El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, urgió a a todas las partes a actuar con máxima moderación ante la escalada de violencia en Gaza, en el inicio del mes sagrado del Ramadán que comienza este lunes.

El titular de la ONU pidió que se reanuden los acuerdos logrados durante los últimos meses, luego de que el sábado se registrara el lanzamiento de cohetes entre Gaza e Israel y bombardeos desde el Estado hebreo, en particular, contra la población civil.

Guterres mencionó que el coordinador especial para el proceso de paz de Oriente Medio, Nickolay Mladenov, quien trabaja a la par con Egipto, exhortó la víspera a las partes interesadas a restablecer la calma.

Desde la madrugada del sábado varios centenares de cohetes fueron lanzados desde Gaza a Israel. Tras el asalto, la aviación israelí replicó el ataque bombardeando diversos puntos de Gaza. Los enfrentamientos han causado víctimas mortales tantos israelíes como palestinas, de acuerdo con informaciones de prensa.

Aumenta la violencia y los muertos

La nueva escalada de violencia por el disparo de cohetes desde Gaza y los bombardeos de respuesta de Israel ha causado hasta el momento al menos 20 muertos: cuatro civiles israelíes y dieciséis palestinos en la franja, de ellos al menos doce milicianos.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ordenó a los militares que continúen los «ataques masivos» contra Hamas y la Yihad Islámica de Gaza, durante los enfrentamientos fronterizos más graves desde noviembre.

El ejército de Israel dijo que más de 600 cohetes y otros proyectiles fueron disparados contra ciudades y aldeas del sur de Israel desde el viernes, unos 150 de los cuales interceptó con su sistema antimisiles Cúpula de Hierro.

La fuerza armada israelí dijo que atacó unos 260 objetivos de grupos militantes de Gaza.

Poca gente por la calle, comercios cerrados, clases canceladas -en Israel el domingo es laborable- y el bloqueo de numerosas carreteras son también consecuencia de esta escalada, la peor desde 2014 por el número de proyectiles y por la muerte por primera vez de civiles israelíes por un cohete desde esa fecha.

«El Ejército está preparado para una ofensiva terrestre con tres unidades de infantería preparadas, dos de ellas ya desplegadas”, dijo en rueda de prensa telefónica el portavoz militar, teniente coronel Jonathan Conricus.

«Nos dieron la orden de prepararnos para un conflicto de varios días», indicó el portavoz, quien afirmó que la intención de Israel no es necesariamente ir a la guerra, sino responder a la agresión de las milicias de Hamas y la Yihad Islámica golpeando sus objetivos militares y demostrando capacidad defensiva.

La Yihad Islámica acusa a Israel de retrasar la implementación de entendimientos previos negociados por Egipto para poner fin a la violencia y aliviar las dificultades económicas de la bloqueada Gaza.

La represalia israelí devolvió la sensación de guerra a los palestinos en Gaza, donde la aviación bombardeó toda la noche.

Hasta ahora han muerto allí dieciséis personas -incluidas dos mujeres embarazadas y una bebé de catorce meses- y, de las bajas, al menos 12 son milicianos.

Israel dijo hoy que una de las embarazadas y su bebe, que perdieron la vida este sábado, tuvo como causa un cohete disparado por el movimiento islamista Hamas y no un misil israelí, versión que niegan los palestinos.

Varios edificios fueron destruidos hoy, las calles estuvieron vacías de tráfico y transeúntes y la mayoría de la población se quedó en casa, mientras colegios, universidades y bancos cerraron justo un día antes de que comience el mes sagrado de Ramadán.

Información de Excélsior