El presidente de Bolivia, Evo Morales, decretó estado de emergencia en el país debido a que, aseguró, se prepara un golpe de Estado para derrocarlo del poder.

El mandatario boliviano hizo estas declaraciones en medio de la incertidumbre política en Bolivia, que acaba de celebrar elecciones, aunque los resultados oficiales no se han dado a conocer.

Evo Morales ha asegurado que los bolivianos lo eligieron por cuarta ocasión para que los gobierne ya que “ganó” la elección con más de medio millón de votos de diferencia.

Por su parte, el Tribunal Supremo Electoral suspendió el conteo de votos desde el lunes y después lo reanudó pero “a cuenta gotas”.

Hemos garantizado el crecimiento económico, la paz social, la justicia social, la igualdad. Quiero denunciar al mundo que está en proceso un golpe de Estado. La derecha lo preparó con apoyo internacional.

– Evo Morales

“Exhortamos a la derecha boliviana a dejar de provocar enfrentamiento entre bolivianos. No siembren odio y desprecio a los sectores populares. Desconocer el voto de los sectores populares es actuar con racismo. Los paros políticos solo perjudican económicamente a cada departamento”, escribió en su cuenta de Twitter.

De la misma manera, aseguró que desde este miércoles el país se declara en movilización pacífica, constitucional y permanente, “para defender la democracia que tanto le ha costado a Bolivia”.

“Los gestores del golpe tratan de impedir el conteo de las actas de votos y promueven el asalto a las instituciones. Quieren “reconocer” a un presidente estos días”, denunció.

Chile, el otro caso

En Chile, ciudadanos no han dejado de manifestarse en las calles debido, principalmente, al alza en la tarifa del transporte público pero, de igual manera, en contra de la desigualdad económica, un sistema de pensiones que jubila a la mayoría con rentas inferiores al salario mínimo, costos en salud y educación elevados e incluso la privatización del agua.

Las movilizaciones y la represión se tornaron violentas en diferentes regiones de Santiago desde la semana pasada. Once personas murieron en las protestas, de acuerdo con cifras del gobierno chileno.

El ministro de Salud, Jaime Máñalich, informó que hay 239 civiles heridos. La Fiscalía notificó dos mil 151 detenidos en todo Chile. El Instituto de Derechos Humanos reportó en tanto 37 heridos por arma de fuego.

Aunque el presidente de Chile, Sebastián Piñera anunció la suspensión del alza en la tarifa del metro el sábado en la noche, las protestas se mantuvieron en varios puntos.

Reporte Indigo