“Nunca como ahora ha sido tan necesario priorizar la salud mental”, escribió Dévora Kestel, Directora del Departamento de Salud Mental y Abuso de Sustancias de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“El triple impacto del COVID-19, el cambio climático y las guerras y conflictos en curso exigen un altísimo peaje a nuestra población”, agrega. Asimismo, la OMS señala que actualmente la depresión es una de las principales causas de discapacidad.

Además, el organismo internacional detalla que el suicidio es la segunda causa de muerte entre personas de 15 a 29 años.

En este contexto, vale la pena conocer a qué nos referimos cuando hablamos de salud mental. Igualmente enlistaremos algunos consejos para procurarla de la mejor manera posible.

¿Qué es la salud mental?

La OMS define a la salud mental como un “un estado de bienestar mental que permite a las personas hacer frente a los momentos de estrés de la vida, desarrollar todas sus habilidades, poder aprender y trabajar adecuadamente y contribuir a la mejora de su comunidad”.

Asimismo, el organismo detalla que “es parte fundamental de la salud y el bienestar que sustenta nuestras capacidades individuales y colectivas para tomar decisiones, establecer relaciones y dar forma al mundo en el que vivimos”. Además, se trata de un derecho humano fundamental.

Al contrario de lo que muchas personas consideran, la salud mental no es un tema que depende exclusivamente de uno mismo. En realidad depende también de determinantes sociales y estructurales, como el acceso a diversas garantías (una buena educación, alimentación, trabajo y viviendas dignas).

En consecuencia, la “exposición a circunstancias sociales, económicas, geopolíticas y ambientales desfavorables, como la pobreza, violencia, desigualdad y degradación del medio ambiente, también aumenta el riesgo de sufrir afecciones de salud mental”, señala la OMS.

Uno de los principales obstáculos que enfrentamos como sociedad al momento de hablar sobre salud mental, es que no sabemos identificar estrés, ansiedad o depresión. Así lo señala Juan José Martí Noguera, especialista en Salud Digital de la Universidad Internacional de Valencia.

“Aprendemos a distinguir resfriados de gripes o alergias. Pero no nos preparamos como sociedad para comprender y gestionar nuestra salud mental. Y el desconocimiento, por lo general, nos empuja a alejarnos de lo que no entendemos”, destaca Noguera.

Asimismo, señala que “poder tener acceso a un tratamiento a tiempo, como en toda enfermedad, es fundamental en salud mental. Pero faltan medios, tanto para diagnosticar como para tratar”.

¿Cómo detectar problemas en la salud mental (ansiedad, estrés, depresión)?

Ahora entendemos que no representa un tema individual, además de tener consecuencias en diversas escalas sociales. En este sentido, es importante aprender a identificar los síntomas de una baja salud mental, así como algunos hábitos que nos ayudan a mejorarla.

Fernando Lino Vázquez González, profesor de Psicología Clínica de la Universidad de Santiago de Compostela, señala que una persona deprimida proyecta una serie de manifestaciones conductuales, cognitivas, emocionales, motivacionales y somáticas.

  • Conductualmente: evitación de tareas cotidianas e interacciones sociales, falta de autocuidado, desamparo, desesperanza, autodesprecio, vacío, entre otras.
  • Cognitivamente: dificultades de concentración, problemas de memoria, dificultad para tomar decisiones, pensamientos negativos e ideas de muerte (no necesariamente suicidio).
  • Motivacionalmente: incapacidad para experimentar placer, apatía, desinterés, abulia.
  • Somáticamente: alteraciones del sueño y apetito, disminución del deseo sexual, cansancio y molestias físicas.

Una vez identificadas las señales, es necesario acudir a un especialista de la salud mental para recibir una orientación correcta y un tratamiento adecuado. No obstante, también existen algunos hábitos cotidianos que pueden acompañarnos para cuidar nuestra mente.

Consejos para cuidar y mejorar nuestra salud mental

En este sentido, el Instituto Superior de Estudios Psicológicos (ISEP) propone algunos consejos para “cuidar y gozar de una buena salud mental”.

  • Descansar correctamente: Seguir una rutina a la hora de irse a dormir, es decir, acostarse y levantarse a la misma hora todos los días e intentar descansar al menos 8 horas diarias.
  • Hacer ejercicio físico: Realizar algún tipo de actividad física de manera regular puede ayudar a mejorar el estado de ánimo: Es recomendable que este ejercicio se realice al aire libre.
  • Comer de forma saludable: Mantener una dieta equilibrada, evitando los azúcares, el alcohol o la cafeína..
  • Tener la mente ocupada: Disfrutar del tiempo libre con alguna actividad que nos haga sentir bien.
  • Proyectar pensamientos positivos: Gestionar los propios pensamientos enfocándolos hacia elementos positivos de la vida y sosteniendo siempre un sentido de esperanza.
  • Mantener la comunicación: Es importante mantener el contacto con otras personas. Socializar ayuda a mejorar el bienestar personal.
  • Relajarse: Intentar conservar la mente relajada y reducir todo aquello que genera estrés.
  • Ponerse metas: Es interesante que diariamente se fijen unos objetivos que se puedan alcanzar y se establezcan prioridades en lo que se desea lograr.
  • Usar las nuevas tecnologías correctamente: Reducir el tiempo que se le dedica a los dispositivos electrónicos.
  • Solicitar ayuda cuando sea necesario: Hay que ser sincero con uno mismo y en caso de no sentirse bien, acudir a un profesional de la salud mental.

Reporte Índigo

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