A 16 años de su partida, el mundo del entretenimiento infantil sigue recordando a Rui Torres, famoso por su papel en Art Attack, el cual impactó a una generación de jóvenes creativos en Latinoamérica.

Desafortunadamente, la vida de este talentoso presentador mexicano terminó de manera trágica en 2008, dejando atrás un legado de inspiración, pero también un halo de misterio respecto a las circunstancias de su fallecimiento.

Rutilio Torres Mantecón, su nombre de nacimiento, es aún recordado por su notable inteligencia y su paso por importantes instituciones educativas como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM). Rui Torres no solo se destacó en el ámbito televisivo sino también en su vida académica.

Con un inicio prominente, Torres fue uno de los estudiantes de mayor puntaje en la convocatoria de ingreso de la UNAM en 2001, elegido de entre más de 53,000 aspirantes para estudiar Psicología. Aunado a ello, Rui expandió sus horizontes tras ingresar a la Ingeniería en Telemática en el ITAM, marcando así el comienzo de una carrera llena de éxitos.

El ápice de su trayectoria le llegó a principios del nuevo milenio al joven mexicano. Después de obtener la beca Baillères por sus colaboración en la conservación de la obra de Diego Rivera, fue llamado para conducir el programa Art Attack, programa creado originalmente por la cadena británica ITV en 1990 pero del que Disney obtuvo los créditos.

Rui Torres participó con éxito en dos de las temporadas de esta emisión grabada en Londres, pero decidió volver a México en 2003 para continuar con sus estudios académicos en la Ingeniería en Telemática y pasar más tiempo con su familia. En el programa fue reemplazado por el conductor español Jordi Cruz.

Muerte repentina

Ya alejado de los reflectores y con un perfil discreto en su vida personal, era poco lo que se sabía del oriundo de la Ciudad de México; sin embargo, fue el 24 de febrero del 2008 cuando se dio a conocer su partida de este plano terrenal, misma que consternó a toda una generación.

Se cree que estaba atravesando un periodo de depresión profunda tras el fallecimiento de su hija de dos años, víctima de pulmonía. Este devastador golpe es referido por algunos como el posible detonante de su trágica decisión de consumir una sobredosis de medicamentos antidepresivos.

La falta de declaraciones oficiales sobre las causas exactas de su muerte todavía genera rumores y teorías entre sus admiradores y el público en general.

La travesía de Rui Torres, desde su brillante vida estudiantil hasta su ascenso a la fama y posterior retiro, enmarca una narrativa que va más allá del éxito profesional, adentrándose en los desafíos personales a los que se enfrentó.

Infobae

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