Indignante y antihigiénico, para los residentes de la zona metropolitana Veracruz-Boca del Rio acudir a hacer sus compras de productos alimenticios a los diferentes mercados del municipio de Veracruz, ya que sus calles se encuentran en completo abandono y las pestilentes aguas negras.

Al abordar a varios compradores de los productos alimentarios, manifestaron que por el alto costo de la canasta básica, resulta incosteable acudir a los diferentes supermercados que se localizan a lo largo y ancho de esta zona metropolitana, por lo que tienen la necesidad de adquirirla en los mercados municipales, ya que los precios son más accesibles cuando menos en las frutas y verduras.

Sin embargo, algunos pretenden dejar de ir a los mercados por el alto grado de contaminación que pueden tener las carnes, frutas y verduras por la falta de higiene y abandono de la infraestructura que presenta dicha zona, sino las aguas negras que están a flor del piso y frente a los negocios que se dedican a ofertar sus productos.

El mercadito que se ha instalado por lustros sobre la calle de Úrsulo Galván, que por lo regular son productos ofertados por sus mismos productores del campo, en la actualidad se instala frente a nauseabundas aguas de drenaje y arterias llenas de lodo como si fuera una ciudad del tercer mundo.

Administraciones municipales llegan concluyen su mandato y los mercados siguen en el abandono, manifestándole a los locatarios de que no hay dinero para la remodelación de los mercados, como se los plantearon a los representantes del mercado Malibrán que por cierto sigue hundido en las aguas negras del drenaje.

El alcalde del municipio de Veracruz, Fernando Yunes Márquez, no debe de echar en saco roto la súplica de los locatarios de los mercados y la exigencia de los que acuden a ellos a comprar sus productos alimenticios, ya que esta insalubridad puede llegar a desencadenar en una epidemia, epidemia que estarían inmersos todos los habitantes de la zona metropolitana.

J. J Castillo