Francisco Concheiro, subsecretario de Educación Superior del gobierno federal, participó en el Foro “Retos y acciones de las universidades interculturales en México, frente a la pandemia por Covid-19”
En su participación dentro del Foro Nacional “Retos y acciones de las universidades interculturales en México frente a la pandemia por Covid-19”, Francisco Luciano Concheiro Bórquez, subsecretario de Educación Superior, destacó que las universidades interculturales se sitúan en el último de los peldaños de la educación en general del país.
En el evento transmitido el pasado 13 de agosto, a través de la plataforma Zoom, y organizado por la Asociación Nacional de Universidades Interculturales (ANUI), el funcionario resaltó que la actual pandemia colocó a este sistema en el espejo de mayor desigualdad.
“Nos colocó en una condición donde se reflejó lo tremendamente desiguales entre los desiguales de nuestro sistema de universidades interculturales.”
Recalcó que esta condición les fue heredada de los gobiernos antecesores, y a pesar de los esfuerzos realizados no se ha logrado revertir.
De manera inicial, existe una fuerte resistencia a modificar los presupuestos, “hemos avanzado puntualmente pero no tenemos todavía las condiciones de igualdad en el plano de la educación”.
En el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, celebrado el 9 de agosto, Concheiro Bórquez dio a conocer que el sistema de universidades interculturales registra un total de 16 mil estudiantes, la mayoría con becas del Programa Jóvenes Escribiendo el Futuro.
De este total, el 52 por ciento son mujeres y el 48 por ciento hombres. También indicó que el 60 por ciento de los hablantes de alguna lengua indígena son mujeres. En este ciclo escolar trabajaron mil 294 profesores, de los cuales 265 son hablantes de alguna lengua originaria.
Durante esta pandemia, dijo, el tema de la lengua fue colocado en el centro de la comunicación y en el de la solución e incorporación de usos y costumbres para el reforzamiento de la salud.
Actualmente se imparten 23 lenguas originarias y existen 135 comunidades próximas al entorno de trabajo. Por ello, representa un reto territorializar la acción y lograr un mayor acercamiento a éstas.
Subrayó que en el conjunto de la educación superior, los estados que tienen un mayor rezago educativo son: Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Tlaxcala y Quintana Roo.
“Tenemos un serio problema en la desigualdad, pues sólo el 1.2 por ciento de los estudiantes de licenciatura en instituciones de educación superior públicas y particulares se reconocen como hablantes de lengua indígena.”
Comentó que en el último periodo se propusieron cinco programas educativos (PE) de posgrado, uno de la Veracruzana, dos del Estado de México, y dos de Michoacán, pero sólo uno de ellos fue aprobado, de ahí que haya una desventaja de orden cultural y estructural.
Al asumir el compromiso de reforzar el tema de la investigación, el funcionario federal afirmó que en medio de esta pandemia hubo serios problemas dentro de la educación a distancia; sin embargo, reconoció el esfuerzo de profesores y rectores.
“El acceso a las tecnologías, la conectividad, y los servicios relacionados con el mundo digital y las llamadas culturas digitales nos son todavía mucho más distantes, las brechas son más que evidentes.”
Por tanto, con esta contingencia sanitaria se abren importantes retos para las universidades interculturales como la construcción del conocimiento en un diálogo de saberes con las comunidades.
Asimismo, la práctica docente debe construirse de otra manera, “se debe respetar y construir el saber con los estudiantes, darles una condición de liberación porque la educación no puede darse más que en ese principio emancipatorio y creativo”.
La UVI desarrolló acciones para el cuidado comunitario
Dentro de este foro, destacó la participación de la directora de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI), Lourdes Budar Jiménez, al lado de rectores de la región sur-sureste, entre ellos de Tabasco, Quintana Roo y Chiapas.
En su exposición, la investigadora y antropóloga de la Universidad Veracruzana (UV) habló sobre los retos y acciones responsables para el cuidado comunitario durante la pandemia por SARS-CoV-2, emprendidos por la institución que dirige.
Por tanto, en el escenario de esta pandemia, se implementó una campaña bilingüe para contrarrestar el contagio de coronavirus y los insumos fueron traducidos a siete idiomas originarios del país, en las diferentes variantes que se hablan en Veracruz, entre ellos: náhuatl, tének, hñähñu (otomí), tepehua, totonaco, zoque y popoluca.
También, se realizaron cápsulas radiofónicas bilingües con información acerca de los cuidados preventivos para evitar la enfermedad. La campaña también se tradujo a estos siete idiomas originarios y las cápsulas fueron distribuidas en radios locales, estatales y en Radio UV.
Asimismo, se refirió a la elaboración de carteles bilingües con información visual acerca de los cuidados preventivos, así como de cápsulas de video bilingües en siete idiomas originarios y una más en lengua de señas mexicana para la población con debilidad auditiva.
Dio a conocer que en la UVI se hizo un diagnóstico para conocer las condiciones de conectividad de los estudiantes y profesores, y con base en los resultados se desarrolló una propuesta que aseguró la enseñanza-aprendizaje y la evaluación equitativa del semestre Febrero-Julio 2020 de toda la comunidad estudiantil, donde existe libertad de cátedra pues se armonizaron todas las experiencias educativas (EE) de las sedes regionales con los contenidos mínimos para garantizar que los alumnos contaran con la misma información, ejercicios y tareas en todas las regiones.
Esto permitiría saber el nivel de conocimiento al regreso y que, en caso de una emergencia, cualquier profesor de la UVI pudiera hacerse cargo de los estudiantes sin importar su región.
Las asesorías, tutorías y retroalimentaciones se han llevado a cabo a través de redes sociales y mensajes de texto. También se ha dado seguimiento a los estudiantes que requieren más apoyo.
“Ni el mejor software ha garantizado una educación de calidad”
María de los Ángeles Gordillo Castañeda, coordinadora de Universidades Interculturales de la Dirección General de Educación Superior, reconoció el esfuerzo de cada universidad en su conjunto, toda vez que la Covid–19 vino a agudizar las desigualdades históricas, producto de las políticas neoliberales de décadas anteriores.
“La suspensión de actividades y el confinamiento por la pandemia también nos deja claro que ni el mejor software desarrollado ha garantizado una educación de calidad en estos tiempos”, subrayó.
UV/Claudia Peralta