Muy enojado está el dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, porque se le señalen nexos con el porquerizo político que hay en Guerrero.

En un mensaje difundido en redes sociales, el Peje se lamenta de que “tanto los voceros del régimen corrupto como periodistas independientes que no están con nosotros, partidarios del “todos son iguales”, aprovecharon los dolorosos asesinatos y la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa para tratar de involucrarnos, valiéndose de que Lázaro Mazón, a quien el Consejo Estatal de Morena propuso como Protagonista de la Soberanía Nacional con miras a ser nuestro candidato a la gubernatura de Guerrero, mantenía relaciones de amistad con José Luis Abarca, expresidente municipal de Iguala”.

“Por suerte y para decepción de mis detractores –asegura con vehemencia el Peje-, no conozco a José Luis Abarca y, lo que es más importante, nunca en mi larga vida como dirigente social y político he establecido relaciones de complicidad con nadie. Sin embargo, en el afán de desprestigiarme, con la máxima del hampa de la política y del periodismo deshonesto de que “la calumnia cuando no mancha tizna”, han llegado a decir que me he visto obligado a guardar silencio ante los lamentables hechos de Iguala y, como suele pasar en estos casos, hasta amigos y simpatizantes llegan a dudar”.

El gran problema del Peje López Obrador es que es absolutamente intolerante a la crítica. Su molestia es por un texto publicado en la revista Proceso, que por ser de tendencia de izquierda, él considera que debería alabarlo sin cuestionarle absolutamente nada.

Sólo que eso no sería periodismo, sino propaganda barata. Pero Andrés Manuel no lo acaba de entender. Pero tiene una salida. Que demuestre que de verdad no tiene nexos con esta brutal mafia guerrerense. Y nadie dudará de su honorabilidad. Pero con pura saliva, pues no.

POR CIERTO, se tiene la duda sobre si la licencia de Ángel Aguirre Rivero realmente contribuirá tanto al esclarecimiento de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, como de la paz en Guerrero. A ver qué pasa.

BIEN HACE EL GOBIERNO del estado en exigirle a Petróleos Mexicanos que repare los daños e indemnice a familias afectadas de municipios de la región de Poza Rica, que fueron afectados por el derrame de hidrocarburo. Y es no es la primera vez que ocurren incidentes en instalaciones de Pemex. Si bien es cierto que la paraestatal ha participado del desarrollo de nuestro país, como lo cacarean en su portal web, es más cierto que, a lo largo de su historia, han tenido accidentes –en muchos de los casos, y eso hay que decirlo también, no atribuibles a ellos sino a la delincuencia- que han dejado serias repercusiones en las comunidades. En las zonas sur y norte de Veracruz, donde se asientan las empresas más grandes que Petróleos Mexicanos tiene en el país, se han registrado daños a la ecología, aunque, afortunadamente, han sido reparados. En esta administración estatal, la cercanía de Javier Duarte de Ochoa con las autoridades federales ha obligado a Pemex a actuar de manera inmediata, en beneficio de muchas comunidades. Este jueves, hablando del mismo tema, el mandatario exigió a directivos de Petróleos dos cosas: primero que atiendan el derrame suscitado este miércoles en el municipio de Coatzintla y, segundo, que resarzan los daños.

ESTE VIERNES SERÁ inaugurado el XXVII Seminario Internacional El Análisis Político del Discurso: Herramienta Analítica para la Investigación Educativa en Homenaje a Ernesto Laclau, en el que participarán destacados especialistas en el tema, como el Doctor Manuel Sebastián Barros, académico de la Universidad Nacional de la Patagonia. La Secretaría de Educación de Veracruz invita a este evento académico en el que durante dos días se analizarán los vínculos teóricos y prácticos entre educación y política; el programa contempla Educación y política: una vinculación teórica; Teoría y metodología; Teoría, historia y normatividad; Educación política: teorizando la agencia como presupuesto de la ciudadanía. Ernesto Laclau fue un teórico investigador y político argentino, profesor de la Universidad de Essex, y Doctor Honoris Causa de la Universidad de Buenos Aires; autor de diversos libros, siendo Hegemonía y Estrategia Socialista y La Razón Populista, una de sus obras más reconocidas a nivel mundial. El Doctor Sebastián Barros cuenta con los grados académicos de  Licenciado y Doctor en Ciencia Política por la Universidad de Essex Inglaterra, además de haber sido director en el  Instituto de Estudios Sociales y Políticos de la Patagonia.

FERNANDO VÁZQUEZ Rigada, destacado consultor político, participa este viernes por la tarde como conferencista magistral en los trabajos del Diplomado en «Gobernabilidad Democrática y Construcción de Ciudadanía», que realizan conjuntamente la Secretaría de Gobierno y la Universidad Veracruzana, en la USBI Xalapa. Vazquez Rigada cursó la Licenciatura en Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México donde se tituló con mención honorífica, y obtuvo su Maestría en Derecho en la Universidad de Harvard. Posee un Diplomado en Mercadotecnia Política por el ITAM y fue el primer mexicano en ser admitido en el “Bradshaw Seminar” de la Universidad de Claremont, Cal.