El motor de un avión Boeing 737-800 se incendió y dejó de funcionar en pleno vuelo, en Nueva Zelanda, con 67 pasajeros y seis miembros de tripulación a bordo. Afortunadamente, no se registraron lesionados, tras el aterrizaje de emergencia.
Los hechos sucedieron durante un vuelo de la aerolínea Virgin Australia con destino a Melbourne, Australia, este 17 de junio.
De acuerdo con el director de la aerolínea, la aeronave habría tenido un choque con un pájaro, provocando el incendio en uno de sus motores y el desvío del vuelo hacia la ciudad neozelandesa de Invercargill, donde aterrizó de emergencia.
Algunos testigos grabaron el incendio del motor, poco después de su despegue del aeropuerto de Queenstown. Las autoridades del aeropuerto señalaron que no hay conocimiento de personas lesionadas y que los pasajeros pasarían la noche hospedados en Invercargill, antes de programar nuevos vuelos.
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