrada contienda, el estrecho margen entre los dos candidatos punteros al gobierno de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, de PAN-PRD; y Héctor Yunes Landa, de la alianza PRI-Verde-Panal-Ave-Cardenista; así como la presión que comienza a ejercer sobre los primeros el abanderado del Movimiento de Regeneración Nacional, Cuitláhuac García Jiménez.

En este nuevo ejercicio de medición de la opinión pública veracruzana, Yunes Linares se mantiene en la punta, con 20.8 por ciento de las preferencias. Le sigue de cerca Yunes Landa, con 18.1 por ciento; la diferencia entre el primero y el segundo es apenas de 2.7 por ciento.

A este dato se suma otro elemento que resulta de mucho interés: la ventaja del segundo (PRI) sobre el tercero (Morena) es de sólo 1.9 por ciento, ya que el abanderado del partido de López Obrador registra 16.2 por ciento. El margen de error de la encuesta es de +/- 3.1.

En ese sentido, podríamos hablar de que en la elección del 5 de junio prácticamente cualquier cosa puede pasar: el triunfo del PAN o del PRI, e incluso una remontada del candidato de Morena, que se ve menos probable, pero ciertamente posible, porque la diferencia entre el primero y el tercero es sólo de 4.6 puntos porcentuales.

Al igual que en otras encuestas similares levantadas en Veracruz con motivo del proceso electoral, los demás candidatos, Juan Bueno Torio, Armando Méndez de la Luz, Alba Leonila Méndez Herrera y Víctor Alejandro Vázquez Cuevas, prácticamente no figuran; sólo el primero, el aspirante independiente, aparece con 2.8 por ciento; los abanderados del Movimiento Ciudadano y de los partidos del Trabajo y Encuentro Social, ni siquiera llegan a dos puntos porcentuales.

Hace menos de una semana, otro prestigioso medio, también de circulación nacional, difundió los resultados de la encuesta que aplicó en territorio veracruzano; en ese estudio Miguel Ángel Yunes también sale adelante en las preferencias, con 33 por ciento; muy cerca, un punto abajo, está el priista Héctor Yunes Landa, con 32 por ciento en la intención del voto. Cuitláhuac García registró 24 por ciento, 9 puntos menos que el primero y ocho menos que el segundo, con un margen de error de 3.7 por ciento.

A unos 30 días de que concluyan las campañas políticas y a menos de cinco semanas de la jornada electoral, las encuestas reflejan un escenario cada vez más cerrado y de alta competencia en Veracruz.

PAN pierde gas

Este lunes, la página de internet de Expansión (en alianza con CNN) difunde una interesante entrevista con el candidato de la alianza PAN-PRD al gobierno del estado, quien afirma que, en las encuestas, está 12 puntos arriba del PRI. Sin embargo, es muy probable que los números que maneja Yunes Linares no estén debidamente actualizados.

Hace casi dos meses, el 5 de febrero, la agencia SDPnoticias realizó un recuento, una medición de los partidos en las entidades que celebran elecciones locales este año. Destaca, para el caso veracruzano, que el candidato de la alianza “Para Rescatar Veracruz” contaba con una ventaja de 8 puntos sobre su más cercano contendiente, el priista Héctor Yunes Landa; de igual manera, dicha página ya consigna el avance del Movimiento de Regeneración Nacional y no descarta que su candidato, Cuiutláhuac García triunfo en este proceso.

Hace un mes, un importante medio nacional, especializado en economía, negocios y finanzas, difundió los resultados de una encuesta levantada entre el 30 de marzo y el 4 de abril en territorio estatal; en ese estudio, Miguel Ángel Yunes aparece con el 43 por ciento; el priista Héctor Yunes sale con 35 por ciento; mientras que Cuitláhuac García se rezaga, en el tercero, con 16 puntos porcentuales. Otra vez, los candidatos Juan Bueno, Armando Méndez, Alba Leonila Méndez y Pipo Vázquez tienen tan pocos puntos que ni siquiera figuran.

Después de esas mediciones surgieron, en medios nacionales e internacionales, notas que vinculaban al abanderado de la alianza PAN-PRD y a sus familiares más cercanos con presuntos casos de enriquecimiento inexplicable, como el intento de inversión en paraísos fiscales o las propiedades que habrían adquirido en el extranjero; a ello se suma una intensa campaña, difundida a través de las redes sociales (básicamente Facebook y Twitter), para desacreditar a Yunes Linares y restarle, a base de golpes mediáticos, puntos en las preferencias ciudadanas.

El resultado de la suma de esos factores es la progresiva pérdida de puntos en la intención del voto para la campaña panista.

Hoy, las encuestas más serias y recientes hablan de un empate técnico entre los primos Yunes, Miguel Ángel y Héctor, con ligera ventaja para el primero; las preguntas que surgen, en ese contexto, se relacionan con las posibilidades del PRI y Morena para remontar en las próximas cuatro semanas y, por otro lado, hasta qué punto podría desplomarse el candidato panista.

Lo cierto es que una tendencia mucho más clara, incluso irreversible, se podrá observar hasta dentro de tres semanas. @luisromero85