El gobierno de Cuitláhuac García Jiménez favoreció al Banco Mercantil del Norte (Banorte), institución crediticia que le dio un préstamo de 4 mil 500 millones de pesos en diciembre del 2018, para cubrir necesidades a corto plazo.

La Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) incurrió en una falta administrativa al solicitar una línea de crédito con un banco que entregó su propuesta económica tres días después de que se dio a conocer el fallo para la contratación, lo que haría imposible su participación en el proceso para la adquisición del préstamo.

El Informe de la Cuenta Pública 2018, en el que se hizo una revisión especial a la deuda pública del Estado, evidenció la irregularidad administrativa en el primer mes de la administración del morenista.

“La propuesta ganadora presentada por dicha institución, mediante escrito de fecha 7 de diciembre de 2018, fue recibida por la Tesorería de la Secretaría de Finanzas y Planeación el 13 de diciembre de 2018, es decir, tres días después del acto de fallo, lo que hace imposible su participación en el acto competitivo” detalla la observación DEP-014/2018/008 ADM.

El tema cobra relevancia, luego de que se aprobó la reestructuración de la deuda pública al gobierno de Morena; durante el debate, el Partido Acción Nacional afirmó que será Banorte el banco que apoyará en la renegociación de los créditos heredados por Miguel Ángel Yunes Linares.

Del dinero recibido por el prestamos de Banorte, el gobierno de García Jiménez pagó a 10 proveedores un monto total de 38 millones 582 mil 139 pesos, que no se justificaron de manera adecuada.

Por su parte, el exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares fue observado por el manejo financiero de mil 229 millones de pesos. De ese total, 931 millones 544 mil pesos no se encontraron en los fondos de reserva que se crearon por la reestructuración de la deuda; y se observaron irregularidades administrativas de los créditos a corto plazo por 297 millones 932 mil pesos.

La deuda pública del estado cerró en 47 mil 836 millones 64 mil pesos, que incluyen bonos cupón cero y créditos con la banca privada. A lo largo del 2018 se gastaron 12 mil 894 millones de pesos por concepto de amortización, interés y los gastos de los pasivos.

El gobierno de Yunes Linares dejo 10 créditos con la banca privada por un monto de 37 mil 317 pesos; además de un préstamo con Banobras por 4 mil 536 millones de pesos; y cuatro emisión de bono cupón cero por 5 mil 981 pesos que fueron heredados por Javier Duarte de Ochoa.

AVC/Isabel Ortega