Fuentes confiables de la actual administración estatal cuentan que la tarde del pasado martes 1 de octubre llegó un enviado de la Secretaría de Gobierno (SEGOB) a la Secretaría de Finanzas y Planeación, quien de inmediato fue pasado a la Sala de Juntas anexa a la oficina del titular de la Sefiplan, José Luis Lima Franco.

La presunta encomienda que llevaba el enviado de Eric Cisneros Burgos, cabeza de la SEGOB, era la exigencia para separar de sus cargos a 17 colaboradores de las oficinas del secretario Lima Franco y del subsecretario Eleazar Guerrero Pérez.

De acuerdo con esta versión extraoficial, el titular de la Sefiplan mandó llamar al subsecretario y éste, a su vez, se comunicó telefónicamente con el gobernador Cuitláhuac García, quien minutos después habría arribado al antiguo edificio de la Tesorería General del Estado, mientras el personal despedido iniciaba el proceso de entrega-recepción.

Según la versión que corre, la discusión se habría tornado ríspida entre Guerrero Pérez y el jefe del Ejecutivo estatal, pues mientras el subsecretario le reprochaba que cómo era posible que le permitiera a Cisneros tomar esas decisiones, el mandatario veracruzano habría justificado que era para colocar en esos cargos a personal más comprometido con la 4T, a lo que el subsecretario le recordó que él “no había llegado ahí por ellos, sino que venía con el apoyo de México”, y que no iba a permitir que a través de sus recomendados el secretario de Gobierno tomara el control de la Sefiplan.

No obstante las recriminaciones –la discusión se habría extendido hasta la medianoche–, trascendió que al final del alegato fueron 13 funcionarios los que abandonaron su puesto, quedándose 4 ante la amenaza del subsecretario de llevar el tema más arriba si no le respetaban a ese personal.

Cuatro días después, el sábado 5, fueron citados a las 16:00 horas los 17 trabajadores en comento –cuatro que se quedaron, más los 13 nuevos– en las instalaciones del DIF Estatal para una reunión con el secretario de Gobierno, la cual se habría pospuesto porque dicen que Cisneros no llegó.

Quién sabe si ese presunto hecho esté conectado a este otro, pero llamó la atención que casualmente ese mismo sábado el titular de la SEGOB recibió un duro mensaje a través de una columna anónima del diario El Universal que textualmente decía:

“Desde Veracruz, nos cuentan que quien anda navegando por aguas turbulentas es el secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, ya que desde hace meses en sus redes sociales ha emprendido una intensa campaña para posicionar su nombre junto con el logotipo del gobierno de Veracruz. Por ello, nos revelan, han surgido todo tipo de especulaciones, hasta que en algún momento podría estar ocupando el cargo máximo en la entidad. Sin embargo, nos dicen, más allá de ello lo único cierto es que la diezmada oposición prepara sendos recursos ante autoridades electorales para frenar esta publicidad personal usando logotipos oficiales.”

¿Acaso habrá sido una Pejeseñal?