Desde hace muchos años cada 7 de junio se conmemoraba el Día de la Libertad de Expresión, fecha instaurada en 1951 por los editores de periódicos y el entonces presidente de México Miguel Alemán Valdés, con el fin de destacar la trascendencia de una prensa libre e independiente para la democracia mexicana. Sin embargo, en el país suman más de 160 periodistas asesinados desde el año 2000, a tenor de la organización Artículo 19. Del total, 44 se han registrado durante el gobierno actual de Andrés Manuel López Obrador y 47 en el mandato anterior de Enrique Peña Nieto.
“La libertad de expresión es un derecho humano básico, constitucional, fundamental e inherente y necesario a la naturaleza humana, consagrado en los artículos 6 y 7 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en el ámbito internacional lo podemos encontrar contemplado dentro del artículo 19 de la Declaración de los Derechos Humanos de 1948”, refiere en un artículo la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH). En los últimos reportes de la organización World Justice Proyect se cita una encuesta formulada en 136 países donde se concluye que los medios de información actúan como un contrapeso frente a los poderes autoritarios.