La tormenta tropical Aletta, primera de la temporada en el océano Pacífico, se formó este jueves en aguas mexicanas, mientras el país espera el impacto del huracán Beryl, de categoría 2, en costas del estado de Quintana Roo, Caribe mexicano, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
“Se ha formado la tormenta tropical Aletta a partir de depresión tropical Uno-E. Sus bandas nubosas generan lluvias fuertes, oleaje elevado y fuertes rachas de viento en Jalisco, Colima y Michoacán”, indicó el organismo en su reporte de las 15-00 horas (21-00 GMT).
En tanto, la coordinadora general del SMN, Alejandra Méndez Girón, explicó en un mensaje a medios que la formación “se localizó a 310 kilómetros al oeste-suroeste de Manzanillo, Colima y a 315 kilómetros al sur-suroeste de Cabo Corrientes Jalisco».
Precisó que registra vientos de 65 kilómetros por hora y rachas de 85 kilómetros por hora y se desplaza hacia el noroeste a 17 kilómetros por hora, “y ocasionará lluvias fuertes sobre Jalisco Colima y Michoacán, a partir de mañana se prevé que se aleje de las costas del país».
Las autoridades mexicanas pronosticaron en mayo hasta 41 ciclones con nombre en el océano Atlántico y el Pacífico, de los que al menos cinco impactarían al país.
En la actual temporada de huracanes del Atlántico, México ha recibido dos tormentas tropicales y espera para la noche de este jueves el impacto del huracán Beryl, de categoría 2, en costa del estado de Quintana Roo, Caribe mexicano.
La primera tormenta fue Alberto, el pasado 20 de junio, que dejó seis muertos en Nuevo León, estado de la frontera norte de México, además de destrozos e inundaciones en la capital Monterrey, la segunda ciudad más poblada de México.
Mientras que la segunda fue Chris, que tocó tierra en los primeros minutos del lunes 1 de julio en el estado de Veracruz y que dejó inundaciones en el centro y oriente del país.
El año pasado el balneario de Acapulco, estado de Guerrero, en el Pacífico mexicano, sufrió el paso del huracán Otis, el ciclón más fuerte de la pasada temporada, que tocó tierra el 25 de octubre como huracán de categoría 5, con vientos sostenidos de 260 kilómetros por hora.
El fenómeno se convirtió, de acuerdo con el Comité de Huracanes de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), “en el huracán más fuerte jamás registrado en tocar tierra en el Pacífico oriental”, causando al menos 51 muertos y 34 desaparecidos, y unas pérdidas de unos 3.200 millones de dólares.
M°1
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