El trabajo del presidente Andrés Manuel López Obrador es aprobado por 62% de los ciudadanos, de acuerdo con la más reciente encuesta nacional de Buendía & Márquez para EL UNIVERSAL.

Este nivel de aprobación es prácticamente igual a la última medición de mayo y similar a las que se han registrado desde 2020. Antes del inicio de la pandemia registró una caída significativa, pero desde entonces se ha mantenido en términos generales en cifras ligeramente mayores a 60%.

Este patrón de relativa estabilidad es consistente con otros indicadores de la situación del país y del desempeño gubernamental. Por ejemplo, al medir el nivel de satisfacción a través de viñetas gráficas, 52% de los ciudadanos está satisfecho con el trabajo del Presidente, cifra idéntica a la de febrero de 2020.

El mismo patrón estilizado ocurre con la percepción del rumbo del país; 48% cree que va por buen camino, mientras que 41% opina lo contrario.

Una de las diferencias más notables en la proclividad de los ciudadanos a respaldar a López Obrador está relacionada con el nivel socioeconómico. Mientras que 69% en los estratos menos favorecidos lo apoyan, en los más altos la aprobación es de 51%.

La paciencia comienza a menguar en algunos sectores de la población. Mientras que a principios de este año los encuestados tenían opiniones divididas sobre si todavía era muy pronto para exigir resultados al gobierno del Presidente (49%), hoy la mayoría (59%) cree que ya trascurrió tiempo suficiente.

Este sector puede detonar cambios en la opinión pública, pues es menos receptivo al mensaje de que la situación actual es producto de la herencia de gobiernos anteriores. Actualmente, dentro de este grupo la evaluación del Presidente está dividida: 47% aprueba el trabajo de López Obrador y 48% lo reprueba.

Al respecto, vale la pena destacar que si bien la aprobación se ha mantenido más o menos estable, la evaluación en áreas específicas se ha deteriorado de manera paulatina, principalmente en corrupción e inseguridad. Hoy en día, las evaluaciones positivas en el tema de corrupción han disminuido 12 puntos porcentuales con respecto a febrero de 2020 (70% contra 58%) y en el área de seguridad pública la disminución es de 11 puntos (60% contra 49%).

La mayor parte del tiempo la evaluación de la economía se ha mantenido constante (62% califica positivamente el trabajo de López Obrador en este rubro).

No obstante, resulta interesante contrastar la evaluación del trabajo del Presidente en dichas áreas, con la percepción de la situación del país (sin mencionar a los encuestados el nombre de López Obrador).

Mientras que sólo 25% cree que la inseguridad ha mejorado o sigue igual de bien respecto a hace un año, 49% califica positivamente su labor en ese tema.

En el caso del combate a la corrupción, sólo 33% reconoce avances en el último año, pero 59% califica favorablemente al Presidente. En economía, sólo 38% observa mejoras en el último año, pero 62% respalda el trabajo del Ejecutivo.

El desencanto con la inseguridad se manifiesta en otros indicadores. Un 45% cree que la estrategia ha hecho al país menos seguro y 25% cree que no ha tenido efecto alguno.

Sólo uno de cada cuatro cree que la estrategia ha mejorado la seguridad. La mayoría (55%) opina que los niveles de violencia son señal del fracaso en la lucha contra el crimen organizado, mientras 40% cree que es una señal de éxito, acorde con la narrativa del gabinete de seguridad en respuesta a los hechos violentos de hace unas semanas en varios estados del país.

El Universal

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