Entre ternura y risa; eso provoca la declaración del alcalde de Cuichapa, Juan Manuel Torres Camacho, quien predice que al concluir su administración en ese municipio, ubicado en la zona de las altas montañas, centro de Veracruz, se habrá erradicado el problema de la pobreza.

El alcalde apunta que con los 30 millones de pesos que ejerce este año el ayuntamiento que encabeza (entre apoyos estatales y recursos federales) se logrará disminuir el número de personas en condición de pobreza y pobreza extrema. Habla de viviendas y pisos firmes; de la introducción de servicios básicos y de la construcción de escuelas; de mejoras al sistema de alumbrado y de una planta de tratamiento; todo, con los 27 millones 283 mil pesos que maneja el presupuesto cada año.

Cuichapa es un municipio pequeño; con una población total de 11 mil 645 personas (Censo de 2010), se considera con un grado de marginación medio; no es de los más pobres de la entidad. De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el 60 por ciento de sus habitantes es pobre; de ellos, 44.9 por ciento registra pobreza moderada, mientras que 15.6 enfrenta pobreza extrema. 26 de cada 100 pobladores de ese lugar son vulnerables por carencias sociales; 5 por ciento es vulnerable por ingreso; y sólo 7.4 no tiene esos problemas, esa es la clase privilegiada, 860 personas, muy pocas familias.

A pesar de no ser de los municipios más pobres y marginados de Veracruz, Cuichapa tiene al 57 por ciento de sus habitantes mayores de 15 años con la primaria incompleta; registra un índice de analfabetismo que casi llega a 12 puntos; el 30 por ciento de su gente no es derechohabiente de servicios de salud; por si fuera poco, 2 de cada 10 casas tienen piso de tierra; el 10 por ciento de las 3 mil viviendas del lugar no tiene drenaje; y 7 por ciento carece de agua entubada.

Observando esas limitaciones y carencias sociales, así como los índices de pobreza, rezago y marginación, la declaración del alcalde Torres Camacho no deben tomarse más que como una expresión de buenas intenciones, una puntada; no puede hablar en serio porque los recursos que le faltan por ejercer (poco más de 70 millones de pesos, de aquí hasta que termine su periodo al frente del ayuntamiento) no resolverán los problemas de la población de su municipio.

Piden carretera

Cansados del incumplimiento de promesas de que han sido objeto desde hace más de tres décadas, los habitantes de las comunidades Francisco Sarabia y Zaragoza, municipio de Misantla, bloquearon este miércoles la carretera que comunica a Martínez de la Torre, a la altura de la comunidad Libertad. Esa vía está, literalmente, intransitable.

Por ese camino, la población del lugar, que se dedica fundamentalmente a la agricultura y ganadería, saca sus productos para comercializarlos en Misantla y Martínez de la Torre. En tiempo de lluvias, sólo circulan unidades de doble tracción, camiones, tractores y bestias. Están casi incomunicados desde hace más de 30 años, cuando se construyó y abrió la actual carretera que une a esos dos municipios y condenó al abandono a quienes se asentaban en las comunidades ubicadas en la antigua vía.

En esos lugares ocurre algo curioso: invariablemente, en cada campaña política de alcaldes y diputados locales y federales, los candidatos recorren esas comunidades, visitan a la población, prometen diversas obras y apoyos –particularmente la reconstrucción de una carretera que está convertida en camino de herradura–, se van y no vuelven… hasta la próxima campaña.

En este caso, horas después del bloqueo, la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública del gobierno estatal anunció que en 45 días comenzarían los trabajos de asfaltado de 2 kilómetros en ese camino, con material que canaliza a la entidad Petróleos Mexicanos. A ver si es cierto…

Quejas contra bancos

Este jueves, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de los Servicios Financieros, Condusef, reveló que las quejas contra los bancos han aumentado un 8 por ciento durante el primer semestre del año.

En total, se registraron 88 mil 418 reclamos, consigna la prensa nacional. La mitad de las quejas se relaciona con los abusos en tarjetas de crédito. De igual forma, hay más de 12 mil acusaciones de usuarios de tarjetas de débito. También hay u8n aumento considerable en el número de señalamientos por irregularidades en los llamados créditos de nómina.

La Condusef informó que el monto de las multas a los bancos durante el primer semestre de 2015 supera los 67 millones de pesos; es algo así como quitarle un pelo a un gato. @luisromero85