El 30 de agosto 2019, a los nueve meses de haber asumido el poder, el presidente Andrés Manuel López Obrador aceptó que había utilizado la frase “que se vayan al carajo” para referirse a los políticos “ambiciosos”, “sin ideales” y “vulgares” que por ese entonces ya buscaban hacerse de otros cargos públicos.

En la conferencia mañanera, el jefe del Ejecutivo federal reiteró sus palabras que, de acuerdo con un audio difundido, había dicho en una reunión plenaria de Morena realizada en un hotel capitalino. “Entre todos hay que ayudar para que se mantengan principios, ideales; que se vayan al carajo los ambiciosos”, había expresado el tabasqueño en dicha reunión privada.

Las declaraciones del mandatario se daban en un contexto de división de su partido por la renovación de la dirigencia nacional y por las diferencias entre Ricardo Monreal y Martí Batres por la presidencia del Senado de la República.

“Quien no tiene ideales, el que es un ambicioso vulgar, no debe de dedicarse al noble oficio de la política (…) ¡que se vaya al carajo!”, reiteró López Obrador ante los reporteros en Palacio Nacional, explicándoles que dicha expresión no era una grosería, sino que el “carajo” era una especie de canastilla colocada en lo alto de un buque a donde se enviaban castigados a los marineros que se portaban mal durante la travesía.

Casi dos años después, el 14 de julio de 2021 –recién pasadas las elecciones intermedias, en las que la oposición había ganado más de la mitad de las 16 alcaldías de la Ciudad de México, el principal bastión obradorista que gobernaba Claudia Sheinbaum, fuerte aspirante presidencial de Morena–, el senador Monreal, bajo sospecha de haber operado contra su partido principalmente en la alcaldía Cuauhtémoc que había encabezado como Jefe Delegacional de 2015 a 2017, salió a declarar que, llegado el momento, se inscribiría para ser el sucesor del presidente López Obrador y continuar la transición política que se inició en 2018, remarcando que no era “un ambicioso vulgar, soy un aspirante normal de carne y hueso con virtudes y debilidades, con errores en mi devenir público”.

“En 45 años no he tenido una sola investigación de corrupción ni de deshonestidad y por eso me siento con la experiencia para ser un aspirante normal, no un ambicioso vulgar”, y dijo que estará puntual a la cita con la historia en el momento en que se emitiera la convocatoria de Morena para la candidatura presidencial.

López Obrador, quien luego de esa debacle electoral había dejado de recibirlo durante casi dos años en Palacio Nacional, no lo dejó pasar. Manipuló las encuestas internas para imponer a Sheinbaum, relegando a Monreal hasta el último lugar, superado inclusive hasta por el diputado del PT, Gerardo Fernández Noroña, quien, tras un reclamo y berrinche, logró obtener que le dieran la presidencia del Senado.

Ricardo Monreal y su hermano David, gobernador de Zacatecas, perdieron en junio pasado las alcaldías de Cuauhtémoc, en la Ciudad de México, y de la capital zacatecana, pero presionaron a sus incondicionales de los tribunales electorales locales para anular ambas elecciones que ganaron los candidatos de la alianza PAN-PRI-PRD.

El ex líder del Senado y ahora flamante coordinador de la Cámara de Diputados, con el “voto de calidad” de su compadre Armando Ambriz Hernández como magistrado presidente del Tribunal Electoral capitalino, consiguió que se desempatara la votación para anular este sábado, por supuesta “violencia política de género”, el triunfo de la panista Alessandra Rojo de la Vega en la alcaldía Cuauhtémoc, quien en la contienda contra Caty Monreal le respondió en redes sociales a la hija del ex senador: “Presa deberías estar tú por corrupta y delincuente. Tú y toda tu familia, 48 propiedades, gasolineras, hoteles y contratos millonarios, todo está probado con documentos. La impunidad no es para siempre”, le reviró la popular influencer sobre la acusación de que el fallido atentado del que fue víctima en campaña, había sido un “montaje” que debía penalizarse con prisión.

“Perdiste y tu familia perdió Fresnillo. Retírate con dignidad y no des más vergüenza @catymonreal_”, publicó Rojo de la Vega en su cuenta de X, en la que para finalizar su mensaje sentenció: “La gente decidió derrotar a las mafias. Respeten su voluntad”.

Pero ahora, a escasos 29 días de que López Obrador entregue el poder, Monreal está más empoderado. Inclusive el político y abogado zacatecano, quien es catedrático de la Facultad de Derecho de la UNAM –cuyos alumnos, así como otros estudiantes de diversas universidades públicas y privadas salieron este domingo en la Ciudad de México a sumarse a las decenas de miles de manifestantes que reiteraron su rechazo a la reforma judicial tal como la pretende imponer el obradorismo–, se atreve a retar que su grupo mayoritario de diputados no acatará los amparos concedidos por un par de jueces de distrito de Morelos y Chiapas para frenar momentáneamente la discusión de esta polémica reforma al Poder Judicial de la Federación que está por aprobar la aplanadora de las bancadas de Morena y los partidos aliados PT y PVEM.

Invita IIJ-UNAM a interesante foro de constitucionalistas

Por cierto, a los interesados en el Derecho Constitucional les informamos que este miércoles 4 de septiembre, con motivo de la conmemoración del centenario del natalicio de extinto jurista Héctor Fix Zamudio, el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM llevará a cabo de las 08:30 a 20:15 horas, en modalidad mixta (presencial y/o a distancia), un foro académico con cuatro mesas de trabajo en las que participarán afamados constitucionalistas nacionales, sudamericanos y de España, entre los cuales no figura el ex senador y nuevamente diputado federal de Morena, Ricardo Monreal.

En cambio, uno de los participantes será el prestigiado doctor Salvador Valencia Carmona, ex rector de la Universidad Veracruzana (UV), investigador de tiempo completo del IIJ-UNAM y miembro del Sistema Nacional de Investigadores Nivel III.

Los coordinadores serán los doctores Diego Valadés, José María Serna de la Garza y José Daniel Chávez Sáenz.

El evento es gratuito, se transmitirá en vivo y está dirigido al público en general. Quien decida elegir la modalidad presencial puede acudir al Auditorio “Dr. Héctor Fix Zamudio”, en las instalaciones del IIJ-UNAM. Si prefiere seguirlo a distancia, puede conectarse a través de las plataformas virtuales Youtube IIJ UNAM y Aula Virtual Zoom.

El programa iniciará a las 8:30 horas, cuya inauguración correrá a cargo de Mónica González Contró y Diego Valadés, ex procurador general de la República, ex ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y ex director del IIJ-UNAM, del que es investigador emérito.

La Mesa 1, sobre Derecho Procesal Constitucional, tendrá un horario de 9:00 a 11:00 horas y la moderadora será Mónica González Contró (México). Los Ponentes serán Allan Brewer Carías (Venezuela), Edgar Corzo Sosa (México), Eduardo Ferrer Mac-Gregor (México), Domingo García Belaunde (Perú), José Ovalle Favela (México), Hernán Salgado Pesantes (Ecuador) y Karla Quintana Osuna (México).

La Mesa 2, sobre Derecho Constitucional, abarcará de 11:30 a 13:00 horas. Como Ponentes están anotados Manuel Aragón Reyes (España), Carla Huerta (México), Florentín Meléndez (El Salvador), José Palomino Manchego (Perú), José Ma. Serna de la Garza (México) y el doctor Salvador Valencia Carmona (México). La moderadora será María Elisa Franco (México)

La Mesa 3, sobre Derecho Comparado y Metodología de la Investigación, se realizará de
16:00 a 18:00 horas. Como Ponentes figuran Juan Luis González Alcántara (México), Nuria González Martín (México, María del Pilar Hernández Martínez (México), Patricia Kurczyn Villalobos (México), Cecilia Mora-Donatto (México), Julio César Ortiz (Colombia) y Jorge Sánchez Cordero (México). El moderador será José Daniel Chávez.

Y la Mesa 4, sobre Derechos Humanos, tiene un tiempo programado de 18:15 a 20:15 horas. Los Ponentes invitados son Carlos Ayala Corao (Venezuela), Jorge Ulises Carmona (México), Luis Raúl González Pérez (México), Mariela Morales Antoniazzi (Alemania), J. Jesús Orozco Henríquez (México), Lucía Raphael (México) y Alfredo Sánchez Castañeda (México). El moderador será César Astudillo.

Galardonan a Nacho Morales, munícipe priista de Altotonga

El pasado viernes 23 de agosto, más de 30 alcaldes del país recibieron el Premio Nacional al Buen Gobierno Municipal 2024 en una ceremonia organizada en las instalaciones del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP), en el Estado de México.

Uno de los ediles galardonados en la categoría Premio Estatal a la Mejor Gestión Integral Municipal de Veracruz fue el alcalde priista de Altotonga, Juan Ignacio Morales Guevara.

Seguramente no faltará quien crea que el “milagro” se lo hizo San Judas Tadeo, cuyas reliquias llegarán este lunes 2 de septiembre a la parroquia de esa cabecera municipal, pero no, no se trató de un acto sobrenatural ni de un mérito unipersonal. El certificado de premiación se lo ganó a pulso el Cabildo que encabeza Nacho Morales, quien le fue otorgado por el Instituto Buen Gobierno, la Federación Nacional de Municipios de México (FENAMM), la Conferencia Nacional de Municipios de México (CONAMM), el INAP y alrededor de 15 asociaciones, institutos, fundaciones y organismos municipalistas más que promueven el reconocimiento de los esfuerzos edilicios por mejorar la calidad de vida de la población, con el propósito de que sean replicadas por las administraciones de ese nivel de gobierno.

En sus redes sociales, Morales Guevara agradeció a las instituciones organizadoras por otorgarle este premio que, precisó, “ha sido un logro en conjunto con todos los que colaboramos en el Ayuntamiento de Altotonga para servir a la gente. ¡Gracias a todos por su confianza”, enfatizó el munícipe priista.

Aviso: Mañana no se publicará esta columna

Debido a un compromiso personal de su autor en la Ciudad de México, esta columna no se publicará mañana martes sino hasta el miércoles 4. Gracias a nuestros lectores y editores por su comprensión.