Ya me lo había dicho José Miguel Flores, el director de Orbis Tertius, «es una cantante irlandesa que tiene una forma muy particular de cantar y una voz que no trata de imitar a nadie, que no trata de parecer negra, es una voz muy suya, muy hermosa y muy afinada».
Yo no conocía a Louise Phelan, debo reconocerlo, pero tras la escucha de su segundo disco, Moments of Light, coincido con José Miguel, se trata de una voz que ha buscado su propio camino, su manera personal de decir el jazz pero sin perder el sabor del swing, del blues, de Nueva Orleans, del jazz de a deveras ese que, para serlo, debe ser personal e irrepetible y librarnos del cangrejo de lo idéntico (cito, por supuesto, a Cortázar)
Louise, ahora lo sé, nació en Lilmerick, Irlanda y su voz se ha esparcido por el mundo en presentaciones como solista o acompañada de orquestas sinfónicas, bandas orquestales y big bands. Ha trabajado también en espectáculos musicales, teatrales, en radio y televisión por todo su continente y por el nuestro.
Un día del año 2004 se hizo a la mar y surcó, durante cinco años, los siete mares a bordo de cruceros ejerciendo el oficio seductor de las sirenas hasta que llegó a nuestras playas y, desde 2010, vive en nuestro país donde se ha consolidado como una de las voces imprescindibles en el sound track del jazz nacional, su canto ha sido cobijado por Alex Mercado, Marc Osterer, Agustín Bernal, Gabriel Puentes, Luri Molina, Dan Mazor, Joe D’Etienne, Arnaldo Freire, Dorio Ferreira, Cris Lobo, Gerry López, Roberto Aymes, Pablo Prieto, Jaime Ferrada, Ottis Ganceda, Marcos Milagres, Diego Franco, Jacob DeVires, Iain Hunter, Javier Flores Mávil, Rodrigo Castelán, Yaury Hernández, Emiliano Coronel, Jorge Servín, Pere Soto, Alberto Moreno, Jazz Big Band Orquesta de Oaxaca, Big Band Jazz de Eugenio Elías, JazzTeca Big Band Puebla y Sergio Cortés, Orquesta Sinfónica OSBUAP de Puebla, Jazz Ensemble de Matías Carbajal, El Gringo Loco Brass Band y muchos más y ahora toca el turno de acogerla al grupo decano de la Universidad Veracruzana, Orbis Tertius.
Estará en Xalapa no solo para cantar sino para transmitir los secretos de la Técnica Alexander, de la que no sé mucho pero transcribo la descripción que da en su página web:
La Alexander Technique es un método de reeducación del sistema neuromuscular. De esta manera, nos enseña a liberar el estrés y permitir de manera libre la liberación [sic] de la respiración, al mismo tiempo que mejorara la postura, equilibrio y coordinación. De manera natural aliviará el dolor de espalda, presión arterial alta y tensión excesiva en el cuello u hombro. 
La Técnica también puede mejorar la confianza en sí mismo, la conciencia corporal, la concentración y la calidad de su vida general, como resultado, a mediano plazo.
La Técnica Alexander es una técnica de renombre internacional que ha existido por más de 100 años.
Hoy en día la Técnica se enseña en la mayoría de las instituciones musicales de renombre en el mundo. Ej. Royal College of Music en Londres y Julliard College of Music en Nueva York, Estudio de Opera Bellas Artes en México DF para nombrar unos pocos. La formación para acreditarse como profesor de Técnica Alexander consta de tres años de tiempo completo y solo se cursa en el extranjero, por este motivo es que en México únicamente existen 5 profesores.
El taller será hoy, viernes 24 de abril, a las 13:00 horas y para tomarlo deben escribir al grupo de Facebook Orbis Tertius y dejar su solicitud con su nombre y teléfono.
El concierto será mañana, sábado 25, a las 20:30 horas en la sala Emilio Carballido del Teatro del Estado, la entrada será libre pero con un pase que pueden recoger en el Hotel Real de Cortés, que está ubicado en Clavijero 17, frente a las instalaciones de Radio Universidad Veracruzana.
Estas actividades adelantan la celebración del Día Internacional del Jazz que, como sabemos, es el 30 de abril. Empecemos, pues, a festejar para ganar esponja y simultaneidad porosa (nuevamente el Cortázar se aparece).
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