Jorge Winckler aseguró que su remoción temporal del cargo como fiscal general del estado, es un acto arbitrario que recurrirá ante tribunales y aseguró que cuenta con las evaluaciones de control y confianza: “No soy un delincuente, sigo siendo el fiscal general y con ese cargo, seguiré defendiéndome», dijo en conferencia de prensa la noche de este martes.

El fiscal aclaró que al momento en que sucedieron los hechos y llegaron cientos de policías anti motines a rodear el edificio de la fiscalía general, estaba en una reunión con empresarios.

Winckler refutó los argumentos de la comisión permanente del Congreso Local, que lo removió temporalmente por no tener certificaciones, y mostró a los medios brevemente un documento que dijo avalaba sus exámenes de control y confianza, incluso dijo que está avalado por agencias de Estados Unidos.

Se dijo sorprendido por la decisión de los diputados, quienes incluso tomaron protesta a Verónica Hernández, como nueva encargada de despacho, y confió en que el Presidente Andrés Manuel López Obrador no estará de acuerdo con el actuar de los legisladores pues está fuera del estado de derecho.

Acompañado por el fiscal regional de Xalapa, y ex fiscal de desaparecidos, Eduardo Coronel, reiteró que la decisión de los diputados es ilegal y el acto no está previsto en el marco jurídico ni en la normatividad.

Recordó además que hay un amparo federal en su favor, que señala que no puede ser destituido del cargo por ningún argumento jurídico o acción, que no sea a través de un juicio político.

«Siempre me he conducido con apego a la legalidad, por ello señalo que este acto a todas luces ilegal, no afecta al fiscal general, sino a una institución que, creada de forma autónoma, hoy lo hacen con la fiscalía, mañana lo pueden hacer con cualquier juez, magistrado, presidente o ayuntamiento, nada puede estar por encima de la ley, quebrantarla es un acto ilegal que estoy seguro el presidente no comparte», dijo.

Dijo desconocer si hay orden de aprehensión en su contra y dijo que apenas iba a conocer del acuerdo que lo removió y advirtió: » Sigo siendo el fiscal y con ese cargo seguiré defendiéndome, y a la sociedad que necesita un fiscal autónomo que no esté sometido a las decisiones del gobierno del estado».

Winckler comentó que apenas este lunes sostuvo una reunión con la SEIDO, donde dio informes sobre el caso del ataque al bar Caballo Blanco en Coatzacacoalcos: » Remití personalmente la carpeta, les informé lo que le compartí al gobernador, una investigación llevada por la Fiscalía General del Estado, en donde prácticamente entregamos un expediente resuelto».

AVC/ Flavia Morales