A cien días de haber iniciado su gestión, al alcalde de Xalapa por Morena, Hipólito Rodríguez Herrero, y a su Cabildo, parece haberlos agarrado descuidados la marabunta de críticas y la guerra sucia emprendida en su contra. Y los ha agarrado sin contar con la más mínima idea de cómo desactivar la ofensiva mediática ni, mucho menos, hacer lo conducente para evitar los golpes por no atender adecuadamente la prestación de servicios básicos como recolección de basura, alumbrado público y bacheo de calles y avenidas.

Es cierto que muchos de los ataques deben ser hechos a un lado por tener un tufo electoral, los que buscan desacreditar a un gobierno morenista para bajarle votos tanto a su candidato a Gobernador como al que busca por tercera ocasión la Presidencia de la República. Pero hay otros señalamientos ciudadanos que debieron haber tenido respuesta hace muchas semanas y en el Cabildo no ha habido la experiencia para darla.

¿Hay funcionarios municipales que no están cumpliendo su encomienda, sea por desconocimiento o impericia probada? Está claro que sí. A no ser que el alcalde los esté limitando para que eviten proponer soluciones emergentes a los problemas que más siente la gente, a la espera de programas de carácter integral que requieren tiempo de maduración, lo cierto es que ha habido en estos tres primeros meses de gobierno omisiones evidentes en el quehacer cotidiano de un ayuntamiento.

Muchos seguidores de Morena han insistido en señalar que no se puede evaluar a un gobierno municipal por apenas 100 días de gestión. Lo cierto es que no solo se puede sino que se debe hacer, porque no se pide la puesta en marcha de obra pública sino la simple resolución de problemas cotidianos de la ciudad, para lo que hay presupuesto.

Los días previos a su toma de protesta, el equipo de Hipólito Rodríguez solo pareció estar dispuesto a incidir en las últimas medidas del entonces alcalde Américo Zúñiga, tales como el del cobro anticipado del servicio de agua potable y el supuesto adelanto en el cobro del impuesto predial, contra las que desplegaron un fuerte operativo mediático, pero no para establecer un programa de medidas inmediatas a aplicar tan pronto tomaran las riendas del gobierno municipal.

Les hace falta ver más box

Los señalamientos sobre lo que no se está haciendo no solo pueden hacerlos, como estrategia electoral, el PAN, el PRD o el PRI, sino la misma dirigencia de Morena, que debería apretar las tuercas para que la mala gestión municipal no afecte su imagen rumbo a los comicios. La mejor prueba de que puede hacerse la puso un exalcalde xalapeño, el empresario Ricardo Ahued Bardahuil, hoy enfundado en la camiseta de Morena para contender por un escaño en el Senado de la República, quien ya dijo un “ya basta” al gobierno xalapeño.

En efecto, Ahued Bardahuil hizo, al principio de mes, un llamado respetuoso a Hipólito para que hiciera una evaluación de los funcionarios que colaboran con la administración y despida a quien no sirva. Y sabe de lo que habla, conoce los intríngulis de la administración municipal, de la que fue alcalde, y comparte con sus paisanos el incumplimiento de ciertas obligaciones.

Aunque reconoció el valor de la gestión del investigador y académico universitario investido con la responsabilidad de gobernar la capital estatal, para Ahued hay asuntos pendientes como el mejoramiento de los servicios públicos; los xalapeños sufren de calles atestadas de baches y de un mal servicio de limpia pública, entre otras afectaciones, que ya deberían haberse resuelto o regularizado; “no pueden estar sufriendo con baches, con falta de alumbrado y exceso de basura”.

La crítica del candidato al Senado por Morena es de buena fe, prefiere decirle a su compañero de camiseta (aunque ninguno de los dos tenga carnet de militante) que ya es hora de despedir a quienes han fallado, que ya basta, que se acabó la paciencia. ¿Tendrá Hipólito Rodríguez la autoridad, la fortaleza, la determinación de lanzar a la calle a compañeros de academia que no le están funcionando? Ojalá que así sea, como ya lo ha hecho con funcionarios que le causaron problemas, y pueda darle normalidad a la acción municipal.

El PAN contraataca

Aunque muchos ataques anónimos contra el ayuntamiento xalapeño se han atribuido al PAN, apenas este lunes ha aparecido un vasto análisis crítico de parte de un panista destacado en la ciudad, el diputado local Sergio Hernández Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso y quien realizará pronto campaña para reelegirse.

Sergio Hernández presentó un Anteproyecto de Punto de Acuerdo durante la sesión de la Diputación Permanente para solicitar al Ayuntamiento de Xalapa informe y remita a la Legislatura local la relación de servidores públicos no veracruzanos contratados por la presente administración municipal junto con el cargo que ocupan; de igual forma, la relación de denuncias penales presentadas contra servidores públicos de la administración municipal anterior, derivadas del proceso de entrega-recepción, así como el expediente de extinción de la concesión del equipamiento y operación de relleno sanitario de la ciudad, y el plan de gestión de residuos sólidos que implementará en consecuencia.

Lo anterior deriva, dijo, del hecho de que los xalapeños tienen un gobierno municipal que no da resultados, que no ha sido capaz de cumplir con las expectativas que crearon y que a cien días de su administración sólo se puede concluir que “son inexpertos, son ineptos o son tapaderas”. Además, agregó, hay que advertir que, de los 15 integrantes del cabildo, ocho (contando al alcalde y a la síndica, son del mismo partido) por lo que no tienen pretexto para decir que el cabildo u otro partido político les obstruye sus decisiones.

Señaló que nadie quiere improvisados al frente de la administración de la capital; “todos queremos gente que sepa lo que hace y sus expertos no tienen ni idea, son expertos pero en simulación, o peor, son tapadera, porque no pasan de los señalamientos a las denuncias formales, y si no tienen pruebas o son ineptos ¿en qué son expertos?”.

A todo esto, dijo, hay que sumar  la decisión tomada por la mayoría del cabildo para extinguir la concesión para el equipamiento y operación del relleno sanitario de Xalapa, “esperemos la decisión que se tomó tenga el sustento jurídico suficiente para que no sea contraproducente y más adelante el Ayuntamiento se vea obligado por los tribunales a pagar indemnizaciones a la empresa Proactiva.”

Para concluir su intervención, y al abundar sobre el tema de este Anteproyecto de Punto de Acuerdo, el diputado Sergio Hernández, indicó que la Comisión Municipal de Agua Potable y Saneamiento (CMAS) es un caso evidente de corrupción, donde se habla de prepotencia, despidos injustificados y hasta de la existencia de aviadores.

Acusó que las tarifas por dicho servicio han aumentado en un 141 por ciento durante los últimos diez años en Xalapa, y ahora, en lugar de disminuir, aumentó. “Le hicieron creer a la gente, les dijeron que tuvieran la esperanza, que esperaran a que ustedes llegaran y en lugar de bajar el precio, lo aumentaron. Esto ha sido completamente reconocido por el munícipe, quien además ha referido que el incremento podría aumentar hasta un 25 por ciento durante todo 2018. ¿Son o no un fraude?”.

 

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