El informe de la Comisión de la Verdad del Caso Ayotzinapa, presentado este jueves por el subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas, reveló tres hipótesis por las que el grupo Guerreros Unidos habría actuado en contra de los 43 normalistas, siendo una de estas que los confundirían con su grupo rival Los Rojos.
De acuerdo con el informe la presencia de los normalistas en Iguala, la cual se dio en un contexto entre el grupo criminal y los Rojos, por el que Guerreros Unidos estaría esperando represalias tras la incursión y toma de Carrizalillo.
Revela que se dio una inusual actividad telefónica entre mandos y operadores de Guerreros Unidos, en el que se constata la violencia tanto en contra de los estudiantes como contra civiles que se hallaba en el sitio que era considerado estratégico para el grupo.
Expone que se observó una red de comunicaciones que el líder estudiantil David Flores “la Parca”, procedente de Chilpancingo circula por el cruce de Santa Teresa con dirección a Iguala en una primera camioneta, sin percatarse de la presencia de algún retoñen, en el tramo carretero.
Al pasar en una segunda camioneta, estudiantes que viajaban en ella señalan que se percataron de la presencia de personas armadas, y fue entonces que se les cruzó un vehículo a media carretera el cual lograron esquivar y siguieron su paso a Iguala.
Conversaciones proporcionadas por la DEA, clave de la investigación
Los hechos se apoyan a través de conversaciones en mensajes captados por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés), que de acuerdo con Encinas, le fueron entregadas al gobierno a petición del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En las conversaciones uno de los líderes de Guerreros Unidos, José Ángel “N”, le comunica a su hermano Adán “N”, que entre los estudiantes de Ayotzinapa había integrantes del grupo contrario. Mientras que en una declaración Sidronio “N,” otro de los integrantes del grupo, informó que le reportaron que no eran estudiantes sino los Rojos.
Político MX