Poza Rica, Ver.- La zona del Totonacapan y municipios de la región norte de Veracruz tuvo voz en la lucha contra la aplicación de la técnica de la fracturación hidráulica (Fracking) en la industria petrolera a través de la participación de Alejandra Jiménez, de la Coordinadora Regional de Acción Solidaria en Defensa del Territorio (Corason), en la reunión internacional que sostuvieron con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en Colorado, Estados Unidos.

Desde Papantla, Alejandra Jiménez viajó hasta Colorado para participar en esta reunión con la CIDH para advertir sobre los riesgos y afectaciones de la aplicación del Fracking, siendo ella y otra activista las únicas mexicanas participando en este evento, dando voz a los mexicanos que temen sobre el uso de esta técnica.

Alejandra Jiménez dijo que de acuerdo a solicitudes de acceso a la información, Papantla, en esta zona norte de Veracruz, es el municipio con mayor número de pozos de fracking en el país, donde la población pertenece mayoritariamente al pueblo totonaca.

Resaltó que esta técnica de explotación ha provocado el desvío de manantiales y el desecamiento de pozos artesianos, con lo que muchas comunidades perdieron sus fuentes de agua y han visto comprometida su salud y deterioradas sus condiciones de vida, PRI lo que se conformó CORASON y está reconocida por la Alianza Mexicana contra el Fracking.

Fueron más de cien organizaciones sociales que pidieron exponer ante integrantes de la CIDH los motivos por los cuales se oponen al Fracking, sobre todo pidieron que se detenga para prevenir las violaciones a loa derechos humanos que se derivan de esta técnica.

Según datos recopilados por la Alianza Latinoamericana Frente al Fracking, en América Latina existen cerca de 5,000 pozos de fracking. En Argentina, existen aproximadamente 2,000 pozos. Mientras, en Chile, según datos oficiales, actualmente se ha aprobado la fracturación de 182 pozos, la gran mayoría en la isla de Tierra del Fuego. En el caso de México, el número de pozos de fracking supera los 3,350.

A pesar de este incremento, se ha avanzado también en prohibiciones y restricciones al fracking en tres estados de Estados Unidos, en Uruguay, en la provincia argentina de Entre Ríos y en al menos 72 municipios de Brasil.

Misael Olmedo/Avc